Hace una semana que respiro diferente, es el mismo aire, pero ya no espero que el viento lo traiga a mi, eh pasado mis días mejor, Josh a sido mi compañía, nos hemos visto tres veces y hemos reído más, no voy a mentir, a veces el extrañarlo me llega de golpe, pero me a hecho bien reír, y dejar de pensar en el, al menos por unas horas...
Hace unas semanas fue mi desmayo, días antes, Josh me dijo que sabía algo, pero no quise saber, a veces siento que debería preguntarle, si eso que sabe, tiene que ver con el hecho de que me halla bloqueado de la red social, su número ya no me aparece, en la app de mensajes, así que doy por hecho que la dio de baja, no voy a decir que no me duele su silencio y la forma en cómo decidió darle fin, pero creo que lo hizo por cobarde, no hay otra forma de verlo.
Era suficiente con decir "oye, una disculpa, pero tu turno acabo, muchas gracias, ten una larga vida, adiós" ¿dolería? Por supuesto, pero hubiera tenido un cierre, una explicación, y hubiera llorado, lo suficiente para saber que era un imbécil, sin embargo luche para buscar a alguien que claramente no quería ser encontrado, y solo encontré una foto, y un "error al cargar la página" como explicación, y también llore, pero de preocupación, impotencia, luego fue decepción, coraje, y ahora, no se que es, siento que lo extraño, pero también siento que si lo tuviera en frente... No se, probablemente lo golpearía.
Pasamos ocho meses juntos, y puede que no halla sido una vida, pero fue lo suficiente, para dejarme claro que no me será fácil olvidarlo, porque a pesar de todo me hizo feliz... Este tipo de pensamientos son los que me regresan a la cama, porque pensar así me hace preguntarme si ¿realmente el me amo? O pensar en si puedes estar con alguien tanto tiempo y no sentir nada, a preguntarme porque no se quedo conmigo, que me falto, para que me eligiera a mi.
Son cosas que no tendrán respuesta, y necesito al menos poder tener la certeza de algo, por suerte las vacaciones ya inician, y puedo quedarme con mis sentimientos y mi soledad, pienso esto cuando oigo que llaman a la puerta...
-¿si? - indagó, es sábado y últimamente nadie me visita
-hola-responden al otro lado y una sonrisa invade mi rostro.
Me apresuró a abrir, y recibo a Josh, trae ropa deportiva, así que asumo que solo estara un momento, nos saludamos rápidamente y:
-vengo a secuestrarte-dice y me sorprende-no voy a dejar que esta cabecita-agrega, señalando mi frente-te haga malas jugadas, anda, arreglate, te esperamos en el auto, tienes diez minutos, mientras, asaltare tu cocina-dice, señalandola y solo puedo reaccionar para avanzar a mi habitación.
Reviso dentro de mi armario y creo que realmente no tengo tanto ánimo de salir, pero en algo tiene razón y es que, si me quedo, solo le daré vueltas a las cosas y es algo que no debo permitir. Optó por ropa deportiva, igual que el y en menos de 10 minutos me asomo a la cocina, armo un pequeño louch con lo que encontró, y juntos salimos de mi casa, tras cerrar la puerta y girar, un grito me deja estática...
Están aquí, mis amigas están aquí, pese a que han intentado comunicarse, ganándose solo que las ignore, están aquí, y una especie de culpa me invade, nos abrazamos y no puedo evitar derramar un par de lágrimas (solo queremos ayudar) recuerdo las palabras de Pía, juntas abordamos el auto y nos dirigimos a no se donde, pero estoy segura que serán momentos inolvidables...