Ahora, hablaremos de dos puntos que muchos escritores novatos no toman en cuenta. Estos son la Extensión del párrafo, los interlineados y el capítulo.
Vámonos en orden.
Para crear párrafos es necesario tener palabras y unirlas, justo como lo estoy haciendo en este momento, quiero dar por sentado que si ya estás leyendo este libro es porque ya sabes leer y escribir. Ahora, es importante que las oraciones sean completas, sin caer en el hecho de crear una lista de tareas y describir hasta cómo se va al baño, sin ser necesario. Repito: sin ser necesario.
Ahora revisa cómo está estructurado este libro. Los párrafos que se han escrito son cortos, no llegan a ser ni la mitad de una página y tiene un interlineado cómodo entre línea y línea para ayudarte a leer mejor… cómo dice el lobo de la Caperucita Roja… ¿qué era comerte mejor?... lo sé, el punto aquí es hacer las cosas mejor que la primera vez que lo hiciste, ese es el secreto de una persona exitosa, siempre mejorar.
Ahora, tenemos que hablar sobre la extensión de los capítulos. En este punto hay muchas diferencias de ideas, aquí lo más relevante es pensar en nuestros lectores, y no me refiero a lo que ellos dicen, sino a lo que los estudios sobre el funcionamiento de nuestros cerebros dicen.
A lo largo de mi juventud he estudiado a fondo a diversos autores que divulgan estudios sobre el tema ya mencionado. En ellos podemos resaltar que el cerebro ama las cosas sencillas de percibir, cómo lo son los párrafos de aproximadamente ocho líneas. Interlineados de 1.5 aproximadamente. Capítulos no tan largos. Me refiero a capítulos de 1500 o 2500 palabras, que le dan la sensación al lector de ir avanzando rápido.
Piensa en tu objetivo… ¿ya lo hiciste?
¿Quieres que te lean millones de lectores?, o ¿quieres que te lean solo unos pocos o ninguno?
Al responder estas preguntas, tendrás la respuesta de lo que harás con tu libro, si harás caso de todo lo que he escrito aquí, o simplemente lo vas a ignorar y harás lo que quieras.