CAPITULO 15

Bajo las escaleras con cuidado, ya no me duele el pie, pero aun así tengo que aplicar hielo de vez en cuando, tengo que tomar medicamentos y no usar tacones por 2 semanas, por tanto, mis zapatillas volvieron a salir a la luz del closet. Cuando fuimos al hospital me dijeron que tenía un esguince grado 2 y que no era mucho, pero había que cuidarse si no se quería que pasara a crónico.

En 2 horas Alessandro llega al aeropuerto, tengo que desayunar e ir a su encuentro. Es viernes y los planes se retrasaron porque lo necesitaba por mis padres y la supuesta invitación.

─Toma – Kendall me pasa el desayuno y comemos tranquila mientras ella sigue mirando la televisión.

Seguimos apareciendo en la prensa rosa pero ahora no me molesta, de hecho, me causa gracia todas las suposiciones que hacen, algunas son muy ridículas, pero hay otras que aciertan, aunque son muy pocas.

Termino de desayunar y le escribo a Jack, Alessandro ya aprobó que podíamos juntarnos en su departamento, incluso dijo que podría preparar la cena, cosa que me sorprendió, pero de buena manera y lo encontré muy tierno.

─Me voy – le digo a Kendall mirando la hora.

─Bueno, ten cuidado con tu pie.

─Sí.

Dejo un beso en su mejilla, tomo la cartera azul que combina con el vestido y mis zapatillas. Hoy mi outfit consiste en un vestido ceñido al cuerpo de color gris con un cinturón azul, lo combiné con mis zapatillas converse azul y la cartera azul. Me maquillé con delineador azul, un poco de rímel y listo. Además, mi peinado fue una cola de caballo alta. De hecho, me veo demasiado joven así, como si tuviera 17 años, volví a mi juventud.

Tomo las llaves del Range Rover, las llaves de la casa, mi celular y salgo cerrando la puerta tras de mi. Veo que las chicas llevan, hoy Vicky se tendrá que ocupar del espacio ella sola porque yo tengo que estar con Alessandro e iré con mis tíos a presentarles uno de los mejores espacios donde pueden comprar para hacer uno de sus eventos corporativos para inmigrantes, lo mismo que hacían en Venezuela. En realidad, es sólo para sacarlos de la casa y así Vicky pueda trabajar tranquila con Bruce y todo el equipo, para la noche su esposa e hijas se ocuparán de la distracción y así Alessandro y yo solo nos ocupamos de mi familia.

─Me vas a dejar sola, muero de miedo – dice Vicky.

─Bruce no muerde – digo sonriendo.

─No me refería a eso – suelta una risotada.

Pasa que estos días cuando vamos a ver los avances y a trabajar, Bruce no se separa de la chica y yo conozco a mi ex, entonces la molesto con que él está demasiado interesada en ella, pero no me quiere creer.

─Me voy con mi esposo, adiós – les grito.

─Debería haber algo que prohíba que se salga con el novio o esposo durante el horario de trabajo – dice Karol para molestarme.

─Que complica eso, así Vicky no podría ir a trabajar a la casa de mis tíos porque allá está su novio – Karol se ríe, pero no dice nada más. Vicky niega con la cabeza.

Cierro la puerta, enciendo el auto y conduzco al aeropuerto, el problema es que hay mucho tráfico y faltan unos 15 minutos para que llegue el avión. Llego con 10 minutos de sobra, me basta con eso. Corro al interior del aeropuerto, aunque el doctor me dijo que evite correr o trotar, pero me da lo mismo.

Compro unos globos de corazones, una pizarra y un plumón, escribo "Mi esposo, el amor de mi vida". Camino a la sala por donde va a aparecer, faltan 5 minutos para que llegue. Espero paciente o eso creo porque estoy demasiado nerviosa porque dijo que grabaría un vídeo para que sus fans vean mi reacción.

Avisan que ya llegó el avión, salen muchos y lo veo a él, viene con su celular en la mano y sonríe cuando me ve, corro a sus brazos y me cuelgo como Koala de él. Se ríe mientras dejo un beso en sus labios, las personas en el lugar sonríen y aplauden por nuestro espectáculo.

─Te amo – susurra, le sonrío y lo abrazo mucho más fuerte.

Pasa su mano por debajo de mi trasero y me sostiene para que no me caiga, toma los globos y camina hasta otro punto en donde no estemos estorbando. Busca su celular y publica el vídeo que apenas se ve por como salté sobre él. Dejo un beso en sus labios a modo de saludo, la verdad es que no me bastó con el anterior.

─¿De verdad? – pregunta señalando mi pie.

─Pero si te dije, además te envié una foto de cuando estaba en la consulta del Doctor y otra de lo que dijo el Doctor. ¿No me habías creído?

─No – suelta riendo divertido.

─Maldito.

Se ríe y me abraza divertido por la situación, dejo mis manos en su abdomen y me tengo que inclinar mucho para poder besarlo, sonríe en medio del beso y me agrada. Tiene los globos y se ve muy divertido.

─Vamos a buscar mi maleta.

Caminamos tomados de la mano, busco mi celular y tomó una foto a nuestras manos entrelazadas, es difícil escribir sólo con una mano, pero lo logro de manera fenomenal. Esperamos a que aparezca su maleta, guardamos la pizarra en su maleta y se lleva los globos mientras que yo cargo su mochila.

Caminamos hasta el auto y le paso las llaves porque no pienso conducir y que el movimiento de la inclinación del pie sobre el pedal me causa dolor porque eso no me sirve en mi recuperación, de hecho, creo que he seguido 3 indicaciones de las 6 o 7 que el Doctor me dio.

Me ayuda a subir y guarda los globos junto con la maleta, sonrío al revisar los comentarios de la publicación de ayer. Es increíble como todos nos han creído una mentira tan grande como esta. Sube y enciende el auto.

Se cruza el cinturón de seguridad y me mira alzando una ceja, entiendo su seña, pero no me muevo para hacer lo mismo que él, niega con la cabeza pero al final no me dice nada y conduce. Busco mi celular para grabar un vídeo para las historias de Instagram.

─Amor ─ le llamo y me mira por un segundo – ¿Me extrañaste?