“Marina era ambientalista y estaba presente ante cualquier manifestación a favor del medio ambiente. Tenía especial interés en las ballenas. Su libro favorito, obviamente, era Moby Dick. En mayo, estos animales, llegaban a las costas de Puerto Madryn y Marina había viajado hasta allí. Subió a un barco y la llevaron a hacer un recorrido por el mar. Fue hermosa la conexión que tuvo con una ballena cuando ésta asomó sus ojos. Mientras estaba admirando al animal, a su lado salió una cabeza con cabellera verde que parecía ser una humana. Esta mujer se sumergió al mar y dejó ver una cola amarilla de pez. Esta visión impactó a Marina. Al día siguiente volvió a embarcarse y la sirena apareció cantando una bella canción. Calló y luego habló a la joven:
-El reino de sirenas y tritones también está en extinción debido a la caza excesiva que hubo en el 1800.
-Pensé que eran solo leyendas – dijo Marina
-Te ruego que hagas concientizar a las personas para que dejen de buscarnos y que podamos coexistir juntos.
Y así lo hizo Marina. Al principio no le creían pero el mundo acuático de sirenas y tritones que estaba oculto se hizo visible y empezaron a socializar con los humanos. A su vez, las personas del planeta tuvieron conciencia de la extinción de varias especies y todo cambió para bien.”