Publicado Originalmente: 21 de marzo de 2022
Llegamos a la etapa final en la que puedo decir que quedan aproximadamente 10 a 15 capítulos para acabar. No estoy lista para decir adios a estos personajes.
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«Espero que no huyas de nosotros»
Walden se masajeo las sienes mientras pensaba qué haría con el paquete que estaba sobre su cama. Pensó en llamar a Ewen, pero reconsideró la idea al darse cuenta que no era seguro que Ewen siguiera involucrándose. Podían intentar deshacerse de él de la misma forma en la que lo hicieron en septiembre con él. No iba a exponerlo.
Involucrarse con el caso de los Hiltmoose no es algo que le molestará. Conocía a la familia desde hacía mucho tiempo. Era inevitable no intentar ayudarlos y ahora estaba Nina. El blanco más vulnerable y la chica que amaba. La idea de que tenga que volver a ir a un hospital le agobiaba. Pero tampoco es que pudiera hacer mucho más. El control ya no estaba en sus manos.
Volvió a acercarse a la caja y sacó su contenido de nuevo. Era un diario antiguo, escrito en un idioma que no conocía. No había nada que indicara que era de alguien cercano, aunque sí debía ser de alguien con dinero. Ya que podía percatarse del material de buena calidad y del oro bordado en la portada. Desconocía quién lo dejó en su habitación. Cómo tampoco sabía con qué intenciones lo hizo. A esas alturas no esperaba nada bueno.
Mientras divagaba en sus pensamientos se percató de que tocaban la puerta con insistencia. No era Ewen, ya que él tenía su propia llave. Dejó el diario sobre la cama y se acercó a la puerta para abrirla. Se sorprendió al ver a Nina allí con la mano alzada a punto de tocar la puerta de nuevo. Esta vez ya no lucía sus trajes elegantes. Estaba con unos jeans azul oscuro y una camisa de manga larga color verde oliva. No se esperó su visita ya que en menos de tres horas iría a la cena con los Evans.
—¿Qué haces aquí? —preguntó mostrando su sorpresa.
—No sabía a dónde más ir, ya que estamos juntos en esto. Llegó este diario a mi casa y debes ver de quién es —respondió entrando por su cuenta y parándose delante de él. Abrió el diario en una de las últimas páginas y le enseño algo que está escrito. No logro leer bien porque de inmediato habló—. Es el diario de mi bisabuela, la madre de mi abuelo Garret. Reconocí su nombre porque Mina se encargó de que memorizara el árbol genealógico de los Hiltmoose. Pero eso no es todo —volvió a decir y esta vez le enseñó la primera página que marcaba el número uno de forma gigante—. Este es el segundo diario de unos cuantos. Lo dice en la primera página. Así que la persona que nos envió esto, debe tener los otros que quedan. No sé cómo supieron que hoy estaría en Roseville. Pero es algo que hicieron adrede.
—Espera —dijo Walden colocando sus manos en sus hombros—. Vas demasiado rápido y estoy intentando procesar todo esto. ¿Dices que encontraste el diario de casualidad en tu casa? —preguntó.
Nina asintió de inmediato.
—Solo estaba en una caja. Es como si alguien lo hubiera dejado en mi casa de forma directa. ¿Porque preguntas?
Walden dio un paso hacia atrás y caminó hasta la cama, para luego alzar el diario que estaba en sus manos.
—Porque a mí también me dejaron uno. Y al estar en un idioma distinto no me molesté en revisar las últimas páginas. Pero debe ser de tu bisabuela. Es idéntico al que tienes en tus manos.
Nina se acercó hasta la cama y cogió el diario que estaba en sus manos. La vio revisarlo y luego asentir.
—Tenías razón, es de mi bisabuela. Está escrito en francés. Una de las cosas buenas que me enseñaron mis padres fueron que debía aprender varios idiomas. Para que supiera defenderme en los países que fuera a visitar. No lo entiendo, ¿porque te enviaron uno a ti? Esto es demasiado extraño.
Walden estaba de acuerdo. Si de por si le pareció muy raro que le enviaran la caja. Ahora que sabía sobre ese contenido, no estaba seguro porque lo eligieron a él. Alguien sabe sobre lo que está pasando y creyeron que era buena idea enviarles los diarios.
—Falta el diario #1 —la escuchó decir. Al fijarse ella tenía ambos diarios alzados—. El que te enviaron a ti es el diario #3. El que tengo yo es el #2. Nos hace falta el primero para entender este dilema.
—No me gusta esto.
—A mí me gusta mucho menos. ¿Diarios que llegan de forma misteriosa? Un desastre. Pero, quizás debemos verlo desde otra perspectiva.
—¿De qué hablas?
Nina se le acercó y puso ambos diarios sobre sus manos.
—Si mi bisabuela amaba escribir sobre su vida. Sabremos que andaba mal en su hijo mayor. Puede que alguien nos esté ayudando. Al enviarnos estos diarios incompletos, es una provocación para que busquemos el primero.
Walden negó de inmediato.
«¿Es que no había forma de que Nina dejara de tentar su suerte?» pensó.
Nina le sonrió con tranquilidad.
—Sé lo que estás pensando.
—¿Qué crees que estoy pensando? —la retó.
—Piensas que estoy muy loca por querer seguir indagando más por mi cuenta. Piensas que no debieron darme tanta libertad. Porque gracias a mi crianza es que realmente no tengo miedo a las consecuencias. Ya me conoces, actúo por impulsos. Algunos me han traído cosas buenas —dijo y le dio un golpe suave en el pecho—. Y otras veces son puras cosas malas. Pero a lo que voy es que si queremos llegar al fondo de esto. Debemos aprovechar las oportunidades. ¿Me apoyarás en esta locura de obtener información?
Walden se masajeo las sienes y luego sonrió mientras sacudía la cabeza derrotado.
—No hay forma que te deje sola en esto, Nina. Lo sabes, ¿verdad? —dijo mientras rodeaba su cintura y la acercaba a su cuerpo. Nina sonrió.
—Creo que sé qué lugar puedo obtener información y para eso necesitaré hablar con Mina y convencerla de que me ayude. Ella es tan reservada, tan misteriosa y no sé cómo siempre se muestra entera con esto.
Editado: 21.10.2022