No sabía cuanto necesitaba desahogarme, Josh me escucho, no opino ni me cuestionó nada, solo se limitó a abrazarme y decirme que todo será mejor en poco tiempo... Y ahora le creo, eh dormido mejor, y eh llorado menos, sin embargo esa sensación de sentirme rota sigue en mi.
Estos días eh ido recapitulando cada día, cada detalle, y creo que las señalas estaban, sólo, me enamore y no quise ver más allá, como el gran detalle de ser estudiante, pero sacar tiempo para trabajar y venir a verme, ¿en que momento ponia atención a la escuela? Creo que romántico el hecho de que siempre estuviera ocupado, y aun así me daba tiempo a mí, sonrió para no llorar y esque ahora ya nisiquiera siento coraje con el, o bueno sí, no me voy a mentir, pero empiezo a ver esos detalles y me da coraje conmigo misma, por haber sido tan fácil.
Llega la tarde en medio de recuerdos y análisis, por suerte tenemos periodos de recuperación, y en esta ocasión no tengo que recursar materias, así que estoy en casa, y me hace bien, me dispongo a comer, pero algo en mis manos me pica, así que decido tomar el móvil y curiosear, entro a la red social y tecleo su nombre... Página no disponible, me indica el navegador, y no se como describir la sensación que me invade, siento algo atorado en la garganta y un huevo formándose en mi estómago, como si hubiera recibido un fuerte golpe, oigo el sonido de la puerta y como puedo me pongo de pie, avanzó hacia ella, pero comienzo a sentir que me falta aire, con torpeza llego a la puerta, tomo el picaporte, y al abrir todo se nubla y no se más...
-te amo, nunca tengas duda de eso-recibo un beso profundo, pero tierno mientras sonrió
-lo se, tampoco lo dudes-hablo, y continuamos entregándonos el uno al otro.
Poco a poco la imagen se distorsiona, poniéndome a mi en el centro de una calle desierta, mirando para todos lados, buscando no se que, avanzó sin saber hacia donde me dirijo, y trato de alcanzar un bus, pero este no se detiene, me invade la desesperación y de nuevo la imagen se va...
-Jane? - oigo a lo lejos y poco a poco intento abrir los ojos
-donde, qué, donde estoy? - digo desorientada y tocándome la cabeza, ya que la siento pesada.
-tranquila - escucho la voz de Josh- te desmayaste, ¿estas bien aquí o te llevo a tu recamara? - dice y caigo en cuenta que estoy en uno de los sillones de la sala, e intento pararme, pero un nuevo mareo me invade y me detiene de inmediato.
Como puedo lo logro al tercer intento, pero solo logro incorporarme, Josh me explica lo poco que vio, y yo le hablo de lo que vi, ambos concluimos qué han sido días pesados, y que su dormir bien ni comer, esto había tardado en suceder, se asegura de dejarme en mi recamara, y como puede me prepara un sandwich con jugo de naranja, lo cual agradezco, lo recibo y lo como bajo su mirada, y me recalca qué por mucho que duela, no debo dejar que me mate, sin embargo cuando le pregunto como se hace, no obtengo respuestas.
Termino los alimentos y nos despedimos, estoy cansada, y lo nota, así que se retira, pero antes de eso me dice que puedo llamarlo para cualquier cosa, lo veo irse, y a los segundos la puerta cerrarse, estando sola es cuando. Más mal me siento, y me resulta algo irónico, qué sea el quien me este sosteniendo en estos momentos, mi crush, si hace 8 meses hubiera hablado con el, tal vez todo esto se habría evitado, pero no fue así, tal vez las cosas debían ser así, sólo, qué me hubiera saltado ciertas partes.