Conociendo a tu Crush

Capítulo 18

──────•❥❥❥•──────


Oh... por... Dios...

―¿Disculpa?

―Ah... yo...

―¿Jake? ―los dos giramos en la misma dirección.

Como lo escucharon, no es nada más, ni nada menos que Jake Beckett, el hermano de Aaron, su gemelo, mi ídolo. ¿Ya captaron? Porque yo espero que sí.

―¿Cómo estás, hermano? ―los gemelos se abrazan y yo me quedo en medio pasillo aún sin poder creer lo que ven mis ojos.

Jake. Aaron. Aaron. Jake. Jake. Aaron.

Que bueno que sé distinguirlos porque si no... un momento, no se pueden enterar, de lo contrario, adiós planes a la basura.

―¿Melody?

Sacudo mi cabeza y me centro en la situación.

―¿Si?

―¿Estás bien? ―pregunta Aaron con una pequeña sonrisa en su rostro y asiento.

―¿Confundida?

―Nah... Sí. Un poco, bueno mucho.

Casi meto la pata.

Los dos se ríen de mí y por segunda vez en Londres, me quedo como boba viendo a una persona que no es Aaron, es decir, es casi igual a él solamente que tiene sus diferencias, muy indistinguibles por cierto. Solo una fan real de los Twins Beckett podría diferenciarlos sin ningún problema.

―Melody, él es mi hermano gemelo, Jake. Jake, ella es Melody, mi compañera de carrera.

Un ‹‹mi querida compañera de carrera›› no hubiera estado mal.

―Mucho gusto. ―extiendo mi mano y él la estrecha.

Wow... es igual de guapo que Aaron. Aunque es increíble que no me haya comportado tan torpe o apenada como cuando conocí a Aaron, creo que es porque ya me estoy acostumbrando, pero aún sigo un poco emocionada, digo, es Jake Beckett, ¿quién no lo estaría?

Aunque, ¿por qué siento que Jake es más mi ídolo y Aaron mi crush?

―Encantado. ―dice para luego regalarme una de sus muchas y perfectas sonrisas.

Miro a Aaron y Jake me mira a mí mientras Aaron ve a Jake, agh, esto es más confundido de lo que pensé.

Nos quedamos en silencio sin saber qué hacer hasta que carraspeo llamando la atención de ambos.

―¿Nos quedaremos aquí en silencio o iremos a pagar esto? ―digo mientras levanto los salvavidas.

―Iremos a pagar eso. ―los señala Aaron.

Empezamos a dirigirnos a la caja registradora y, mientras Aaron paga, me dedico a ver el lugar hasta que mis ojos se topan con una motocicleta Harley Davidson color negra en la gasolinera de en frente, pero lo que más llama mi atención es un chico muy alto y con buen cuerpo que porta una chaqueta negra de cuero.

Su peculiar caminar de macho alfa se me hace familiar, pero lo paso por alto al no ver bien su rostro a causa de la falta de mis lentes o mejor dicho porque odio usarlos, aunque esta es una de esas situaciones donde agradecería o ver bien, o llevarlos puestos.

Realmente me recuerda a alguien, pero dejo a un lado en quien estoy pensando porque simplemente me trae un mal recuerdo y es imposible que esté tan lejos de la universidad.

Aaron termina de pagar, toma las cosas y salimos de la tienda. Miro por encima de mi hombro antes de subirme al auto, ya que el chico está del otro lado de la calle y lo observo de espaldas ponerse el casco, montarse en la motocicleta y luego arrancar para irse. Sin embargo, envés de hacer eso, antes de salir de la gasolinera, mira en mi dirección, lo cual provoca que mi piel se erice y se queda unos cuantos segundos mirándome.

―¡Hey! Melody.

Nuestro contacto visual se rompe y miro a quien me llama.

―Ya metí las cosas dentro del auto, ¿nos vamos?

Observo a Jake ocupando mi lugar en el asiento delantero.

Genial. Ahora tendré que viajar en la parte trasera sin la agradable compañía de Aaron.

―Sí, dame un segundo.

Giro sobre mis talones debatiendo entre subir al auto o caminar hacia el chico. Al final, me armo de valor y decido ir hacia él, pero al ver que el casco se desvía en dirección hacia Aaron al mismo tiempo que estoy apunto de dar el primer paso, él pisa el acelerador a fondo y conduciendo de manera brusca se va.

Me quedo congelada en mi lugar con la mente en blanco por un momento.

―Oye ―Aaron me llama y lo observo. Parece haber notado lo sucedido―. ¿Lo conoces?

Mi ahora respiración agitada hace que me pierda en el tiempo y mi cerebro formule miles de preguntas y pensamientos en mi mente. Preguntas de las cuales solo tienen un nombre por respuesta, y el cual no quiero nombrar.

―No. ―respondo de manera fría y me dirijo hacia el auto.

―¿Estás bien?

―Sí, estoy bien. ―digo subiendo a la parte trasera.

Por supuesto que estaba bien, el único problema era haber creído que era mi amigo y haber sido tan ingenua. Y el pensamiento de que posiblemente me gustara o yo a él.

Por segunda vez en mi vida sentía que mis sentimientos iban a ser correspondidos y una segunda vez... no fue así.

―¿Qué fue eso? ―pregunta entrando al auto.

―No fue nada... ―murmuro.

Me mira por el espejo retrovisor y sin preguntar más, da arranque.

 

~✧~❂~✧~

 

Al llegar a su casa, Jake decide hacer unas palomitas para sentarnos a ver una película de terror. Al principio no estuve de acuerdo, y no porque me dan miedo, si no porque simplemente no me gustan mucho, pero al final, terminé accediendo.

La película no dura demasiado, y observo a Jake levantarse del sofá.

―Muy bien. ―dice Jake apagando el DVD y haciendo algo, lo cual no me permite ver porque su gran cuerpo lo cubre.

Miro la hora en el reloj, el cual marca las 10:30 p.m. y ni pizca de sueño tengo.

―¿Qué haces? ―pregunto mientras lo miro buscar entre unas cajas.

―Buscando los mandos de la consola. ―dice rebuscando.

―Oh.

―¿Qué? ¿No te gusta? ―pregunta volteándose hacia mí.

―¿Es en serio? ―cuestiono con una mueca. Él me mira decepcionado como si ya supiera la respuesta―. ¡Me encanta! Jake, eso no se pregunta. ―su rostro ahora muestra sorpresa.

Aaron, que estaba ya casi dormido en el sofá, al escuchar lo que dije, se espabila y me mira igual de sorprendido, como si no se creyera que me guste jugar con una consola.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.