T/n
—¡T/n, corre!
—¡Eso es lo que hago!
—¡Vamos a llegar tarde por tu culpa!
—¿Mi culpa?
Mi respiración es caótica, en momentos como este extraño a Jungkook.
Hye Sook gira y me tira una mirada asesina.—Si, esta bien, mi culpa—alzo las manos en tono de paz.
—Recuérdame porqué soy la que te va a recoger
—Porque me amas mucho.
—O porque de lo contrario vendrías a la escuela hecha un desastre.
Abro la boca para hablar pero la cierro—Buen puento.
Nos detenemos al ingresar a la preparatoria y empezamos a caminar ya que no se puede correr dentro de la escuela.
—Necesito agua—digo con la respiración agitada—No puedo dar un paso más—me sostengo de mis rodillas.
—Y yo necesito pasar por la biblioteca—se apresura—Nos vemos.—escucho sus carcajadas a lo lejos.
Con la mirada en el suelo veo que unos tacones se detienen delante de mí—¿T/n?
Elevo la mirada—Señora Kim—me incorporo de inmediato.
—Veo que ha sido un día agitado ¿no?— dice con una sonrisa mientras me observa.
Me jalo la falda hacia abajo y acomodo mi blusa con las manos—Lo siento.
—No, no, está bien, yo también fuí joven. Se lo que es llegar tarde a la escuela.
—¿Qué está haciendo por aquí?—pregunto curiosa.
—Quería saber como estaba Taehyung
—¿Sigue sin dirigirle la palabra?
Asiente con la cabeza—Es entendible su reacción—me da una sonrisa triste.
—No se preocupe tanto, él la perdonará.
—Si, eso espero—me mira.
Luego de que Taehyugn se enterara todo lo de su madre supongo que se siente herido. Lo entiendo. Solo es cuestión de darle un tiempo para que pueda volver a confiar.
Taehyung.
La escuela termina tan rápido como empieza. Falta solo un mes para la graduación y yo no tengo el valor de enfrentar a mis padres para decirle lo que realmente quiero estudiar. Que frustración.
Llego a la cafetería y veo a T/n sentada en la mesa con Hye Sook. Al parecer llevan una conversación muy interesante porque no dejan de reír.
—¿De qué hablan?—me siento a un lado de la mesa.
—Pues T/n ríe para no llorar—dice Hye sook
No entiendo.
—¡Hey! ¿Puedo acompañarlos?—dice la delegada con un vaso de café en la mano.
—Siéntate, dele...—frunce el ceño—Quiero decir, Hana—digo con énfasis.
—Mucho mejor—sonríe
—¿Bueno de qué hablaban?—pregunta
—De lo fatal que es su vida—Hye Sook señala a T/n
T/n rueda los ojos—Disfrútalo.
—Tiene que asistir a la escuela de verano.
—¿Qué? ¿Es enserio?—pregunto
—¿T-Tú también?—Hana suspira nostalgica.
—¿Acaso tu…
—Sí, también tengo que ir
Ambas parecen cabizbaja.
—Que casualidad—aparece un chico que nunca he visto—Yo también lo voy a tomar—sonríe mientras ve a T/n.
Esto no me gusta nada.
—Oh, eres tú...—T/n parece reconocerlo.
—¿Se conocen?—pregunto
—Esta mañana nos chocamos—confiesa el chico.
—¿Eres tú el chico a quién le rompió su celular?—pregunta Hye Sook.
—Así es—le da una sonrisa de boca cerrada—Nos estaremos viendo, T/n
—Ah, sí—ella es tan amable que sonríe.
Mal momento para ser inteligente.
Hye Sook se levanta y se acerca—Supongo que Taehyung y yo los veremos en su tortura—me toma del hombro.
—Pero mis días no serán para nada una tortura—dice el extraño.
A todo esto ¿Por qué no se va?
—¿Uhm? ¿Por qué?—dice Hana
—Por qué veré la veré a ella—señala a T/n
No estará pensando en…
Sus ojos casi saltan de su cara—¿A-A mí? ¿P-Por qué?
—Por que me gustas—dice sonriendo de oreja a oreja.
Acabo de librarme de Jungkook y ¿ahora aparece él?
—¿QUÉ?—gritan todas las chicas.
Hye Sook interviene—Lo siento amigo, ya te ganaron—coloca su brazo alrededor de su cuello y me señala—Y por tu bienestar, te aconsejo que no insistas. Ese hombre está loco—la fulmino con la mirada—¿Qué? Es verdad.
Técnicamente es cierto, pero tampoco voy a aceptarlo.
—Les recuerdo que sigo aquí, y no soy ningún trofeo como para que “me ganen” —dice T/n—
Y por otro lado, no estoy con nadie.
—Se qué es pronto, pero te enamorarás de mí, ya verás—le guiña el ojo.
—Mira… yo…
El chico la ignora—Tengo todas las vacaciones para verte—sonríe y se marcha.
—Ese fué el chico más random que he visto en mi vida—dice Hye sook para alivianar el ambiente.
—Mi vida no puede ser peor—T/n bufa.
—Tengo que irme—me levanto de mi asiento y me retiro hacia afuera.
—No, espera...—t/n camina detrás de mí—nos vemos, luego—les dice a las chicas.
—¿Qué pasa?—digo mientras caminamos.
—¿Cómo estás?—dice mientras juega con sus manos.
—Si quieres decir algo, solo hazlo.
—Tuuu….—alarga la palabra—¿Hasta cuándo no le hablarás a tu madre?
—Era eso—suspiro—No lo sé.
—¿No puedes perdonarla?
—No.
—Pero si yo pude, tú también puedes hacerlo.
—Puedo hacerlo, pero no tengo el valor ¿Sabes?
—Yo te ayudo—sonríe arrugando la nariz—Dame tu teléfono.
—¿Para qué?—frunzo el ceño
—Tu solo damelo, confía en mí—estira su mano.
Me rindo hacia ella y se lo entrego—¿Feliz?
—Por supuesto—da pequeños saltos.
Luego de unos minutos me entrega el teléfono.
—¿Y qué hiciste?—me detengo al frente de su casa.
T/n voltea y me toma de las manos—Tienes una cita, hoy a las 7 de la noche. Con tu madre.
—¿Qué?—ladeo la cabeza
—Tienes que ir, si quieres que todo termine, solo habla con ella.
—Pero ¿qué tal si no le agrada mi decisión?
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Editado: 30.12.2021