Con sangre color violeta

La verdad. El amor duele

Me presente ante nuestra dama Claria, y como toda mujer con instinto materno corrió a abrazarme en el momento en que me vio, luego se percató de que alguien me acompañaba. 

 

-¿Es seguro tratar el tema aquí?- Pregunto con tono sutil al ver a Banner. 

- Es mi compañero, trabajamos juntos en las torres grises y decidió acompañarme, sea lo que sea irá conmigo. 

-Esta bien- Se alejó de mi y nos dio a saber los detalles. - Es un tema un tanto delicado, Serkan insiste que tenemos escondido al niño de la profecía, ha atacado ya varias ocasiones, tuvimos bajas y daños, no quiero romper el acuerdo por el bien de los humanos. Eres la única que conoce al niño, debes encontrarlo.

 

     Lo sabía y tenía que apresurarme, el mundo era extenso y la barrera tenía daños significativos. Busque a mi acompañante quien aún recorría con la mirada todos los rincones del lugar. 

 

-No te acomodas Banner que debemos comenzar a viajar...- 

-¿Que...? ¡¿Es enserio?! Ni siquiera he visto todo el lugar. 

Le corte la inspiración de tajo mientras caminábamos hacia la puerta nuevamente. -No hay nada nuevo, habitaciones, salas, luminosos, no importan... vamos, esto será muy largo y tenemos poco tiempo- 

 

     Nos dirigimos al orfanato. Luego de once años volví, seguramente no lo encontraría ahí, pero podría obtener información. Al llegar me derrumbe al ver que ya no era lo de antes, ahora se había convertido en un centro para adultos mayores, comencé a pensar mucho, que se suponía que haría. Por suerte Banner iba conmigo, se acercó para pedir información y quien atendió fue la misma monja de aquel tiempo cuando vine por última vez. 

 

-Luego del incidente trasladaron a todos los niños a otra casa hogar. 

-¿Y que fue lo que sucedió? ¿Nos podría contar un poco?...- Pidió Banner, cuando me mantenía en silencio. 

-Intentaba detener a un par de niños que discutían, recuerdo que uni de ellos estaba muy molesto y de repente hubo un estallido de luz inexplicable, daño el circuito de toda la casa y por eso los niños fueron llevados a otro lugar. 

-¿Recuerda el nombre de ese niño?- La intención de mi compañero era sacar la mayor información posible, y lo estaba logrando. 

La monja continuo dirigiéndose a los dos -Como olvidarlo, con esos hermosos ojos azules y sus rizos, Jared... un niño muy interesante... 

 

     Escuché el nombre y no quería creer que fuera la misma persona, ¿cuantos mas con ese nombre podrian haber?, pero al escuchar hablar de sus rizos y ojos azules me hacian entrar en conflicto. Banner continuo. 

 

-¿Podría contarnos un poco más del chico, por favor? Mi novia perdió a su hermano menor hace tiempo... Y tiene el mismo nombre...

-Eso ocurrió hace varios años, ahora el chico quizás ya sea mayor de edad. Por los comentarios nadie quiso adoptarlo y se retiró de la casa hogar antes del tiempo límite, se empecino con ser modelo, pero no podíamos seguir apoyándolo, su sueño era viajar y verse en una revista. 

-Paris...- Dije de la nada, teniendo una idea para buscar. 

Mi compañero captó enseguida y busco terminar la conversación. -Le agradecemos mucho su tiempo y apoyo hermana, de cualquier forma seguiremos buscando, la descripción que nos da no cumple con la persona que buscamos.

 

     Estaba un tanto soleada por lo que no dije ni una palabra y dejé que Banner manejará la situación. Salimos del lugar y le comenté lo que pensaba. 

 

-Se donde podemos encontrarlo... el chico que me encontré en Londres es el de la profecía...

--¿Estás segura? 

-Como que dormí con él- Dije en tono poco audible pero alcanzó a oír.

-¡¿Que?!...

-¡Totalmente, apresurate¡ 

 

     Viajamos de inmediato y con mucha precaución al lugar donde lo había dejado, fui directo a su departamento, aunque no tenía idea de cómo le diría todo, corrí hasta el tercer piso, en los escalones me topé con uno de sus amigos.

 

- Oye... ¿Eres tu?... ¿Buscas a Jared? ¿No te dijo nada? 

-Me dijo lo de Francia, ¿sabes algo?...

- Si, él se fue, pero aceptó una mejor oferta en China.

-¿China...? ¿Y tienes alguna dirección?...

- Tengo estos datos, pueden serte de ayuda... 

 

     Me mostró el móvil y guarde la ubicación en el teléfono, Banner no termino de subir por lo que baje y le dije que teníamos que irnos. 

 

-¿A China...? Ni siquiera sabes hablar mandarín.

-No hay tiempo, es lo único que tenemos, hay que apresurarno...

 

    Volvimos a tomar un avión y fuimos al lugar en donde se encontraba Jared. Efectivamente no sabíamos el idioma, pero mi astuto compañero recordó conocer a un luminoso de ahí, teníamos que encontrar primeramente el templo en donde él recidía. 




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