Contra Todo

Capítulo 02 "El Nuevo Decreto Real"

Domingo, 28 de noviembre, 2021.

—Habla— dijo Max penas su primo puso un pie dentro de la biblioteca.

— ¿Por qué en la biblioteca?— preguntó. Max lo miró mal.

— ¿Es enserio?

—Ya, ya, lo siento, es solo que es algo complicado.

—Mira, Trev, de verdad pensé que no te volvería a ver, pero ahora resulta que estas aquí, y no solo eso, trajiste contigo a tu Alma que al parecer aún no sabe que es tu Alma porque no tiene ni idea de cuán importante es su apellido para nosotros.

—Escucha, ayer en la noche fue la despedida de soltero de Jason, el que fue su mate, resulta que la engañó con una chica cualquiera debido a todo el alcohol que llevaba encima.

— ¿Entonces?— lo interrumpió.

—Cállate y déjame terminar— bufó molesto— siempre haces lo mismo— suspiró y continuó— resulta que gracias al link Gabriela lo descubrió, no falta decir que todo se fue a la mierda.

—Sigo sin entender por qué están aquí.

— ¿Tú aguantarías un engaño de parte de Giuliana una noche antes de casarse? ¿Soportarías verlo todos los días?— el chico negó con la cabeza— ella tampoco, me pidió ayuda para que la sacara de ese lugar y la llevara a uno en el que Jason no la pudiera encontrar, porque hasta yo admito que él la buscaría hasta el fin de la tierra si pudiera y estoy seguro que lo hará.

—Claro, pero no puede dar ni un paso dentro del castillo— Trevor asintió— ¿Le dirás? Ahora que ya no tiene mate.

—No pienso decírselo.

— ¿Por qué?

—No quiero que se sienta obligada a estar conmigo solo porque es mi Alma, aparte no es un buen momento, acaba de terminar una relación de años y no terminó de muy buena manera.

—Sabes que te espera un interrogatorio cuando la vayas a ver ¿No es así?

—Lo tengo bien en mente.

— ¿Algo más que deba saber?

—Oh, sí, una cosa más, un pequeñísimo detalle— sonrió con inocencia, sin embargo su primo conocía muy bien lo que había detrás de aquella sonrisa.

— ¿Ahora qué?

—Está embarazada.

— ¿¡Qué!?

[…]

—Está será tu habitación—Gabriela entró.

—Es enorme— susurró.

Su cuarto es el doble de lo que tenía en USA. Las paredes son de un color café claro, tiene molduras de color oro, tiene dos ventanas que van desde el techo hasta el suelo que dan salida a un balcón. Hay una cama King gigante pegada a una de las paredes, con un cobertor color blanco que contrastaba con el respaldo oscuro. Las puertas del armario estaban al lado de la del baño. Finalmente el suelo es de un piso flotante gris, del mismo color que el techo.

—Lindo ¿No?— la loba miró a la vampiresa que estaba parada en la entrada con su hijo en brazos.

—Sí— respondió simplemente, su vista pasó a Dracul— es un niño muy hermoso— le sonrió.

—Sí ¿Cierto?— Giulina miró a su hijo con una sonrisa hermosa— es mi pequeño milagro.

— ¿Milagro?

—Se suponía que yo no podía tener hijos, soy vampira pero simplemente eso salió mal en mi ADN.

— ¿Y cómo apareció él?

—Como te digo, es mi pequeño milagro, nunca pensé que pasaría, pero heme aquí, con esta hermosa criaturita en mis brazos— le dio un beso en la cabeza. Instintivamente Gabriela tocó su vientre, ver a la vampira con su hijo tan cariñosamente la hizo querer ser madre en ese instante.

— ¿Cómo se siente ser madre?— le preguntó sin pensarlo demasiado.

—Tú ya lo descubrirás ¿No?— la miró.

— ¿Qué?— Giuliana la miró con una sonrisa traviesa— ¿Cómo lo supiste?

—Instinto, lo siento en el cuerpo, no eres tú sola— dejó a Dracul en el suelo, lo tomó de la mano y caminó lentamente con él hasta Gabriela, la cual se mantenía parada ahí, con la guardia arriba, pero algo hizo a su desconfianza flaquear. La manito libre del niño se posó en su vientre, él simplemente rio soltó a su madre y posó las dos manos en el cuerpo de Gabriela para sujetarse— es joven todavía, pero hasta él puede sentirlo.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.