Pensabas que tus comentarios jocosos y humorísticos me causaban gracia. Optaste por usar mi inocente confesión en mi contra. Morías por tus carcajadas al verme ruborizar por el sofoco del contratiempo. Inclusive, me dejaste en claro que me veías como una hermana para ti, alguien fuera de su lista de conquistas.
"Querer a alguien no significa intentar lograr un noviazgo con este" eso me repetía constantemente, aun así, soñaba por ti... Tú y yo juntos, algo que tú veías como un insulto.