Cómplices Del Destino (trillizas Hiltmoose Libro 1 y 2)

21. Walden

Publicado Originalmente: 8 de Julio del 2021

Capítulo 21: Walden

“Algo que reconocía es que no iba a Nina viajar sola a ver a su novio.”

—Mina, ¿qué sabes sobre tu hermana? —preguntó su padre. Tenía el tenedor a medio camino y sentía que el estómago ya se le estaba cerrando.

—Lo mismo que ustedes, papa, nada en lo absoluto. Vive su vida ajena a nosotros, como siempre —respondió y se forzó en tragar la comida. El hambre ya se le había esfumado, pero no podía hacerle un desaire a su familia.

Lina había llamado al medio día diciendo que no iría a la casa a comer. Siempre había sido así, desprevenida. Pero, aparentemente su padre si contaba con ella.

—Estoy cansado de que esta niña sea tan inmadura. ¿Hasta cuándo vivirá su vida al límite? —dijo molesto.

Le dolía un poco la cabeza y enfrentarse al desahogo de su padre no era algo con lo que quisiera lidiar. Aunque tampoco tenía opción.

—Lina es solo una niña que aún no encuentra su camino. ¿No eras tu igual a esa edad? —escuchó que decía su madre en tono tranquilo. Mina puso los ojos en blanco, pero se quedó en silencio. Opinar sería algo en vano.

—Lina ya es una mujer adulta, Katherine. Se supone que será quien continua con nuestro legado. ¿Esa es la imagen de una futura duquesa? ¡Por supuesto que no! —Mina dio un pequeño brinco cuando su padre se levantó precipitadamente y las dejó solas en el comedor. Se masajeo las sienes y soltó su pelo intentando que el dolor de cabeza disminuyera.

—Tú si estás de acuerdo conmigo, ¿verdad? Tu hermana ha pasado por mucho. Tiene mucha responsabilidad encima. Ahora con la llegada de Nina, está nerviosa.

Mina se levantó de la mesa y le dio una mirada seria a su madre. ¿Como es que siempre justificaba las acciones de Lina? Ignorando por completo el daño que su hermana arrastraba consigo. No quería que las cosas siguieran de ese modo.

—Lina es una adulta que continúa actuando como niña. ¿Tienes idea de la mala imagen que tiene, mama? Walden hace lo que puede. Un día se cansará de ser el cornudo de esta familia. Yo también he pasado por mucho, ¿sabes? También tengo responsabilidades y la llegada de Nina cambio mi vida. No por eso le echó la culpa de lo malo que me pasa a otros. Que se cuide Lina, mama, porque dudo que papa realmente continúe aceptando esto. Y créeme que el abuelo se está encariñando más con Nina, que con alguna de nosotras.

Salió del comedor sintiendo el estómago revuelto. No podía creer que su madre se atreviese a culpar a otros sobre los problemas de su hermana. Lina estaba haciendo lo que le daba la gana y al final su padre se iba a cansar. Sintió su celular sonar y respondió la llamada.

—¿Bueno? Habla con Mina Hiltmoose —dijo de forma monótona. Siempre recibía llamadas de extraños o de personas que querían obtener el número de sus familiares.

—Hola, Mina, soy Walden debo decirte algo importante.

Respiró hondo preparándose para alguna travesura de su hermana. Últimamente hacía demasiadas.

—Te escucho preocupado, Walden. ¿Le sucedió algo a mi hermana? —preguntó preocupada.

—Voy de camino a ver a Nina. Sin embargo, debo informarte que Nina ha tenido un accidente y se encuentra en el hospital.

—¿Que, pero está estable? ¿Como se encuentra? —preguntó preocupada. Su abuelo, que pasaba por su lado en ese momento se detuvo al escuchar que algo estaba sucediendo. Mina le hizo un gesto para que esperara.

—La iba a llevar a su casa y tuvimos un accidente. Está ahora estable en el hospital. Sería bueno que pudieras ir. No me agrada mucho la idea de no haberme podido quedar. En estos momentos se encuentra con su amiga. Tu otra trilliza llamó y debo ir a ver que este bien. Antes de que haga una de las suyas. 

—No te preocupes, yo iré y me quedare con ella si es necesario —le respondió.

Walden terminó la llamada y enseguida le envió la dirección del hospital. Mina le explicó a su abuelo lo que había sucedido. Sin duda no la iba a dejar ir sola. Por lo que juntos se dispusieron a ir al hospital a ver a Nina.

Sin avisarle a sus padres que ahora se encontraban realmente peleando sobre la situación y el descontrol de su hermana.

****

Lina se acostó en la cama observando el reloj. Él no llegaba y comenzaba a impacientarse. ¿Y si realmente no llegaba a la hora que le dijo? O ¿Si simplemente decidía no ir? Sus ojos pesaban un poco y volvió a llenar la copa de vino. Le daría un poco más de tiempo y si no llegaba lo llamaría de nuevo.

El ruido de la puerta abrirse la alertó y con la copa aun en manos fue casi corriendo hasta la sala.

—Walden, tardaste bastante en llegar —dijo feliz de verlo se sentó en el sofá de terciopelo blanco.

—¿Que sucede? ¿Necesitas ayuda con el dinero, el trabajo? Hoy no estoy de humor para pelear. Ha sido un mal día.

—¿Que sucedió? —preguntó interesada—. Tienes una pequeña herida en el brazo. ¿Tuviste un accidente, Walden? —se acercó a él y cogió su mano para revisarla—. Sigo esperando una respuesta.



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En el texto hay: secretos, trillizas, destinos

Editado: 21.10.2022

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