Deje el teléfono de lado y me acerque a la puerta donde nana estaba recibiendo a los chicos
- Bonita – Jake fue el primero en saludarme
- Hola
- Te extrañamos tanto – me abrazaron entre los tres y les intente regresar el gesto
- Y yo a ustedes
- Te ves demacrada – hablo Mia mientras agarraba mi rostro
- Ya se pero de alguna manera me siento mejor que antes
- Cuidado con el suero mi niña – me recordó nana mientras saludaba a los demás
- Tendré cuidado nana – caminar con esta cosa pegada a la mano es molesto
- Les preparare unos dulces – nos dedicó una sonrisa antes de volver a irse a la cocina
- ¿Dulces?
- Cocina delicioso
- Este lugar es enorme – Natalia se dio una vuelta en su lugar mientras miraba hacia arriba
- Si – la siguió Jake
- ¿Podemos recorrer esta majestuosidad?
- Si, no tiene nada de malo – subimos las escaleras y comenzamos el recorrido por todo el lugar
Las expresiones de sorpresa no eran para nada discretas y los comentarios obscenos de Jake no faltaron cuando les mostré las habitaciones
- ¡Hay hasta un salón de videojuegos!
- Es de Raiden me trae aquí para jugar
- Jugar eh – Jake movió las cejas y me guiño un ojo
- Videojuegos Jake no empieces otra vez – paso el brazo por mis hombros mientras se reía – pareces vaca con tos
- Que graciosa – puso los ojos en blanco y me abrazo con menos fuerza asegurándose de tocar mi mano
- ¿Por qué esta habitación esta vacía? – me separe de Jake y me acerque a las chicas hacia la habitación que estaba blanca
- No lo sé dijeron que la habilitarían para algo pero no sé qué – me encogí de hombros y cerré la puerta
Era extraño pero ellos sabrán lo que hacen supongo
Continuamos el recorrido hasta llegar a la que era mi habitación, actualmente estaba llena de cajas que ni siquiera me había animado a abrir
Paso muy cansada como para hacerlo
Los chicos entraron y comenzaron a husmear entre mis cosas, aprovechado que no podía hacer nada para evitarlo
- Aun no terminas de desempacar – expreso Mia sacando uno de mis libros
- No, aun me faltan sacar unas cosas – asintió y volvió a lo suyo
Mientras los veía un pequeño recuerdo brinco en mi mente haciéndome temblar levemente
No eh encontrado los anillos
Salimos de mi habitación después de un rato y nana nos esperaba en la sala principal con un humeante y oloroso dulce pastel de naranja
Nos sentamos en diferentes lugares y nana comenzó a darnos una rebanada a cada uno
Al terminar el mío se me antojo otro
- Este pastel esta delicioso – exclamo Jake aun masticando un trozo
- Nana cocina rico – le apoyo Mia
- ¿Nana me das más? – Natalia le sonrió para que le diera
- Claro hay bastante para darles – sonrió mientras le daba otra rebanada
- Yo quiero más – murmure llamando su atención
- Mi niña ya te comiste tu rebanada
- Solo una más nadie lo sabrá ándale – dudo por unos momento pero termino suspirando mientras me señalaba
- Pero no se tienen que enterar – asentí con alegría y me dio mas
- ¿Por qué no se pueden enterar tus amores?
- Bueno tengo una dieta estricta mucha azúcar puede causarme problemas
- Entonces ¿por qué comerás otra rebanada?
- Me eh cuidado mucho, nana me cuida es la primera vez que como dulce en este mes
- Somos una tumba – cerro su boca e hizo como que si lanzara una llave al vacío
La puerta del jardín sonó y el lindo cachorro que amaba venia hacia nosotros con la cola en alta y la boca abierta pareciendo una sonrisa
- Ven mi amor – se acercó a mi sentándose a mi lado
- Perro – lo señalo Jake y yo puse los ojos en blanco
- Ni modo que sea gato – acaricie su cabeza sintiendo el suave pelaje
Me lamio la cara y yo le di un beso antes de que se pusiera a jugar, el resto del día continuamos con juegos y risas
La noche se hizo presente y llego la hora de que los chicos se fueran, saque a kart al jardín asegurándome que tuviera todo en su casita
Le di un beso y regrese dentro donde ya estaban todos en la puerta principal, me acerque a ellos y Jake me abrazo
- Adiós bonita
- Adiós – las chicas hicieron lo mismo y después salieron siendo guiados por Liam a la salida
- ¿Te sientes bien mi niña? – sentí a nana a mi lado
- Si, solo estoy algo cansada – mire el pequeño algodón en su mano y extendí la mía para que haga lo que ya sé que tenía que hacer
El suero ya se había acabado y un poco de sangre se estaba subiendo por el tubito, nana comenzó a sacar el esparadrapo despacio y luego puso el algodón donde estaba la aguja y la saco
Tome mi mano apretando el algodón sobre el pequeño agujerito hasta que la sangre dejo de salir
- Nana ¿puedes ayudarme con algo?
- Claro mi niña ¿con que quieres que te ayude?
- Con las cajas que hay en mi habitación necesito encontrar algo importante – asintió y subimos a mi habitación
Nos sentamos en el piso comenzando con las cajas para encontrar lo que necesitaba
Después de media hora de no encontrar nada me levante estirándome, tenía los músculos entumecidos
- ¿Que buscamos exactamente?
- Un retrato y una cajita de terciopelo negro con un lazo blanco – volvió a meter las manos en la caja sacando más cosas
Al mirar a mí alrededor note el desorden que habíamos hecho
¿Desde cuándo tenia tantas cosas?
Continúe con mi búsqueda refundiéndome en las cajas oscuras, sentía mis ojos nublarse al no encontrarlo
El sentimiento de haberlos perdido me estaba quebrantando, los había cuidado se supone que deberían estar aquí
- No lo encuentro – murmure al borde del llanto
- Si ellos trajeron todas mis cosas deben estar aquí – hablo cortante intentando calmarme
#944 en Novela contemporánea
#4266 en Novela romántica
romance drama miedo misterio, poliamor y desamor, superacion personal y sentimental
Editado: 10.01.2024