Conspiración

Oswaldo II

Oswaldo

Los tres agentes restantes continuaban con sus investigaciones mientras esperaban el regreso de los agentes Méndez y Hernández, llevaban varias horas de revisar videos, comparar el ADN encontrado en la escena con todas las bases de datos que tenían disponibles, Oswaldo sabía que se encontraban cerca de alguna pista importante, por eso tenían que seguir investigando sin descanso

—Oswaldo tengo algo, tal vez quieras echarle un vistazo— mencionó Alberto provocando que ambos agentes lo miraran levantándose de sus asientos y acercándose a él —estaba examinando los videos que dejo Méndez y pude aclarar la imagen del automóvil captado en el video— decía esto mientras les mostraba los fotogramas de la grabación, en ellas por fin se veía con más claridad el segundo automóvil, un Subaru blanco sin placas 

—esto es más difícil de lo que creí, sin las placas no podemos hacer un seguimiento del vehículo— dijo el líder de la investigación sin despegar los ojos de las imágenes de la computadora, comenzaba a sentirse desesperado, cada vez que encontraban algo, parecía que surgían nuevos problemas

—además he continuado con la búsqueda de la camioneta que vimos y lo que encontré no te gustara nada— dijo el agente más joven del grupo mientras les mostraba las imágenes del vehículo que les mencionaba, tanto Oswaldo como Mónica se acercaron más a él —tal como dijiste trate de ver si era robado o algo por el estilo, el resultado fue negativo, es una camioneta oficial del gobierno en la que huyeron los perpetradores del ataque, eso nos lleva más cerca de la sospecha de Adriana acerca de quién fue el cerebro detrás del ataque—

—supongo que es cierto, esperaba no tener que lidiar con algo como eso, solo esperemos que ellos no sepan en lo que estamos metidos, si llegan a saberlo nuestras vidas correrán riesgo— mencionó Oswaldo mirando a ambos agentes, aunque no quisiera aceptarlo, le aterraba la idea de enfrentarse a este caso, gracias a Adriana sabía lo que le ocurría a todo aquel que investigara en lo que, según el propio gobierno, no era de su interés, la agente Mónica pareció percibir su preocupación ya que lo miro ofreciéndole una sonrisa reconfortante, misma que el hombre le correspondió, ambos continuaron mirándose por un corto momento antes de verse interrumpidos por el sonido de la puerta

—hemos vuelto— anunció Adriana quien caminó a su escritorio, por la puerta se asomó Iván, quien parecía estar a punto de devolver el estómago

—Oswaldo te respeto mucho y todo eso, pero la próxima vez que me envíes a investigar algo junto a Méndez te lanzo por la ventana— advirtió el agente tomando asiento en su escritorio y enterrando la cabeza entre sus brazos, el aludido soltó una pequeña risa acercándose a él para palmear su espalda ligeramente 

—nuestro pequeño paseo fue relajante, no sé porque se queja— señaló Adriana mirándolo desde su lugar

—¿relajante?, ¿ir a 180 kilómetros por hora en una avenida de 60 te parece relajante? — explotó el hombre levantando la mirada

—eso más del doble de la velocidad permitida, ¿Cómo puedes verte tan tranquila después de un viaje así? — cuestionó Alberto levantando la ceja derecha

—pude haber ido más rápido, pero este cobarde no dejaba que acelerara más— respondió sin darle mucha importancia al asunto

—Adriana, que te he dicho acerca de conducir de esa forma, podrías causar un accidente— regaño Oswaldo a su amiga

—como si no me conocieras, sabes que jamás he tenido un accidente automovilístico y eso es mucho decir para alguien que se dedicaba a las carreras callejeras… en fin, tenemos el nombre del sujeto de la prótesis— dijo extendiéndole su teléfono con algunas fotografías —no nos fue posible traer su archivo, el director del hospital bloqueo la investigación—

—¿y cómo consiguieron eso? — preguntó Mónica acercándose a Oswaldo para mirar las imágenes

—al parecer los amigos delincuentes de Méndez están por todos lados, uno de los doctores del lugar robó la llave para dejarnos entrar— respondió Iván ganándose una mirada de molestia por parte de Adriana, por otra parte, Oswaldo conecto el teléfono para ver las imágenes con mayor claridad

—sabía que ese sujeto nos ayudaría— señaló el líder de la investigación

—¿Cómo supiste que Christopher trabaja ahí? — cuestionó su mejor amiga

—lo supe una vez que acompañé a mi padre a ese hospital, no te dije antes porque lo había olvidado, además recuerda que una de las cláusulas para no ir a prisión es no volver a involucrarte con ellos— la respuesta de Oswaldo hizo que la mujer soltara un suspiro cansado 

—eso lo sé, aun así, fue bueno verlo de nuevo, aunque solo por un rato, gracias por enviarme ahí Oswaldo— agradeció sin mirarlo, el aludido solo soltó una pequeña risa mientras miraba los archivos fotografiados, después de encontrar el nombre de la persona de la prótesis comenzó a compararla con las bases de datos policiacas, en lo que la máquina procesaba los resultados el agente Altamirano dirigió su mirada a su amiga

—y tu amigo el doctor, ¿continúa con en eso de las carreras? — 

—claro, nadie en su sano juicio dejaría de ir— respondió sin quitar la mirada de la pantalla donde parecía estar revisando los videos 

—¿eso quiere decir que tú no estás cuerda? — preguntó Alberto levantando la mirada del ordenador



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En el texto hay: policias, romance, accion

Editado: 23.07.2020

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