57. Nina

Publicado Originalmente: 8 de mayo de 2022

Estamos a ley de nada para acabar la novela. Espero que la hayan disfrutado.

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«Incendio»

—¿Qué haces aquí? —preguntó Nina sorprendida de verlo allí luego de meses de su último encuentro. De su parte la invitación era muy segura que no hubiese sido enviada. Pero desconocía que tan grande era el circulo de invitados de sus padres.

—Digitals Brook tiene lazos con muchos de los que están presentes. Es una buena posición en el circulo social, debo admitirlo. Lamento si te estoy incomodando. Te vi a lo lejos y solo quería pasar a saludar.

Nina se vio tentada a responderle que si la estaba incomodando y que prefería que se fuera. Pero, había algo en Aidan Brook que le hacía ver que no era para nada el otro sujeto. Que este si se trataba del chico que se disculpó en el hospital luego del incidente. Cualquier otra persona la llamaría loca por continuar hablando con él, pero tampoco deseaba hacerle un desplante. Eso no sería propio de ella.

«Siempre tentando tu suerte, Nina» le recordó esa vocecita en su cabeza.

—Descuida, no lo estás haciendo. Es solo que me sorprendí de verte. No pensaba que Digitals Brook estuviera bien posicionado. ¿A quién engaño? Tampoco es como si hubiera estado pendiente de la compañía. Luego de aquel desafortunado incidente mi jefe se hizo cargo del proyecto que los involucraba y yo me desligue por completo. Así que no tenía forma de saber que tan buenos eran.

—Yo podría pasar gran parte de mi vida disculpándome. Nada justifica lo que paso esa noche, ni siquiera mi enfermedad —respondió Aidan realmente sincero.

Nina no era ciega, podía ver su dolor y arrepentimiento en sus ojos. Incluso en la forma en la que se expresaba podía sentirlo. Y era por eso qué aún mantenía esa charla. Porque entendía que la enfermedad de Aidan no era algo ligero y que lo que sucedió no estaba en su control. Al menos no en el suyo.

—Desde que conocí este yo lo único que has hecho Aidan ha sido disculparte una tras otra. Escucha, si me incomoda un poco verte, porque lo que paso me hizo sentir miedo real. Estaba sola, en un elevador que no abría y con un hombre que estaba dispuesto hacerme daño. Pero entiendo que ese hombre no eras tú y solo hace falta que tú lo puedas entender igual.

»Hagamos esto… —dijo y se acercó hasta Aidan para sujetar sus manos—. Empecemos de cero, ¿de acuerdo? Oficialmente hoy soy Nina Evans-Hiltmoose y tú eres Aidan Brook. Olvidemos el pasado y si tu alter ego vuelve a salir, esta vez me asegurare de no intentar matarlo, solo de volverlo a dejar inconsciente.

Ambos rieron y Nina logró sentir que el ambiente se aligeraba. Aidan ya no lucía tan tenso como al principio. Nina podía entender que Aidan estaba cargando con un peso muy grande sobre sus hombros. Un peso que lo atemorizaba y lo hacía alejarse del resto.

—Eres un ser muy bueno, lo sabes, ¿verdad?

—Eso dicen todos, pero no creo que sea demasiado buena. Solo que sigo teniendo la costumbre de dar segundas oportunidades. El tiempo dirá si esta segunda oportunidad para ti ha sido un acierto o, todo lo contrario.

—¿Sabes? Desde ese día al que llamo sin nombre no ha vuelto a aparecer. Eso me ha dado tiempo a retomar el control de mi vida y tratar de enmendar el daño causado. Sigue siendo difícil, pero no será imposible. Porque puedo vivir con esto.

—Me alegro escucharlo, pero no hablemos de ese sujeto. Sigo teniendo malos recuerdos sobre el —aclaró Nina y luego sonrió al ver a la persona que se acercaba.

—Aidan Brook, admito que es una sorpresa tenerte aquí.

Nina sonrió al ver a Walden. Lo llevaba buscando con la mirada desde hacía mucho rato y no había logrado dar con él.

—Walden Moore… no había tenido la oportunidad de saludar.

—Te creo, hoy hay el doble de personas de las que suelen tener. Aunque la ocasión lo ameritaba. Espero que no andes molestando a Nina —respondió sin ningún ápice de arrepentimiento. Nina quiso reír cuando lo escuchó. Por supuesto que guardó la compostura.

—Moore, Aidan y yo solo estamos hablando y poniendo las cosas en orden. Le he dado una segunda oportunidad. Así que espero que tú igual olvides lo que paso. ¿De acuerdo?

—Tú y tu don de dar segundas oportunidades nunca dejaran de sorprenderme. De todas formas, es bueno que Aidan sepa que cuando se falla una segunda oportunidad que tu das, ya no habrá otras.

Nina rio y luego observó a Aidan que lucía tranquilo y divertido sobre ellos.

—En el hospital pensaba que ustedes lucían demasiado cercanos para ser solo amigos. Ahora me alegro ver que están juntos como pareja. Hacen una bonita pareja.

Nina miró el rostro desconcertado de Walden. Sin duda a él no le gustaba como ella lucía tan cercana relajada con Aidan. Y eso le gustaba.

—Gracias… —respondió Walden sin saber que mas decir.

Nina sabía que ellos habían sido demasiado obvios desde que se dieron cuenta que se atraían. Ahora estaban juntos y las personas lo intuían. Si bien ninguno de los dos planeaba decirlo públicamente, tampoco iban a esconderse.