Como la primera vez

35. Ataque en la cama

Jonathan

Miré a Katherine partir con aquel idiota y no supe que hacer. El calor del momento y el alcohol en mi sistema solo ocasionó que el malentendido entre nosotros dos aumentara. Miré a Juliana esbozar una sonrisa a mi lado y suspiré. Debía causarle demasiada gracia saber que las cosas estaban tan mal entre mi ex novia y yo, pero lamentablemente para ella, eso no significaba que había espacio para más coqueteo de su parte.

—Ya me has ayudado bastante, gracias—decidí que era mejor despedirnos abajo y no comenzar algún tipo de rumor, como que la colé en mi habitación con otro tipo de intenciones.

—Descuida, puedo llevarte hasta la puerta. Ya te expliqué muchas veces que no abusaré de ti—sentenció mientras llevaba sus manos a mi cuello.

Entendía que su coquetería no se iría en un buen tiempo, por lo que preferí no hacer un escándalo y solo di un paso hacia atrás, como si no me diera cuenta de lo que estaba intentando. Ella realizó un puchero y yo me metí las manos a los bolsillos.

—Es mejor que no sigamos viéndonos.

Juliana levantó una ceja y me miró expectativa.

—¿A caso es por qué esa chica tonta se molestó contigo y salió huyendo como mocosa de primera? —bufó—. Por favor, Jonathan. Si esa leve provocación fue suficiente para hacerla perder los estribos, creo que es un contrincante muy fácil de vencer.

—Es que no se trata de quien gana la pelea o una tontería de esas. Aún si Katherine no estuviera de por medio, lo nuestro nunca hubiera funcionado. Yo ya no soy lo que buscas, ni tampoco tú eres lo que yo necesito. En cuanto me gradúe me alejaré de todo este mundo y forjaré mi carrera de cero. Lo siento, en otra situación tal vez podrías haber tenido otro tipo de relación, pero ahorita no es posible.

Contemplar como su rostro se deformaba, no era nada agradable de presenciar. Ni siquiera porque se tratara de la mismísima Juliana Thorner. Sus ojos parecían desconcertados y su labio temblaba, sabía que deseaba argumentar algo más para convencerme, pero ella ya era consciente de que ninguno de sus trucos funcionaría conmigo. Así que sin desear perder más su dignidad, alzó la cabeza y se paró como solía hacerlo, altanera y elegante.

—Está bien, Jonathan. Si tú buscas un futuro tan mediocre como ese, no esperes que te aliente. Sin embargo, respetaré tu decisión—se acercó a mí, posando su cara en mi cuello y depositó un beso en mi mejilla—. Que pases buena noche.

Se dio media vuelta, de pronto luciendo más linda que nunca y se marchó agitando las caderas, pareciendo que había conseguido absolutamente todo lo que quería. Fue entonces que comprendí que algo como esto no sería suficiente para derrumbarla, lo que me provocó un alivio inmenso, pues no tendría que seguir luchando contra ella. No es que tuviera miedo de perder, pero tampoco era fanático de tener que estar recordándoles a las personas quién era Jonathan Parker. Avancé hasta mi puerta e ingresé a la habitación. Me estiré la corbata y la lancé al suelo, aventé mis zapatos de manera descuidada y me metí a la cama sin ánimos de nada más. Observé la de Katherine vacía y el enojo volvía a fluir en mi interior. Verla salir de aquí con Edward, fue suficiente para nublar mi juicio y ponerme a soltar un montón de idioteces. Sabía que tenía que disculparme sinceramente con ella y aclarar todo lo sucedido con Juliana, pero simplemente no podía decirle la verdad y quedar como el idiota que aún estaba colado por ella, mientras que Katherine pasaba el rato muy alegre con Edward. Me llevé una almohada al rostro y pensé que al rato que regresara buscaría una manera de arreglar las cosas definitivamente.

Pero nunca llegó.

Las horas pasaron, pasaron y pasaron y ella no se presentó a dormir. Una enorme sensación de disgusto me consumió y no pude pegar un ojo en toda la noche. Analicé la situación y no podía pensar en nada que no fuera a Katherine en el cuarto de Edward. Era tan frustrante saber que todo acabó de aquella manera debido a mi propia negligencia y a la falta de conocimiento sobre mis verdaderos sentimientos. ¿Pero quién podía culparme? Si toda la vida me dediqué a fingir que estaba bien aunque no me encontraba así, cuando pasé pretendiendo que no amaba con locura a esa chiquilla rara que parecía quebrarse cada que me alejaba de ella para que mis padres no intentaran hacerle algo. Recordé nuestro primer beso, como si hubiera sido un día atrás y me llevé una mano a la boca. Esa tarde llovió a cantaros y Katherine me invitó a refugiarme en su casa, sus padres no estaban porque desde siempre trabajaron día y noche para darle lo más que podían a su hija, así que estábamos los dos solos en su sala, mientras ella buscaba dos toallas para secarnos. Katherine se veía más bonita que de costumbre, con su cabello alborotado y despeinado, aun mojado y sus lindas mejillas sonrosadas, por el frío viento que nos acompañó en todo el desastroso trayecto. Era tan bonita y delicada, que me daba miedo acercarme a ella, no deseaba lastimarla, pero a la vez, mi anhelo entraba a contienda y me exigía a gritos que la tomara del brazo y la pusiera en mi pecho. Y como si ella entendiera exactamente lo que quería, colocó su rostro a escasos centímetros del mío y nos miramos intensamente a los ojos. Estuvimos un buen rato, explorando el alma del otro, mientras nuestras respiraciones comenzaban a tornarse inestables, ella entre abrió sus labios con gentileza y me invitó a unirme a ellos. Sin poder resistirme, terminé de cerrar la distancia que nos separaba y la besé. Jamás podría olvidarlo, porque para mí Katherine nunca fue un mal recuerdo, sino una de las pocas personas que realmente llegué a querer. Pensé en la manera en que se aferró a mí y me imploró que no la dañara, y en lo iluso que fui, al jurarle que nunca me atrevería a hacerlo. Le prometí que sería igual que aquel power ranger que le encantaba unos años atrás y ella comenzó a reír. Pero al final, terminé siendo el villano de su vida y eso solo me producía una tremenda amargura.



#34 en Joven Adulto
#386 en Otros
#157 en Humor

En el texto hay: drama, venganza, exnovio

Editado: 07.12.2020

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.