¿cómo hacerle Entender?

Capítulo 19

Al día siguiente Catherine se había levantado con su humor de siempre, comió una de sus píldoras y siguió con su trabajo, no sin antes haberle dado su mamila a Reinsdyr. Elsa sabía que esa actitud despreocupada y fresca sólo podía significar una cosa: había vuelto a sepultar sus sentimientos. Eso era malo, no le cabía duda, sin embargo, le sorprendía la facilidad con lo que lo hacía; claramente debido a sus años de práctica.

La platinada solventó no hacerle más preguntas ese día y continuar como si nada hubiese pasado. No obstante, una parte de ella quería volver a ablandarla y mostrarle que ahora tenía a alguien que sería su apoyo en sus momentos de vulnerabilidad, pero debía ser más paciente, entendía bien que no debía presionarla demasiado, y vaya que ya había hecho exactamente eso el día anterior.

  • Catherine, cuando volví estabas dormida. –Elsa no iba a hacer preguntas, pero eso no significaba que no quería entablar una conversación.
  • Sí. –Respondió secamente y sin mirarla, trabajando sin distraerse. La platinada quiso creer era lo hizo porque es lo que hacía normalmente y no porque estuviera molesta.
  • Honey me dijo que todo estaba bien, no tienes que ir si no quieres.
  • Está bien.
  • Guri me escuchó y ella sí que se puso triste -la chica se detuvo un instante y volvió a trabajar-, dijo que te extrañaba mucho.
  • No entiendo por qué, sólo fue día el que pasamos juntas.
  • Ja, ja, ja, para algunos eso significa más que para otros, pero le dije que querías quedarte para cuidar del reno, eso bastó para que se calmara. –Y eso último bastó para que Catherine se girara a Elsa.
  • ¿Qué se calmará? ¿Estaba llorando?
  • Algunas lágrimas ¿Por qué? –Elsa conocía perfectamente la respuesta, pero sabía que la joven no lo iba a admitir.
  • Nada. –Dicho eso volvió a su trabajo. Esa habría sido una oportunidad que Elsa habría usado para hacer que Catherine se abriera con ella, pero su decisión seguía, no la iba a presionar.
  • Je, je, de acuerdo. Como dije, ella se calmó cuando mencioné a Reinsdyr.
  • Bien.
  • Sí.

Elsa pensó en seguir hablando, pero no encontraba algo que no la hiciera tener la tentación de hacerla hablar se lo sentimientos, por lo que prefirió mantenerse callaba y ayudarle en la construcción del escáner; después de todo, por eso es que estaba viviendo con ella, además de que por su culpa debía empezar desde el principio. A pesar del silencio, ninguna de las dos se sentía tensa, Catherine estaba totalmente absorta en lo que hacía y Elsa no podía perder cuidado en sus movimientos para poder predecir qué nueva pieza o herramienta le pediría; sin mencionar que también debía estar atenta al reno en caso de tener que sacarlo para que pudiera hacer sus necesidades.

El resto del día continuó así, perfectamente tranquilo y sin discusiones. De hecho, el ambiente fue tan tranquilo para Catherine, que estuvo más concentrada y rápida que otras veces que, para el atardecer, ya había avanzado hasta la mitad del aparato; cosa que le había costado varios días con el anterior (seguramente debido a las conversaciones que Elsa se esforzaba por mantener, para acostumbrarla a la interacción humana).

  • Será todo por el día de hoy, Reinsdyr necesita dormir.
  • Está bien. Hoy avanzaste mucho.
  • Es porque no estuviste interrumpiendo tanto, estabas más callada.
  • Tenía que dejarte concentrar luego de haber provocado que el escáner anterior explotara.
  • También lo creo, ahora hay que prepararnos para dormir. –A Elsa le daba gusto que Catherine tuviera su sonrisa de siempre, pero esperaba que sólo le respondiera con un “gracias”, en lugar de darle la razón al decir que todo era su culpa; lo era, pero no esperaba que lo recalcara.
  • Claro.

