CAPITULO 9

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2 semanas después.

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Narra Liz.

–Deberías haber llegado hace 15 minutos – le reclamo a Albert.

–No te preocupes, si alcanzas a llegar a tu prueba – dice divertido, casi como si fuera una burla.

–Emily está dormida, en su habitación.

–¿Alguien ocupó la tuya anoche? No quiero que mi hija escuche películas pornográficas – dice riendo.

–Cállate Idiota – digo tratando de sonar molesta, la verdad es que el chico me divierte bastante.

–Veo que sí – pasa corriendo y se encierra en el baño riendo.

–Albert te voy a matar, idiota, estúpido, imbécil.

–Vas a llegar tarde – maldito, se ríe.

Salgo del departamento, voy a ir en moto, llego más rápido. Mi celular comienza a sonar y puedo intuir que se trata de Mary o Sam.

–Liz, apura, te quedan 10 minutos para llegar, nosotras ya estamos todas.

—En 5 llego.

Corté la llamada antes de que me sigan retando todas. Tomo la moto, me pongo el casco, me pongo la mochila, me subo y enciendo la moto. Voy saliendo cuando el portero me entrega una nota, no tengo tiempo de tomarle fotos, pero igual la voy a leer.

"Cuidado con cada curva o vuelta de la vida. Puede que no te pueda quitar a tu hija, pero, a tu hija la puedo dejar sin ti"

La guardo en mi chaqueta. Luego tendré tiempo. Mi celular no ha parado de sonar, he tardado más tiempo, el tráfico no va a mi favor.

Voy a una cuadra de llegar, lo último que escucho es el disparo y las bocinas, y lo último que siento es ese dolor que se expande y no puedo respirar.

Narra Albert.

Estoy vistiendo a mi pequeña, aún no la alimento, por lo que también estoy preparando su biberón. La termino de vestir y la dejo en su cuna. Finalizo de preparar el biberón. Alimento a mi pequeña reina que al parecer me ama tanto como yo la amo a ella.

Mi celular comienza a sonar. Es Liz que de seguro debe de pensar que, si no me controla, o mi hija o yo nos moriremos.

–¿Qué quieres Elizabeth?

–¿Hablo con Albert Irwin?

–Sí – respondo confundido a la voz del hombre

–Habla con el oficial Pool, le informamos que la señorita Elizabeth Dallas ha sufrido un accidente, la estamos llevando al Hospital Central Santa Trinidad.

–Voy para allá. Gracias por avisar.

Busco el bolso de Emily, siempre tiene de todo así que solo me queda arreglar a mi reina. Tomo todas las cosas necesarias y bajo a mi auto. No está la moto, no me quiero imaginar cómo fue el accidente. Subo el bolso al auto y aseguro a Emily en su silla de seguridad. 

*Hay que avisar a alguien más*

Sam.

Conecto mi celular al altavoz del auto, el cual enciendo apenas puedo, pues mis manos tiemblan sólo por el pánico a que algo malo le llegue a pasar.

–Albert – contesta una Sam bastante molesta, diría yo

–Al Hospital Central Santa Trinidad, Liz tuvo un accidente me avisaron hace unos 5 minutos y yo ya voy de camino.

–Vamos a ir. Avisaré a los demás.

–Bueno ahí nos vemos

En 10 minutos llego al Hospital, estaciono y me bajo, también bajo a mi hija que va divertida solo porque le gusta salir al aire libre. Entro al Hospital por el área de urgencias, llego a recepción donde hay un chico que coquetea con la chica tras del mostrador.

–Buenos días, busco a Elizabeth Dallas, dijeron que la trajeron para acá.

–¿Usted es? – pregunta la chica sonrojada por como la está mirando el chico.

–El papá de su hija.

–Ella está en el quirófano, ingresó hace 10 minutos, no sé nada más. Puede esperar en la sala de esperas en el segundo piso a la derecha – informa a pesar de que no soy quién para preguntar por Liz.

–Gracias.

Subo y quedo en la sala de esperas. Mi Reinita no puede quedar sin su mamá. Al cabo de 5 minutos llegan, Sam, Mary, Emily, Sophie, Rosie y Jack.

–¿No han dicho nada? – pregunta Mary que viene corriendo hacia mí.

–No, solo sé que está en el quirófano, yo vine lo más rápido que pude – digo algo angustiado.

Me miran extrañadas, todos encuentran rara la situación o relación que estamos llevando con Liz y creo que en cierto punto los llegó a entender, pero es que tampoco es para que exageren, pues soy el papá de Emily les guste o no.

–¿Venían del mismo lugar? – pregunto.

–Sí, estábamos en la prueba del vestido – dice Rosie.

Los chicos llegan corriendo, Chris abraza a Sam, Matt llega donde Sophie, Seba besa a Rosie, Cam abraza a Emily, Andy se acerca donde su amada Mary, Ethan abraza a mi hija y Ben se junta con Jack. Al rato llega Marcus y su hermana, Luisa besa a Ethan, por lo cual vuelvo a tener a mi hija en brazos.

–Mira. Sí el papá se quiere hacer el novio.

Juro que mataré a Marcus

*Buscaré ideas de cómo*

Ahí planeamos. 

–Marcus cállate. Él está acá porque fue al primero que llamaron – dice Chris que obviamente me defiende porque en el fondo agradece que esté acompañando a Liz en el proceso de “maternidad".

Han pasado 3 horas, unos dan vueltas, otros están sentados, algunos han ido a buscar algo para comer. Emily ha dormido, reído, pasado de brazos en brazos y jugado con su tío Chris.

–Tenemos que ir a trabajar – dice Seba – debo calmar a toda la prensa, ya se enteraron del accidente.

–Sí, tenemos que irnos, hay que trabajar – acota Ben.

–Seguiré buscando quien pueda cuidar a Emily, ¿Te vas en 3 días? – pregunta Mary.

–Sí – admito. 

Creo que tener una relación tan confiada con Mary me hace sentir más en confianza con la familia Dallas, pues a pesar de todo lo que pasó entre nosotros siento que seguimos siendo esos amigos que a pesar de todo están contigo y te aceptan tanto por tus pro y contras, así como ella me dice cuando estoy equivocado.