CAPITULO 10: EL COBARDE ES COBARDE HASTA QUE SE DECIDE...

- Claudia, Claudia despierta - decía la Sra. Ubalda, moviéndola para que se despertara,

- ¿Qué paso? – decía casi dormida.

- Niña una emergencia en la empresa, ven hablemos afuera.

- Se rompió una tubería de agua blancas donde estaban haciendo una reparación, eso fue lo que entendí, llamaron hace unos minutos. ¿Tú puedes hacer algo? Keren bebió mucho no lo quiero despertar.

- Ya va, llamaré. Por favor prepáreme una taza grande de café sigo dormida. – entraba una llamada en ese momento.

- Buenos días Sra. Claudia, disculpe la necesitamos aquí, se perforó un tubo de agua grande, digo por el chorro que sale en el piso de planta, solo estamos los de vigilancia, ¿qué hacemos? - el Sr. Benítez estaba preocupado.

- Busquen en la entrada unas llaves de paso grandes tipo mariposa y empiece a cerrarlas, no conozco donde estén ubicadas las otras, llamare a alguien más y voy en camino.

Claudia vestía un jean que había dejado en una gaveta, y una franela azul de Keren que le quedaba un poco grande y las pantuflas, se pondría las botas al llegar a la oficina. Ajusto su pelo con una pañoleta de la Sra. Ubalda, quien la esperaba en la puerta con un jarro de café. Por primera vez condujo el Porsche, así que tenía que ser cuidadosa, a esa hora había poco trafico facilitándole llegar rápido a su destino.

Claudia acompañada del Sr. Benítez, entraban a planta, escucharon una explosión, corrieron a ver que era, la presión del agua había hecho ceder el tubo haciendo volar el piso de bloques superpuestos a su alrededor.

- Ahora sí que la pusimos. – decía Claudia tratando de comunicarse con los ingenieros de mantenimiento por teléfono. - corte la corriente de esta parte por favor.

Minutos después llegaban dos de los ingenieros del área, quienes aclararon la situación porque en la tarde anterior se estaban haciendo reparaciones en esa área, - en los planos no sale plasmada esa tubería y por la cantidad de agua debe ser de mínimo de 6”. - se defendía uno de ellos.

- Por favor consigan la llave de paso para que no bote más agua. – ya se habían mojado las pantuflas y las botas del pantalón. Subiendo al despacho busco para colocarse las botas, encontró dentro de una ellas una fotografía tipo postal, era una fotografía de Keren abrazando a una hermosa rubia de ojos verdes, a su mente llego el nombre de Camil, tenía una escrito mi eterno y único amor, estaba fechado a tan solo dos semanas antes de conocerse. esto le sacudió el corazón llenándola de temores y si aparece, con solo llamarlo revolverá mi mundo, se le humedecieron los ojos. Entraba el personal a la empresa, era mejor recomponerse, habían logrado robarle la tranquilidad, no era el momento de reclamos y sería inútil preguntar quién fue.

Claudia se acurrucó en la silla de Keren, esperando noticias sobre la tubería, reviso los cajones, había un libro en el fondo del cajón, lo tomo, era una novela "Eterno Amor", no tenía marcas específicas, empezó a leerlo.

- Sra. –le interrumpió uno de los ingenieros- disculpe no conseguimos la llave de paso y el personal está llegando que hacemos.

- Déjeme hago unas llamadas y le aviso, verifique que se tomen las medidas de seguridad necesarias y pare al personal hasta que resolvamos.

Claudia llamó al Sr. Benedetti y le explico la situación, el recordó la tubería, estaba antes de la remodelación hacía varios años la llave debería estar frente a la empresa. junto a un grupo de ingenieros salieron a ubicar la toma, transcurrido un rato se dieron cuenta que esta acción no funcionaba, decidió llamar a su padre para que la auxiliara. Media hora más tarde llegaba el personal de la municipalidad con planos en mano, en pocos minutos la habían ubicado.

- Por favor- decía el funcionario- tan pronto solucionen la avería llámeme a este número para venir restituir el servicio.

- Disculpe, que posibilidad hay que Ustedes me solucionen este problema, la empresa asumirá los costos ante la municipalidad.

- Lo siento no está permitido, porque la empresa asumió la responsabilidad al comprar el terreno, pero le dejare anotado las especificaciones de la tubería para facilitarles la reparación, ¿está bien?

- Si, gracias le llamaremos.

Cuando Claudia regreso a la oficina, Keren ya había llegado, se le veía molesto, Claudia se preguntaba, ¿será por el auto o la tubería?, pero no era para tanto, fue a su encuentro y él la separo bruscamente.

- ¿Qué pasa?

- Primero, tomaste mi auto sin mi permiso, podías haberme llamado, no me gusta que nadie maneje mi auto, ni tú, así seas mi esposa. Donde está la foto. ¿Qué te da el derecho de revisar mi escritorio, dejarlo como te da la gana y tomar cosas personales mías? – a este momento Keren ya hablaba en voz alta, había golpeado fuerte el escritorio un par de veces, haciendo que el personal de la oficina estuviera en primera fila presenciando la escena complacidos. – Entrégame la fotografía. –Claudia la había dejado en el archivo donde la encontró, la busco y se la entregó.