Antes de dormir, la joven le dio al pequeño reno su mamila y al terminársela, éste corrió a la cama de Catherine; se recostó en su lugar de siempre, esperando a la chica, ella no lo hizo esperar mucho y en seguida se acostó junto a él. En un principio, a Elsa le daba gusto que Catherine se llevara tan bien con él animal, pero en seguida de notar lo rápido y fácilmente que aceptó la cercanía de Reinsdyr que la suya, la hizo sentir celosa. Trataba de repetirse varias veces que lo importante era que la joven tuviera lazos afectivos, fuera, con quien fuera, pero no lo podía evitar, deseaba que el primer lazo (después de Anna) hubiera sido con ella.

Para cuando amaneció, Catherine estaba de nuevo en su mesa de trabajo con sus ojos brillantes y enorme sonrisa llena de enardecimiento por estar cada vez más cerca de terminar. Inmediatamente Elsa se puso de pie y fue a ayudarla. Por la velocidad de las manos de la científica, no le cabía duda de que ese mismo día iba a terminar; eso si no empezaba a alentarse para prestar la atención que decía debía tener con ese modelo.

Nuevamente, la platinada decidió que no hablaría tanto con Catherine, todavía quería darle espacio, y ya habría tiempo para hacerla hablar en su día de descanso, después de todo no iba a ir con la tribu de los Northuldra. Sin embargo, también se preguntaba que, si lograba calmarse lo suficiente el resto de la semana ¿Cambiaría de opinión con respecto a ir con la tribu? Era probable que no, ya que ella no era de las personas que cambian de parecer a la hora de tomar decisiones, pero no quiso descartar esa posibilidad, sin importar lo improbable que fuera.

  • Avanzas mucho más rápido está vez, más que ayer.
  • Todo esto lo había hecho ya con el anterior, recuerdo perfectamente en qué detalles debía tener más cuidado; sin mencionar que hoy también estás callada.
  • ¿Prefieres que hable? –Preguntó con una sonrisa, pero la chica no parecía muy dispuesta a responder.
  • Haz lo que gustes. –Respondió finalmente con su natural frialdad, pero Elsa ya no se molestó.
  • Creo que prefiero no hacerlo, quiero ver ese escáner terminado.
  • Pues estás de suerte, he terminado. –Catherine se quitó sus guantes de protección y alzó en alto su nuevo aparato.
  • No lo puedo creer. Cuatro días y medio te constó llegar casi al final con el otro y con este sólo taraste día y medio.
  • Ya te lo dije, el otro era un campo nuevo y debía tener mucho más cuidado, con éste ya sabía qué hacer, fue como armar un rompecabezas que sabes de memoria.
  • Entiendo.
  • Ahora sólo necesito hacer la prueba de la fruta otra vez, -Catherine tomó otra de las manzanas, la colocó sobre la plataforma del escáner, le dio a Elsa su máscara y encendió su grabadora de voz-. Bitácora de Larousse: El modelo número 4.2 está terminado. Nota: Es llamado 4.2 porque el 4.1 fue destruido antes de siquiera estar terminado. Ya todo está preparado para iniciar con la prueba de la manzana; veremos qué pasará. -Catherine oprimió el botón de su control y la maquina se encendió. En ésta ocasión no ocurrió nada fuera de lo normal, el escáner funcionó bien, no hizo explosión y envió las imágenes de la composición de la manzana a la computadora de la joven, ella las revisó con cuidado y no encontró ninguna señal de calcinación en el interior de la fruta-. ¡Por fin! ¡¡EL MODELO 4 FUNCIONA!!
  • ¿Funciona?
  • ¡Sí! ¡Funciona! No explotó, no desintegró nada, ni lo calcinó por dentro. El escáner 4.2 es lo que necesitaba. Ahora podré pasar a la siguiente fase, debo escanearte a ti y al resto de los espíritus; aunque para eso necesitaré crear aparatos de diferentes tamaños, pero no será un problema. –En ese momento apagó su grabadora de voz.
  • Felicidades, por fin construiste el escáner.
  • Sí, pero como dije, debo trabajar en los diferentes diseños, esto será más sencillo.
  • ¿Empezarás ahora?
  • Por supuesto, no puedo esperar.
  • Está bien, entonces te ayudaré.
  • Claro.



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En el texto hay: fanfic, frozen, elsa arendelle

Editado: 07.03.2025

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