Cuando la oscuridad del mundo empañe tu visión, la ansiedad desborde tu razón y el miedo se apodere de ti.
Recuerda aferrarte a quienes están a tu lado.
Sin miedo a molestar, sin temor a perturbar, porque una llamada o un mensaje puede liberar tu corazón del nudo que lo asfixia.
Quizá no resuelvas tus problemas pero al saber que hay alguien para ti las cargas se sentirán más livianas.
Un abrazo siempre te recordará que no estas sólo
La tormenta pronto pasará porque existe alguien que te ama