Capítulo 2

Durante el viaje no hablamos mucho, verónica estuvo dormida casi todo el camino, la verdad no se como puede dormir tanto tiempo en una sola postura, vanessa y su tío se ponían al tanto de sus vidas, tenían al rededor de tres años sin verse; aproveche para revisar unos proyectos. debía ocupar el tiempo en algo o el viaje se me haría eterno.

—¿Siempre estas trabajando?—pregunto vanessa, mirándome fijamente, aun no logro entender porque cada vez que me mira me pongo nerviosa—

—No, solo reviso unos proyectos, si mantengo la mente ocupada siento que el camino es menos largo—conteste sin mirarla—

—¿ y por que no hablas conmigo?

— Estabas hablando con tú tío y no quise meterme en su conversación.

—Pero ya estoy para ti—soltó de repente mientras se acercaba—

Esta niña me va a traer problemas—pensé mientras tecleaba mi ordenador, fingiendo no haber escuchado lo que dijo—

—¿En que trabajas?

—Soy ingeniera— conteste! alejándome un poco, estábamos muy cerca y si uno de los chicos volteaba se podría mal interpretar.

No logro entender que le pasa, porque se comporta así, porque me mira de esa manera, en que momento dejo de ser la niña de 17 años que le gustaba que le horneara galletas.

Por suerte verónica y robert estaban ajenos a nuestra conversación.
tenían una acalorada discusión sobre si el niño que tendrán se llamara Jonathan o enmanuel. Esos dos terminarán matándose antes de que tengan el bebé.
                
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08:30
Fue un viaje bastante largo.
llegamos muy cansados y solo podíamos pensar en dormir.

La mamá de robert vivía en un lugar alejado de la cuidado, un lugar lejos del caos, donde no tenias que preocuparte por celulares, trafico, WiFi, etc.
Y era justo lo que nos gustaba, la tranquilidad, la paz que sentías al tomar una taza de café en las mañanas. Que mejor lugar que este para descansar.

Vanessa y yo tuvimos que compartir la habitación, la verdad no estaba acostumbrada a compartir habitación con otras mujeres. ni siquiera con pamela que es mi mejor amiga.

La habitación era muy acogedora. tenia unas cortinas finas que permitían entrar los rayos del sol en la mañana, la cama no era muy grande pero cabían perfectamente dos personas delgadas, una mesita de noche un poco antigua igual que el sofa que estaba en la esquina, aunque a pesar de estar viejo se veia bastante cómodo.

Estaba muy cansada como para ponerme a deshacer las maletas, tenia los ojos pesados y me dolía la espalda—tal vez me estaba poniendo vieja—pense mintras buscaba mi pijama para cambiarme.
cuando volteo vanessa está en la cama desnuda.

—Me pasas una sábana del closet por favor— me dijo con una risita en los labios—

No pude evitar sonrojarme y lo peor es que me quede allí parada como una idiota mirando sus pechos; pero que demonios estoy haciendo— dije por mis adentros—

—¿Por que estas desnuda?—pregunte cuando por fin pude quitar la mirada de su cuerpo—

—Me gusta dormir asi.

—Me quedare en el sofá— dije, cerrando la puerta del baño de un portazo—

Está más loca de lo que creí— me dije mientras entraba a la ducha—necesitaba un baño, estaba muy cansada y confundida.

Vanessa me estaba provocando, no se porque y lo peor es que no me molestaba.
por Dios lían que estas pensando, tu eres hetero— me dije una y otra vez mientras el agua caí en mi cuerpo—

El tiempo se me paso volando en la ducha, Cuando salí ella ya estaba dormida, cosa que agradeci.
tome una sábana y me fui a dormir al sofá.