Condenados [saint Seiya]

Capítulo 23 | Revelación

—No—La respuesta dejó mis labios con firmeza—. Eso no es verdad—Repliqué—. Athena, bueno, lo que resta de ella, nos mandó a buscar el Oráculo de Delfos en el Templo dedicado al Dios Apolo, el que resguarda el Santuario. No puede ser que fuera destruido. No es verdad.

—Grettel—Me llamó él, sus zafiros observándome—. El Templo fue destruido y el Oráculo enviado al Olimpo. No hay otra verdad.

Miré con detenimiento sus ojos, dándome cuenta de que estos no brillaban como siempre lo hacían al verme. Entonces, el entendimiento llegó a mí.

—Milo. ¿Recuerdas cuando moriste por última vez?

Él me miró con una ceja enarcada.

—¿Qué dices, princesa? —Inquirió con incredulidad—. Yo no he muerto. Soy Milo, caballero dorado de Escorpio, guardián de la octava casa.

—¿Cuántos años tienes? —Pregunté rápidamente, convencida de que algo no andaba bien aquí— ¿Cuántos años tengo yo?

—Veinte—Contestó—. Tú tienes diecisiete, Grett. Nos llevamos tres años.

Milo sí tenía veinte gracias a que resucitó con la edad que tenía cuando cayó por última vez en la lucha contra Loki, pero yo no tenía diecisiete. Yo iba a cumplir diecinueve años en tres días.

El siete de marzo.

El único día en el que podríamos usar el Oráculo de Delfos.

Esto no era real. Lo supe cuando vi un par de ojos de diferente color en una loba blanca que nos miraba desde la ventana.

—No, Milo—Respondí, llevando una de mis manos a su mejilla para acunarla con mucho cuidado de no quemarlo—. Tú sí tienes veinte, pero es porque resucitaste después de que murieras con todos los dorados en la pelea contra Loki. Yo no tengo diecisiete. Voy a cumplir diecinueve.

—No es verdad—Dijo, muy convencido—. Yo no he muerto.

Asentí con pesar.

—Lo has hecho, Milo—Musité. Mi voz escuchándose como un susurro tembloroso—. Has muerto más de una vez.

—No—Entonces, sus zafiros encontraron los míos mientras brillaban con rabia—. Estás mintiendo.

Negué, mirando a mi alrededor en busca de algo que pueda ayudarnos a salir de esta ilusión creada por Arkhes.

—No te preocupes, Milo. Voy a sacarnos de aquí.

Pero no necesité de mucho más que un chasquido para romper la ilusión. Sin embargo, eso no fue lo que más me sorprendió.

Lo hizo el ver a Arkhes en su forma humana con unos papeles de aspecto antiguo en mano y como Milo yacía en una cama con sábanas blancas de seda, inconsciente.

—Habla—Exigí al ver de nuevo sus ojos color ocre—. ¿Por qué está inconsciente?

La sonrisa de la Pitia surcó su rostro.

—No todos soportan ver la parte oscura de su destino, Macaria.

Sacudí la cabeza en una negativa y, entonces, cosmo convertido en llamas aparecieron en mis manos. Sentí como mi cosmo comenzaba a elevarse, inundando cada fibra de mi cuerpo.

—Ahora mismo me vas a decir dónde está el Oráculo, Arkhes. A menos de que quieras que tu Templo arda en el Infierno y tu alma comience a vagar en el espacio como las de tus colegas cuando cayeron hace más de 243 años.

Esta vez, su sonrisa flaqueó un poco y soltó un suspiro casi imperceptible antes de decir:

—El Oráculo no es un objeto, Macaria—Informó—. Hace un par de décadas, cuando Apolo lo dejó caer a la Tierra, lo hizo encarnando en un cuerpo humano.

Solté un jadeo lleno de asombro.

—¿Qué?

—Lo que has escuchado—Reiteró—. El Oráculo ha estado más cerca de ti de lo que te imaginas.

—¿Quién es? —Demandé—. Dame el nombre, Arkhes.

Al tener el control de la situación, sus comisuras labiales se elevaron.

—El Oráculo encarnó en uno de los Caballeros de Athena—Respondió—. Lo hizo en la amazona de Ave de Paraíso.

Y, justo como el día en que mi hermana había regresado al Santuario, su nombre dejó mis labios en un susurro justo cuando el cosmo llameante de mis manos se extinguió.

—Mila...

Con un asentimiento de cabeza, la Pitia me lo confirmó.

Mi hermana era el Oráculo de Delfos.

Y es por eso que sabía cosas que nosotros ni siquiera imaginamos.

🌠🌠🌠

¡Hola! ¿Cómo están?

¿Qué les pareció el capítulo? ¿Tienen teorías?

¿Se esperaron que fuera Mila el Oráculo? ¿Quién creyeron que era?

¿Qué pasará ahora que Grett sabe esto?

¿Qué habrá visto Milo para quedar en ese estado?

¡Comenten, me gustaría leerlos!<3

¡Los amo! ¡Nos vemos en la siguiente actualización!