—¡Lucy... Ya me canse!—me queje mientras seguíamos caminando.
—Aguanta un poco más.. No hemos caminado tanto.
—¿No? Desde que Jett se fue con Elia en la mañana y salimos por nuestra cuenta hemos caminado para ver qué hacer y no hemos hecho nada más que caminar en la playa.
—Pero también sabes la razón por la que no, nos quedamos en la playa.
—Si, ya se, salieron peces globos y nos dijeron que tuviéramos cuidado, te dio miedo y nos fuimos a ver otro lugar pero no hemos encontrado otro lugar.—proteste de mala gana.
—Exacto, además tu tienes la culpa ¿A quien se le ocurre traer sandalias? —me miro los pies y negó con la cabeza.
¿Es... En serio?
—Crei que no íbamos a caminar tanto, además ya me canse y mucho ¿No podemos descansar? —le dije agotada, cansada y sudada.
—Esta bien..., siéntate en esa banca mientras yo voy por algo de agua ¿Bien?
—Si... Gracias..—dije tratando de qué mi respiración volviera a ser la misma.
Me fui a sentar en una banca de cemento que estaba por ahí con unas palmeras a lado que hacían sombra y ahí decidí descansar tanta caminata.
Éramos tan estúpidas de caminar tanto, no llevar agua y encima en tremendo sol. Por suerte el sol ya había bajado mucho, ya eran como 6:30 de la tarde así que el sol ya era casi un atardecer que se veía completamente hermoso.
Seguí sentada y en eso noto que estoy cerca de una cancha de básquetbol donde varios chicos y chicas estaban jugando. En eso siento que me tocan el hombro y veo que es Lucy con las botellas de agua.
—Ten.. —abrió su botella y comenzó a beber.
Hice lo mismo y seguí observando a aquellas personas jugando como distracción. Mi hermana solo sacaba rollo de su bolso y se secaba el sudor de la frente, dándome un pedazo igual a mi.
—Gracias—le sonrió con amabilidad y sigo viendo el partido que al parecer es entre chicas vs chicos— ¿Quien crees que gane? El equipo de las chicas o de los chicos—le preguntó a Lucy.
—Los chicos, se ven ágiles y claro más alto que ellas—aseguró cruzándose de brazos.
—Yo iré al equipo de las chicas. Siento que tienen oportunidad contra los chicos, además.. Podrían utilizar su baja estatura como Estrategia y dársela a alguien que sepa a notar.
—¿Apostamos?—me dio una sonrisa de lado.
—No—le contestó mientras veo el partido y sonrió divertida viendo su berrinche.
Nos quedamos durante un gran rato viendo quien juega y quien no, por sorpresa el equipo no tuvo ganador porque ninguno de los dos daba su mayor esfuerzo y su entrenador los detuvo. Las chicas se fueron a sentar en el suelo haciendo un círculo entre todas ellas, los chicos se fueron a la dirección de nosotras donde yo supongo que irían a la tienda que estaba por atrás de nosotras.
—Al parecer ninguna de las dos ganó.—le sonrió divertida y ella abre ligeramente la boca sorprendida.—¿Estas bien?
—Callate y mira..—me giro mi cabeza hacia enfrente para dejar de verla y no podía creerlo.
No.. No... No esto no podía estarme sucediendo.
¿Que hacia acá Clark?
Lo vi caminar con su camiseta de básquetbol sonriendole levemente a uno de sus amigos mientras caminaba a mi dirección y oculte mi rostro en el hombro de Lucy.
Que no me vea.. Que no me vea..
Cerré mis ojos y luego me di cuenta que igual podría identificar a mi hermana así que también le agache la cabeza simulando como si estuviéramos viendo algo en mi teléfono, veo de re ojo y Clark solo pasa seguido sin vernos y yo con un ataque al corazón.
—¿Que carajos hace tu ex aquí?—pregunto Lucy susurrando.
—Yo que voy a saber Lucy. Lo importante no es eso, lo importante es que no me tiene que ver, no tiene que saber que estoy aquí.—digo nerviosa y agarro la botella de agua mientras agarro la Bolsa de Lucy.—Levántate, nos vamos.
Lucy se levanta con rapidez mientras se acomoda su cabello y caminamos hasta que..
—¿Sara? ¿Eres tú?—escucho su voz y me paralizó completamente mientras mi hermana me ve de re ojo con nerviosismo.
¿Por qué yo? ¿Por qué no soy una súper heroína como Flash y huyó rápidamente de aquí?
Me doy la vuelta para afrontarlo porque aunque quisiera escapar no podria hacerlo, de todos modos estaba todavía la probabilidad de volver a encontrarnos así que no tenía elección. Cuando lo miré sentí como dentro de mi aparecían mariposas y quería sonreírle y correr a sus brazos mientras le decía que lo quería. Pero... Otra parte de mi quería correr hacia el y darle un puñetazo en la cara por ser tan insistente y terco.
Me sentía enojada y feliz al mismo tiempo junto con una combinación de nervios y frustración.
Durante un momento ninguno de los dos dijo nada, solo nos miramos, sus ojos azules con el toque verde en sus ojos me miraba con sorpresa y confusión, estaba sudado con su camiseta de básquetbol con el nombre de su equipo y con unos shorts holgados.
En eso el comenzó a acercarse a mi con lentitud aún sorprendido y confusión hasta que vi salir de su rostro una pequeña sonrisa de emoción y aceleró el paso pero al ver mi seriedad quito la sonrisa y se acercó más lento hasta tenerme enfrente.
—Te.. Estuve mandando mensajes y no me contestaste ninguno, me quedé preocupado.—dijo con pena en sus ojos.
—Me di cuenta de la cantidad de mensajes, unos veinte por día. ¿Que parte de que quiero espacio, no llegaste a entender?—conteste un poco enojada cruzandome de brazos.
—Perdón ¿Si? De verdad lo siento.. Llegue a ser un poco intenso.
—¿Un poco? Si eso para ti es poco no quiero averiguar tu maxima maxima potencia—lo veo y el solo pone su brazo atrás de su cuello mostrándose avergonzado.—Olvidando ese tema Clark ¿Que haces aquí?
—Vine a lo de mi competencia de básquetbol, recuerdo que te dije.
Mierda.. Se me había olvidado hasta ahora, creo que he Estado tan ocupada pensando en mi y en los demás que me olvide eso.
—Ah si... ¿Y como te va con eso? —pregunto incómoda.