Conociendo a tu Crush

Capítulo 17

──────•❥❥❥•──────

Es imposible no llevar una sonrisa estampada en el rostro cuando sé que conoceré a los padres y hermanos de Aaron.

Estoy muy emocionada. ¿El problema? Que no puedo ocultar esa emoción, pero algo que me preocupa de todo esto y que lo he pensado durante toda la semana, es que no le vaya agradar a su familia.

¿Y si no les caigo bien? ¿Y si lo estropeo todo? ¿Y si me odian? ¡Agh! Tanta intriga, ¡ya quiero conocerlos!

Mientras la fría brisa hace que el sudor de mi frente se seque, la coleta alta rebota de un lado a otro sin parar. He encontrado un lugar genial para correr, no he de decir que tiene una superficie plana, porque no es así, pero el ambiente hace que me relaje y deje todos mis pensamientos de lado.

El bosque es un poco húmedo; el barro y las hojas mojadas se pegan un poco en mis tenis blancos, las cuales se van tornando de un color café y eso me recuerda no volver a traerlas en este recorrido.

La música hace que me pierda en mi imaginación y la densidad del bosque se termina cuando llego a la calle de vuelta a la universidad.

Esta semana tuve que pedir posada en el dormitorio de Zoe, ya que es la única chica que conozco, y definitivamente no volvería al dormitorio de Aaron, ya que fue un poco incómodo. Además, no me gustaría que el motivo de mi presencia en su habitación fuese para evitar a Skylar, y debido a eso tenía que salir casi corriendo por los pasillos durante la mañana para no tener faltas, también tuve unos cuantos tropezones por los escalones para llegar a mi dormitorio.

Ningún esfuerzo funcionó porque igual llegué tarde a clases.

Debo decir que llegar toda una semana tarde a mis lecciones no me enorgullece, por lo general, cuando estaba en la secundaria, solía ser de las que tenían una asistencia casi perfecta, ahora no puedo mencionar mucho sobre ello.

Volviendo al tema, tuve que dormir en esa estrecha cama, la cual no es nada cómoda, ya que casi siempre tengo toda la cama para mí y poder estirarme como gato panza arriba, en esta no podía porque una pelirroja y el poco espacio que había me lo impedían.

Pero no puedo seguir de esta manera. Sé que debo de enfrentar a Skylar y aclarar las cosas, pero en realidad no sé como podré hacerlo.
Todo es tan frustrante que no creo poder evitar gritar cuando la vea.

Me planteo mentalmente hablar con ella una vez que vuelva de mi viaje con Aaron.

Levanto la vista, ya que la llevaba clavada en el suelo y agradezco a Dios por no haberme trop... ya lo hice.

Observo la inmensa universidad y atravieso el campus hasta llegar al edificio de los dormitorios.

Subo las escaleras hasta llegar a mi piso y ahora caminar con tranquilidad a mi dormitorio... tranquilidad que se va cuando veo salir a Rick de allí.

Su vista algo cansada se clava en mí y antes de poder dar un paso atrás, me toma del brazo.

―Espera ―me dice suplicante. Bajo inmediatamente la vista sin decir nada, ya que sé que dirá que lo lamenta, y yo no le responderé porque aún me duele el hecho de que para él soy alguien insignificante―. Lo siento.

Levanto la vista ya sabiendo que diría eso, aunque ya no sé si creerle, mi orgullo junto con mis sentimientos se ven heridos. Sin dirigir palabra alguna, me suelto bruscamente de su agarre y entro a mi dormitorio dando un portazo a mis espaldas.

Sin fijarme si está Skylar, tomo la maleta que está debajo de la cama y la pongo sobre ella, abro el armario y empiezo a escoger la ropa rápidamente y luego a meter todas las prendas y cosas necesarias para cerrarla.
Me dirijo al baño y me doy una buena pero rápida ducha para luego salir ya vestida y tomar la maleta para salir.
Al querer tomar el pomo, observo como esta gira sin yo haberla tocado y retiro la mano rápidamente, mi pulso se acelera y la puerta se abre dejando ver a la persona que menos quería ver en este momento.

Skylar.

Antes de que ocurra algún percance u otro incidente, la esquivo y camino a paso rápido por el pasillo, bajo las escaleras con cuidado de no caer y al llegar al final de ellas, sigo arrastrando la maleta hasta llegar al estacionamiento.

Me detengo mientras mi corazón va normalizando su ritmo y observo con detenimiento el estacionamiento hasta que veo a Aaron metiendo unas cajas a un Mini Cooper color rojo que me parece ya haberlo visto antes, le resto importancia al asunto y camino hacia el auto.

―Hola. ―saludo casualmente y miro cómo se exalta y se golpea la cabeza cuando intenta salir del auto. Suelto una risilla y él me mira mal.

―No vuelvas hacer eso otra vez, por favor. ―dice sobándose la cabeza y cerrando la puerta.

―¿Por qué tantas cajas? ―pregunto mientras miro el asiento trasero repleto de todas ellas.

―Son algunas de las cosas que traía de Nueva York y que ya no las utilizaré, además no tengo el espacio suficiente en el dormitorio para ellas ―dice con sus manos en las caderas. Asiento y él mira mi maleta―. Dame tu equipaje, lo pondré en la parte de atrás ―extiende sus manos y se lo entrego, luego él lo lleva a la cajuela y lo coloca allí para finalmente cerrar la puerta y volver―. ¿Nos vamos?

Asiento y camino hacia el otro lado del auto para sentarme en el asiento del copiloto.

Solo espero que el transcurso en el camino no se torne incómodo como cuando dormimos juntos.

 

~✧~❂~✧~

 

Por muchas razones no quería dormir, pero al final lo terminé haciendo.

Me levanté totalmente desorientada y con el cinturón ahorcando literalmente mi cuello.

Bajo el espejo que se encuentra frente a mí y observo mi aspecto: completamente despeinada. Sí, otra de las razones por las que no quería dormir. Ahora solo me faltaba que estuviera... ¿Eso es baba? ¡Dios, que vergüenza!

La limpio rápida y disimuladamente de mi boca con la manga del suéter y del cinturón para que no se note, si no esto sería una de las cosas más vergonzosas de toda mi vida, aunque bueno, ya lo es.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.