Capítulo 5

Anthony.

Hoy estaba muy nervioso pues no sabia que me iba a pasar con mi trabajo después de la estupidez que hice de besar a Rene. Solo a mi se me ocurre hacer algo así, como siempre soy yo el que llega temprano y esta vez volvió hacer así, me senté en la acera y me puse a pensar en muchas cosas hasta que llegara Rene.

Pasaron como unos minutos él llega, estaciona el auto y luego de bajarse me saluda dándome los buenos días, yo estaba muy ansioso así que no podía esperar más, subiendo las escaleras le pregunté si hablamos ahora o más tarde, el me responde que mejor sería hablar ahora aprovechando que aun no llegan los clientes.

Le explique que lo bese porque el a veces me confundía por su forma de tratarme y le rogué que no me despidiera, pero lo que pasó luego me dejo muy confundido en vez de despedirme, más bien me comenzó a besar al momento le pregunte que estaba pasando y él me responde que yo también le llamó la atención y no solo eso, sino que también me propuso que nos conocieramos mas.

Después de eso comenzaron a llegar los clientes así que cada uno se fue hacer su trabajo, pero no todo fue color de rosa en este dia pues mientras hacia las limpieza de las máquinas llega Julián y comienza a fastidiarme un poco, no dejaba que hiciera bien mi trabajo, pero bueno trate de calmarme un poco hacer que la mañana terminará de la mejor manera.

Ya acercándose el mediodía quería decirle a Rene para almorzar los dos juntos, así que voy a la oficina y le pregunto si vamos a almorzar juntos, el me responde que hoy no podía porque tenía que hacer otras diligencias.

–Ah ya ok, no te preocupes– le dije. En eso se me acerca y me comienza a besar, la verdad que besa muy rico y luego me dice:

–Estaré de vuelta antes de cerrar, esperame si, para irte a llevar–

–ok, aqui te estare esperando– le respondí, él agarra su chaqueta y sale hacer su diligencia y pues yo por primera vez me quedaría solo aqui, ojala todo vaya bien porque si sucede algo yo no sabria que hacer.

Pero no todo salió como yo esperaba, Julián se dio cuenta que René salió y que yo me quedaría solo y aunque ya era la hora de almorzar él no se iba, eso lo vi muy raro así que ya me imaginaba que planeaba algo.

Mientras él no se fuera yo no podía irme a almorzar, así que me puse a limpiar algunas de las máquinas. Ya era las 1 pm y el nada que buscaba a irse lo peor que a las 1:30 comienza a llegar más clientes asi que me le acerque y le dije:

–Disculpe, pero ya es hora de cerrar, si quiere puede volver ahora a las 1:30–

— No sabía que ahora cerraban al mediodía– me dice el.

–No, normalmente no lo hacemos, pero como no esta el dueño si necesito cerrar para comer y luego abrir a las 1:30 además usted nunca se había quedado hasta estas horas–

–Pues yo aquí pago una mensualidad y por ende me puedo quedar el tiempo que sea y hasta donde yo quiera– me dice con un tono de voz algo altanero.

–Está bien señor, se puede quedar el tiempo que desees–

Ya no soporto a este chico la verdad, se ve que todo lo hace a propósito, pues no me quedo de otra que medio comer mientras él hacía ejercicio pero mas se la pasaba viendo el teléfono que lo que hacía.

Poco a poco comenzaron a llegar más clientes y se comenzó a llenar el local así que no iba hacer una tarde muy buena que digamos. Al rato veo que Julián se va, sabía que todo lo que hizo fue para fastidiarme, ya quería que llegara Rene, el hambre me estaba pegando y había muchas cosas que hacer.

Rene.

Luego de salir del gym pase buscando por su casa a María para ir al restaurante a comer, ella ya había reservado una mesa así que no le podía cancelar, la verdad hubiese preferido quedarme a comer con Anthony. Pero bueno espero que con Maria todo sea rápido para poder estar con él.

–Hola amor— le digo a Maria mientras sube al carro.

–Hola mi gordo ¿como estás?--- me responde ella.

–Bien, ¿cómo es que se llama el lugar a donde vamos?--- le pregunto, mientras ella me da la dirección.

Llegamos, estacionamos el carro y nos sentamos en la mesa, cada uno pidió algo de comer y algo de tomar.

–Maria.. tengo que pedirte disculpa por mi forma de ser, se que a veces me porto como un total imbécil, pero te prometo que eso no volverá a pasar—

–Tranquilo amor, ya olvidemos eso, lo importante es que hoy estamos arreglando las cosas, sabes que yo te quiero mucho y quiero hacer mi vida a tu lado–

–Yo también quiero estar siempre a tu lado y te prometo que voy a cambiar mi forma de ser— le dije yo, ella se acerca a mi y nos comenzamos a besar.

Luego de unos minutos entre besos y hablar le digo a María que ya me tengo que ir al gym porque a lo mejor el chico nuevo debe estar necesitado ayuda.

–Ok mi gordo esta bien, mejor vamos,Pero si quiero que pasemos esta noche los dos juntos, como modo reconciliación–

–Esta bien mi vida como tu digas, nos vemos esta noche—

Pagamos la cuenta y nos subimos al carro antes de ir al gym fui a dejar a María a su casa, después que la dejo en casa me voy al gym, el pobre Anthony debe estar muy cansado.

Al llegar efectivamente el gym estaba completamente lleno, me acerco a dónde está Anthony y le aviso que ya llegue. Nos vamos a la oficina al entrar le doy un beso y le pregunto como le ha ido.

–Pues terrible, ni siquiera he comido– me dice el.

–¿Cómo que no has comido?--- le pregunto.

–Bueno no vas a creer que Julián se quedó “haciendo ejercicio” hasta las 1:30 y se fue cuando comenzaron a llegar los demás–

Ese Julián de seguro lo hizo a propósito.

–Y ¿como te fue en tus diligencia?--- me pregunta Anthony.

–Pues que te diré… me fue bien, tuve que llevar a mi madre a buscar una cita médica y luego fuimos a comer algo–

–Ohh ya, pero ¿si está bien tu madre?---

–Si, si lo está, gracias por preocuparte, vamos tenemos que seguir trabajando– le dije.