Capítulo 2

Al día siguiente, en cuanto la clase de Matemáticas terminó, Raina guardó sus materiales. Bajó las escaleras de la escuela y divisó a Clarisse sentada en una banca, donde la había citado. Estaba ansiosa por preguntarle sobre FOREST y demás cosas. Nunca tenían secretos entre ellas así que no se explicó por qué era diferente esa vez.  Llevaba el uniforme del instituto; una chamarra rosa excéntrica oversized con muchos pines, su ondulado cabello color caoba estaba esponjado, como un peinado de la década de los ochentas. Cuando Raina llegó hasta ella, su amiga se levantó y agarró a Raina por el brazo para que caminaran juntas.

-Hola, Rai ¿Cómo estás? ¾ Esa formalidad solo sucedía cuando Clarisse estaba muy feliz y trataba de esconder algo, pero no le dio mucha importancia.

-Muy bien, mi madre me llamó ayer.

-¿Chiara te llamó? ¡Que novedad! ¾Inclusive a su mejor amiga se le hacía eso raro.

¾-Lo sé. Pero, ¿tú cómo estás? ¿Algún nuevo chisme? -Clarisse siempre estaba enterada de todo, le podrías preguntar por polémicas del día anterior y ella se las sabría de memoria, aunque no era por eso por lo que Raina le hacía esa pregunta. Quería que le contara sobre FOREST.

-Bueno, pues a James Beggler, el chico millonario de nuestro salón, el presumido ese… ¿sabes de quién te hablo?

-Sí.

-Pues se le murió su hermana, la recién nacida.

-Lo siento mucho por él¾En realidad Raina no mostraba ni un atisbo de tristeza.

-Si, aunque se lo merece por presumido.

-Creo que ya había pagado por ser tan presumido cuando perdió a su hermana mayor ¿no te parece?

-Pero Evalyn se fue con su guapísimo y rebelde novio, en realidad, no la perdió.

-De todos modos, es triste, la pequeña apenas había nacido.

       Raina y Clarisse se pararon para sacar de sus mochilas unos libros que se habían prestado, siempre lo hacían. De hecho, fue por los libros por los que se conocieron, ellas eran las “raritas” del salón. Aunque a Raina le parecía estúpido que la gente creyera que a las personas a las que les gusta la literatura son raras y aburridas. ¡Qué equivocados estaban! Si supieran cuantas aventuras y experiencias increíbles se estaban perdiendo, se lo pensarían dos veces antes de criticar a los libros.

      Clarisse comenzó a decir lo que le gustó de Trono de cristal  pero la verdad era que Raina no le estaba prestando mucha atención, en realidad ella solo quería esperar a que terminara de hablar para hacerle la pregunta que tanto la carcomía por dentro.

-¿A ti que te pareció La mansión de las furias?

-Eh, bien supongo. Pero, Clarisse, te quería preguntar algo -Raina dirigió su mirada hacia Clarisse, quien era un poco más alta que ella, y se detuvieron.

-Dime.

-Quiero saber más sobre FOREST.

    Clarisse volteó a mirar hacia otro lugar y tragó saliva, nerviosa. Raina notó que Clarisse sabía lo que le estaba preguntando pero trataba aparentar lo contrario.

-¿De qué hablas? - se le ocurrió decir.

- Sabes de qué hablo. Esa organización que hace vacunas y exp…

      Clarisse jaló a Raina del brazo de manera brusca y subieron las escaleras rápido. Entraron a los baños de chicas, la chica de cabello color caoba cerró con seguro la puerta de la entrada, le dirigió una mirada a las cabinas individuales pero no verificó si alguien se encontraba dentro.

 Clarisse se volteó a verla con una expresión seria.

-¿Quién te ha hablado de eso?

-Me mandaron un correo y me dijeron que tú tenías algo que ver con ellos¾Raina se enojó un poco al recordar que su amiga no le había hablado de FOREST antes.

-Sí, y no te lo dije porque me lo prohibieron, créeme que si hubiera podido lo habría hecho.

-De todos modos, quiero que me digas más de ellos. Me dijeron que querían que probara el prototipo de una vacuna.

-Ya debe estar lista…-susurró Clarisse-.Te lo diré a grandes rasgos: son una organización secreta, quieren crear una vacuna que combata todas las enfermedades terminales del ser humano y para ello experimentan en humanos.

-Eso es ilegal- Raina se cruzó de brazos

-Pero no ha pasado ningún accidente ni nada por el estilo. Todo lo contrario, ya ha habido progresos. Debes aceptar probar la vacuna, mejor dicho, es un suero, lo llaman el Suero de Evolución.

-No, es muy peligroso. ¿El gobierno está enterado de esto?

   Clarisse se tarda en responder.

-Creo… ¿que sí?

-Es una locura.

-Tienes que aceptar probarla; ellos han trabajado por años en esto.

  Raina abre la puerta del baño para irse pero Clarisse se pone entre ella y la puerta.

-Por favor. Deja que por lo menos te enseñe las instalaciones y los procesos que utilizan para crear el suero y todo eso. ¿Te llevamos con ellos mañana después de clases?