Conociéndote

Capítulo 15

Horas después, mientras intentaba dormir, Helena pensaba en lo que le esperaba al día siguiente. Ben había dejado en claro su intención de hacerlo público en la escuela, y ella se sentía insegura. Luego con una sonrisa lo recordó a él frente a su padre y hermano, tan decidido, prometiendo que la cuidaría y diciendo que no tenían de que preocuparse, mientras sus familiares jugaban a ser los ogros de la película antes de aprobarlos finalmente.

Sabía que vendrían momentos difíciles para ella, tendría que enfrentar algunos fantasmas y seguramente a muchos idiotas que querrían hacerla sentir mal, pero la recompensa era Benedict Cole, y valía la pena luchar por él.

Aún así, a la mañana siguiente cuando él pasó a buscarla para ir juntos a la escuela, volvieron sus inseguridades.

-¿Qué haces aquí?

-Me preocupaba que finalmente decidieras huir.

-Dije que no escaparía, Ben.

-También podrías llegar tarde.

-Ya no llegó tarde, me asustan los delegados entrometidos que podría cruzarme.

-Coincidimos en eso, me preocupa mucho con quiénes podrías cruzarte.- respondió sonriendo. Ella suspiró ruidosamente. Antes que reaccionara él le quitó la mochila, se la colgó en el hombro y la tomó de la mano mientras caminaban a la parada de autobús.

-Oye, delegado, no necesito que hagas eso. Puedo cargar mis cosas.

-Sé que puedes, la cuestión es que quiero hacerlo por ti. ¿Lo olvidas? Soy el chico perfecto...planeo ser el novio perfecto - le dijo y ella sacudió la cabeza. Ben iba a ser difícil de manejar, y siempre lograba desconcertarla para luego salirse con la suya.

Al llegar a las puertas de la escuela, Helena soltó la mano de Benedict

-¿Lena?

-¿Estás seguro? Digo, no creo que sepas a que te enfrentarás, tus amigos te criticarán o se apartarán de ti por salir conmigo, incluso dirán cosas que harán que te enfades. Las chicas esas que viven detrás de ti tampoco lo pondrán fácil, e incluso los profesores te mirarán raro por salir con la chica con la mala reputación.

-Helena...- trató de calmarla él.

-Es que no quiero que salgas lastimado, sé cómo se siente, yo puedo soportarlo, pero no deberías pasar por eso.

-Helena...

-Y si te hacen sentir mal podrías llegar a odiarme ...

-No va a funcionar - dijo él.

- Eso digo, esto...- continuó ella aunque le resultaba doloroso que él al fin dijera que no resultaría.

- Lo que no va a resultar es hacerte callar todo este balbuceo, tendré que tomar medidas drásticas - dijo antes de envolver sus rostro con sus manos y besarla. Fue un beso más serio que el roce leve de la vez anterior. Helena quedó cautivada por las sensaciones. Cuando él se separó se dio cuenta que había estado sujetándolo por el brazo con fuerza, como si lo último que quisiera fuese dejarlo ir.

-Estamos en la escuela...-musitó sonrojada.

-Todavía no entramos ¿Y?

-¿Y qué? - preguntó ella.

-¿Recuperaste tu valentía?

-De acuerdo, delegado, vamos a escandalizar gente - dijo ella y le tendió la mano, Ben la tomó y entraron.

Era temprano y había pocos alumnos, aún así ambos fueron conscientes de los murmullos a su alrededor mientras recorrían el pasillo tomados de la mano.

La mirada que les dirigió Lorena cuando entraron a la clase fue veneno puro, la rubia sin dudas odiaba a Lena y también aún estaba enfadada con Ben desde el hecho del teléfono, pero también era obvio que se sentía despechada porque él la había despreciado

Ben pensó que quizás había sido un poco soberbio, en su alegría por aquella relación había minimizado el impacto que podría sufrir Helena.Pero era un escollo que tendrían que superar tarde o temprano, y él sabía que su chica tenía fuerzas para salir adelante. Sin mencionar que no pensaba perderla de vista ni un segundo.

-¿Qué haces? - preguntó Helena cuando vio que él estaba por sentarse a su lado.

-Sentarme.

-Este no es tu sitio, Ben, ve a tu lugar. Estaré bien.

-De acuerdo, pero si sucede algo, me llamas.- dijo tan serio que ella sonrió. Se sentía extraño ser protegida tan ferozmente.

-Es un trato, te diré si alguien me roba los útiles o me saca la lengua - respondió intentando aligerar el clima. Él asintió y fue a su sitio.

La situación se puso más tensa a la hora del almuerzo, era obvio que el rumor ya se había regado por toda la escuela pues eran el foco de todas las miradas.

-Voy al baño - dijo Lena y Ben se giró hacia ella - ¡Ni se te ocurra! No puedes acompañarme.

-Bien, pero te esperaré en la puerta.

- Estoy empezando a preocuparme que seas un acosador en lugar de un novio.

- Soy nuevo en esto, ¿sabes?

-Creo que tendremos que tener una charla seria sobre esto pronto - dijo ella y fue al baño mientras Ben se quedaba haciendo guardia afuera.

Sin embargo apenas ella salió se vieron obligados a separarse porque un profesor le pidió a Benedict que lo acompañara para darle material que debía fotocopiar.

Él hizo una mueca de disgusto pero no pudo escabullirse, Helena le dijo que compraría la comida y lo esperaría en los jardines.

Se refugió en el mismo rincón al que iba siempre, aunque poco después se arrepintió, parecía ser el destino de cualquier persona que escuchara conversaciones ajenas a escondidas, escuchar cosas malas, aún cuando no había sido su intención espiar a nadie.

Las chicas que hablaba no debían estar muy lejos ya que sus voces le llegaban fuertes y claras, o bien no tenían la más mínima intención de ser discretas.

-¿De verdad Benedict Cole está saliendo con una chica como ésa? - preguntó una de ella y la palabra ésa se le enroscó a Lena en el estómago. Era tan peyorativa como el tono de voz.

-No creo que sea verdad - dijo la otra- Quizás sea un juego o una apuesta de esas que hacen los chicos. Él es tan perfecto y ella...bueno es mala estudiante, la echaron de otros lugares y es tan ordinaria.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.