CAPITULO 2

🖤CAPITULO 2🖤

Salgo del baño y voy a la cocina, me encuentro con el Italiano Menor, mi amiga ya se pasó de la raya, primero era para hablar sobre todo en la oficina y ahora ya pasa hasta la cocina.

─Hola Amber ─ me saluda sonriente.

El chico hace dos semanas se desligó del tema del evento porque ahora ya no está trabajando con su hermano, abrieron una sucursal de automotora y el se hace cargo de lo que le gusta y no de la moda.

─Oye, el italiano sexy se arrepintió del lugar.

─¿Ken me estás jodiendo? Pero si el evento es en 3 días.

─Vio que vamos atrasadas con la entrada y no confía en si estará lista para el sábado ─ dice Ken mientras le quita la taza de café a Mariano.

─¿Y piensa que buscando algo nuevo va a ser más rápido? Tendría que comenzar todo nuevamente.

─No lo sé, en 20 minutos estará allá.

─Nos vemos, Mariano ─ grito antes de tomar mi cartera y salir.

En el auto no llego, opto por la moto que me pasaron, era de mi hermano menor, pero por castigo por haber dejado embarazada a una chica que no recuerda, mis papás se la quitaron y me la pasaron a mi. Me pongo el casco y salgo de la casa, conduzco por entre las calles y autos cortando camino por varias partes.

Tengo que solucionar esto porque me juego dos contratos con empresas importantes e incluso que mi reputación siga manteniéndose intacta. Llegó con 5 minutos de sobra, como la entrada oficial no está lista paso por lo que está siendo modelado para ser la cocina.

Todavía hay personas trabajando en la entrada e incluso ya se están limpiando las ventanas los pisos, se están acomodando las mesas en el orden que pedí, se están instalando las luces que pedí, están llegando los vinos que era lo que mas me preocupaba y las cortinas con los otros adornos están siendo añadidos.

─Hola ─ saluda entrando con la morena.

─Hola ¿Cuál es el problema?

─Hablé con Samantha Fernández antes de venir y me dijo que todo esto es muy importante para ti y tu amiga, también para ellas. Pero para mi también es importante y no sé si quiero tener que esperar mucho por una entrada que no se si va a estar lista.

─Mira, en este punto el progreso está todo hecho, la entrada me prometieron terminarla mañana. Sí es que empezamos de cero te aseguro que serán muchos más gastos y más tiempo.

─Sí, ya veo que hay mucho en juego y ya está todo hecho ─ dice recorriendo el lugar.

─Claro, me preocupé de todo personalmente. Tengo a los mejores equipos en esto y me he esforzado en que todo salga perfecto.

─Tienes tu oportunidad en juego, quiero esa entrada lista para el sábado porque no quiero hacer pasar a todos por la cocina.

─Tranquilo, todo estará bien.

─Bueno.

Se va y termino de ver todos los detalles, de hecho la entrada va muy bien, si no hubiese sido porque cambió el diseño de la entrada unas diez veces como mínimo ya estaría lista, pero como tiene dinero le gusta derrocharlo.

─¿Seguros de tenerla para mañana?

─Ya estamos terminando esto, por la mañana estará listo y sólo faltará implementar las cosas más fáciles.

─Que alivio, gracias chicos.

─De nada Amber.

Salgo y subo a la moto, maldigo internamente al recibir una llamada de mamá, se que Katia está por tener a Mavis, pero ¡Dios! que no tengo noticias de ella.

─Mamá

─¿No hay noticias?

─Mamá, si Theo me llama te lo diré. Pero ahora tengo mucho trabajo, tu me interrumpes cada cinco minutos y eso no lo hace más fácil.

─Ok, perdón.

Corto la llamada y ahora si trato de encender la moto. Me pongo el casco y la voz del Italiano hace que me voltee a verlo, está tan sexy pasando la mano por su cabello, se ve joven con esos pantalones de vestir verde militar y la camiseta blanca.

─¿Tienes otro medio de transporte? ─ señala la moto un tanto confundido.

─Sí ─ respondo ─ es que tenía que llegar rápido y con el auto no llegaría nunca por el tráfico ─ me excuso.

─A bueno, porque tú y Olsen están invitadas también. Recuerda que es con antifaz.

─No es necesario que lo digas, yo he estado trabajando en todo esto.

Se va y ahora si enciendo la moto antes de irme, no entiendo porque su secretaria lo sigue a todas partes como si fuera un maldito perro faldero. No es en mala, pero es que es muy raro y demasiado excéntrico para mi gusto.

Me voy a la casa y Mariano ya no está, el chico se la pasa viniendo como si nada, pero bueno, según es amigo de Kendall aunque ella le hace de psicóloga mientras se muere de ganas por tener algo con él, me recuerdan a Harley Quuin y el Joker.

─¿Ha buscar vestido?

Asiento con la cabeza, tenemos que buscar un vestido para poder ir al evento bien presentadas, descubrimos que yendo a los eventos podemos buscar más clientes y eso es bastante favorable.

Salimos y vamos en el Renault Clío, así tenemos mas espacio, ya que en el mío que es un BMW Z4 no tenemos espacio para los vestidos. Conduzco mientras Kendall me va diciendo todo sobre las múltiples relaciones que ha tenido Mariano con muchas mujeres pero que ninguna es seria.

─Mejor le diré que no podemos ser amigos.

─Es lo más sensato que he escuchado salir de tus labios ─ digo casi burlándome.

─Pero es que me gusta demasiado y se que él no siente lo mismo por mi porque quiere algo casual, yo ya me cansé de lo casual.

─Entonces dile eso ─ golpeo el volante porque no alcancé a cruzar cuando el semáforo cambió a rojo.

─Sí, es que es muy inmaduro y sólo piensa en él ─ hace una pausa y se que duda entre decirlo o no, pero la incito a decirlo dándole un codazo en las costillas ─ y en el sexo.

─Bueno, tienes el sábado para decirle. Y ten en cuenta que todos piensan en sexo.

Aparco el auto y nos encontramos con Emilia que ya está esperándonos, ella nos va a ayudar a elegir vestido, la chica sabe todo lo que va y lo que no, además Sam nos va a conseguir los mejores antifaces. Apenas salimos del auto y la castaña se toma muy enserio el tiempo y su trabajo como diseñadora y estilista, obvio ya que es una de las mejores. Con su celular en mano y la cartera en la otra comienza a caminar delante de nosotras.