...

Enrique fue a buscarla a la habitación, pero no la encontró, tocó la puerta del baño y Cindy echó un grito…

-Ay! ¿Quién? – preguntó Cindy.

-Soy yo, Enrique. ¿Te asusté? – le dijo él.

-No, no, para nada, solo que pensé que eras Carlos – respondió riéndose.

Enrique también se reía, le dijo a Cindy que estaba lloviendo muy fuerte y que tal vez era mejor que se quede ahí en su casa de él.

Cindy le dijo que no, que de todas formas tenía que trabajar, pero Enrique la interrumpió recordándole que era su día libre, al parecer Cindy estaba desconcertada con el tiempo.

Ella revisó su móvil para fijarse el día y sí, Enrique tenía razón…

Cindy le respondió que le gustaría quedarse con él, pero iría a visitar a su madre y a sus hermanitos ya que los extrañaba mucho y su hermana menor llegaría de su viaje (su hermana se había ido al extranjero para estudiar en mejores escuelas, sus padres y Manuel y Cindy no entendían el hecho de que ella se fuera del país ya que en la ciudad en donde ellos vivían habían escuelas muy buenas).

Enrique le comentó que había traído comida, entonces ella para no hacerle el desplante le dijo que se quedaría para que comieran juntos y que luego se iría, entonces Enrique le propuso comer y él la llevaría a casa de su madre.

Ella asintió con la cabeza con una sonrisa mientras rodeaba el cuello de Enrique para besarlo, él él correspondió al beso de inmediato.

Unos segundos después fueron interrumpidos por el móvil de Enrique, que estaba sonando, alguien llamaba, era Elena.

Enrique envió al buzón la llamada, lanzó su móvil a la mesa después de haberlo puesto en silencio y luego miró a Cindy y le dijo:

-¿En qué estábamos?

Cindy lo miró algo confundida y le preguntó:

-¿Quién era?, ¿por qué no contestaste?, por ahí era algo importante…

-Nada es más importante para mí, que tú, en estos momentos, ¿me entiendes? – dijo Enrique tomándola por el mentón para besarla.

Por el otro lado, Elena estaba molesta, “de seguro está con esa mujer”, pensó, refiriéndose a Cindy. La sola idea de que Enrique estuviera con ella, dándole todo el amor que era de ella la estaba torturando, pero no le quedaba más que aguantarse.

Elena decidió visitar a Enrique, pensaba que tal vez Cindy ya no estaría con él énfasis ésos momentos, cuando estaba por la esquina de la casa de Enrique, los vió a ambos salir en el coche de él.

Lo que ella se había imaginado era cierto, al parecer Cindy había pasado la noche en la casa de él, frunció los ceños prometiendo separarlos, y que si no dejaría de llamarse Elena Gate.

Se marchó muy molesta, caminando muy rápido para que no notaran su presencia.

Al llegar a la casa de la madre de Cindy, ella se bajó del coche de Enrique pero antes le dio un beso en los labios y luego se dirigió a tocar la puerta.

Enrique aceleró y se marchó.

El padre de Cindy fue quien abrió la puerta, ella se sorprendió al ver que su padre se encontraba ahí.

Él la invitó a pasar y luego le dijo que se sentara en el sofá, que en unos momentos saldría su madre, quien se encontraba en el baño.

Su padre le preguntó cómo estaba, a lo que ella repondia con palabras mono y bi-sílabas, por lo visto ellos no tenían una buena relación de padre a hija, y era algo razonable, ya que él había engañado a su madre por mucho tiempo, y a causa de ello, él ño pasaba tiempo con ella ni con sus hermanos y al parecer ahora quería arreglarlo todo, pero eso no sería posible, Cindy sentía ira al acordarse de ese tema.

Su padre trató de buscarle conversación, pero todo el ambiente estaba tenso, Cindy sólo esperaba que su madre saliera de una vez…