Contrato de amor || Kim Taehyung

≋Capítulo 6

No Jik

Estoy seguro que no me equivoco pero de donde... donde he visto a ese chico. 

—Estoy en casa— gritaron desde la entrada. 

—Hermana, Si estás llegando a esta hora es que fuiste a mi escuela ¿Verdad?— dije mientras ella se quitaba los zapatos. 

—Si, nada importante en realidad ¿Alguna novedad?— preguntó. 

—No, bueno... Hoy me pasó algo raro— t/n me hizo una mueca— Sabes, me crucé con un tipo que se me hizo familiar pero no tengo idea de donde. 

—¿De verdad? Quizás lo viste en alguna de las ciudades que hemos estado antes. 

—Si, debe ser...— respondí poco convencido. 

 

T/n 

A la mañana siguiente No Jik salió más temprano porque tenía exámenes, yo apenas voy saliendo de casa. Con mucho sueño debo agregar. 

—Por fin te dignas a salir bacteria— aclaré mi vista y era ese chico, estaba parado mirando su reloj. 

—¡Ya te dije que no me llames así!— rodé los ojos y extendió su mano. 

¿Qué quiere que le de? ¿Mi bolso? 

—No es necesario que lleves mis cosas, yo puedo sola— dije pero él suspiró e hizo una mueca con los ojos señalando mi mano— ¿M-Mi mano? Oye eso..

—Tu celular tonta— me lo arrebató. 

—Dijiste que ya no me dirías así— crucé los brazos. 

—¿Entonces estás confesando que quieres que te llame bacteria?— sonrió maliciosamente. 

—¡Por supuesto que no! Ningu…

—Ese es mi número, tenemos que tenerlo por si algo pasa. Además que no quiero estar esperando por mucho tiempo aquí afuera. Avanza— señaló. 

 

Estoy en clase de biología cuando empieza a vibrar mi celular. <principe narcisista> lucía en la pantalla. Pero qué le pasa, cómo se le ocurre llamarme a esta hora.

—¡Qué quieres! ¡¿Acaso no estás en clase?!— susurré debajo de la mesa. 

Esto es lo bueno de sentarse en la parte de atrás. Nadie te ve. 

—Tengo sed, quiero un capuccino regular. Tienes 5 minutos— dijo.

—¿Estás loco? No puedo salir de la clase.

—Asegurate que no se le vaya la espuma, estoy en la terraza. El tiempo corre bacteria— colgó. 

—¡NO, ESPE..!— alcé mi cabeza y se chocó con la mesa— Aishhhh 

—¿Señorita Lee, se encuentra bien? ¿Qué hace en el suelo?— preguntó el maestro.

—A-Ah... NO, no estoy bien, necesito ir a la enfermería, con permiso— salí lo más rápido posible. 

¡Ese bastardo me va a volver loca!

 

Compre el capuccino y subí corriendo las escaleras. 

—¡Aquí está tonto! Tómalo— estiré mi brazo.

—Te dije 5 minutos, te pasaste 3 segundos— dijo cogiendo la bebida.

—Son 2800 won

—¿No puedes comprarle una bebida a tu novio? qué tacaña— sacó su cartera y me entregó 3000 won— El cambio ¿qué esperas?

—Tkss, ahora quien es el tacaño, incluso quieres 200 won— chisquee los labios— Por cierto, no soy tu esclava como para que me estés haciendo estos tipos de encargos— le entregue su cambio. 

—Tienes que complacer a tu novio ¿No sabías eso?

—¿No tienes clases en este momento?

—El maestro enfermó, así que tengo horas libres— dio un sorbo— Mañana también quiero mi bebida, nos vemos.

—¡¿Qué?!— me dejó con la palabra en la boca y desapareció— Pequeño tramposo ¡detente!

 

Taehyung

Regreso a mi aula y me siento a tomar mi bebida mientras miro a través de la ventana. 

 —Oye, cómo puedes tratar a tu novia como esclava— dijo alguien sentándose a mi lado. 

—¿Cómo sabes eso?— la miré. 

Me parece que la he visto un par de veces. 

—Me acaba de mandar un mensaje de texto ¿Hasta cuando fingirán ser novios?— sonrió. 

Ya la recuerdo, esta es la chica a quien bacteria ayudó de esos vándalos. 

—¿Ella te contó eso, también?

—asintió— Esta mañana me lo dijo ¿Por qué? 

—No te involucres en temas ajenos— agarré mi bebida y la tiré a la basura. 

 

Busqué por los pasillos y la encontré justo antes de que ingresara a su aula. 

—Necesito hablar contigo— la llevé hasta el campo de afuera. 

—¿Qué sucede? No me digas que quieres otr…

—¿Le contaste a tu amiga sobre nuestro trato?

—¿Te refieres a Hye Sook? Bueno si— sonrió tímidamente.

—Me pediste que prometiera que no se lo diría a nadie pero fuiste tú quien lo reveló primero.   

—Es que... ella estaba al tanto de todo incluso antes de ese trato, digamos que es la persona que más confío en estos momentos, mi mejor amiga. 

—¿Eres del tipo de personas que cambia de palabra así también?— pregunté con énfasis y ella bajó la mirada— Odio a esos...— pausa— Que no cumplen con sus promesas— mis ojos brillaban. Losé. 

— También odio a esos...— rompió el hielo— Que desahogan su enojo con los demás. Yo no tengo la culpa de que alguien te haya engañado antes— chocó mi hombro y se fue molesta. 

—suspiro de frustración— 

 

T/n

Que se cree ese tonto, no se que tantas mentiras le han dicho en su pasado como para que quiera hacer miserable la vida de otros. Ahhhh, que molestia. 

 

Dos clases más tuve que soportar antes del receso. Estoy mueeeerta. No es exageración. 

—Iré un momento a la sala de profesores, adelantate ¿Bien?— dijo Hye Sook. 

Recogí mi comida y me senté en una mesa solitaria, luego la silla del costado se movió y alguien se sentó en ella.

—Hye Sook, volviste pront...— me detuve al ver que no era ella— ¿Qué haces aquí?

—Aún seguimos siendo novios ante toda la escuela ¿No?— dio un bocado a su comida.

—Cierto— ambos estuvimos en silencio un buen tiempo sin cruzar miradas.

—Lo siento— se detuvo y colocó sus codos sobre la mesa— por hablar duramente contigo… ya sabes, lo que dije hace un rato. Lamento eso. 

—Yo también lo siento— baje la cabeza y giré a verlo— Lo que dijiste de mi no se aleja de la realidad.  Me odio a mi misma por mi pasado también. No debí decirle a Hye Sook sin consultarte antes. Pero hay cosas que simplemente no puedo controlar, soy muy habladora. Posiblemente gente como tu que se considera genial incluso si rompen las reglas no entenderían una vida como la mía. 




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