____________________Alis____________________
Mientras que Alis se encontraba con Dan dónde habían quedado en verse, en ese puente no era muy lejano del castillo y estaban las luciérnagas verdes, allí mismo estaba Dan, sentado en una roca grande lo suficiente para sentarse en ella, se acercó Alis, decidió descender luego caminó lentamente a él, era tal vez el ambiente la luna reflejada en el agua y la fresca brisa las luciérnagas pequeñas que emitía sus luces, pero se sentía extraña su corazón que quería ser escuchado y la memoria recordando la frase de que él le iba decir algo importante.
— Una bonita noche ¿Cierto?
Dijo con una voz suave y dulce, luego lo miró a esos ojos cautivadores, que está vez parecían mirarla distinta.
— Sí, pero no más bella que tú, princesa.
Respondió con una sonrisa y una mirada que recorrió por segundo todo su atuendo quedándose fijos en los suyos.
— jejeje, entonces no aprecias mucho el entorno.
Bromeó con un sutil coqueteo pero sus orejas puntagudas y finas estaban rojas, talvez no lo dijo pero sus palabras le llegaron.
— Claro que sí, lo hago, pero... Tú eres más maravillosa
— Entonces no has visto lo suficiente..
Dijo con una sonrisa como si lo quisiera retar, y luego empezó a tomar piedras blancas que cambiaban como si brillara a un reflejo.
— ¿Qué haces?
Dan se acercó a ella y la miró confundido porque estaba levantando piedras del suelo.
— ahora mismo lo vas a ver, estás piedras cerca del agua son piedras lunares.
Después de agarrar unas cuantas más la empezó a arrojar una de la forma que rebotaba sobre la superficie del agua alumbrando cada rebote con una luz que se expandía y luego se desaparecía, Dan quedó impresionado.
— Waou.. espectacular, en mi mundo solo rebotan.
— Intenta arrojar uno y verás más cosas.
Le entregó algunas, no dudó en arrojarlas y cuando con hizo, algunas alumbraban distinto color o se mostraba un destello por encima de cada rebote, ambos arrojaron a la misma vez mientras estaban disfrutando el momento.
— Estás piedra se parecen al corazón de un hada porque parecen simples pero cuando se demuestra lo contrario quedas fascinados.
Estás palabras hicieron que tuviera una idea decidío esconder una en su bolsillo, cuando terminaron de arrojarlas Dan se acercó más a ella y le recogió un mechón de cabellos.
— Alis.. digo su alteza.. yo...
— Tu llámame como quieras, perdón continúa..
— Alis, tu me gustas.. o lo que significa querer demasiado y diferente a una persona.
— ¿Qué?
Alis escuchó sus palabras, una confesión que le llegó al corazón, se preguntó si era real este momento en la mente, también su corazón respondió era un sentimiento mutuo.
Dan tomó sus manos entre las suyas y la miró fijo.
— Alis, no te amé desde el primer momento si no en el transcurso me demostraste lo maravillosa que eras y te amé, te amo Alis... ¿Dime Alis tu sientes lo mismo?
— Dan, me sorprende tu confesión, pero debo decir que yo también tengo sentimientos por tí..
Al escuchar estás palabras tan sinceras no pudo alegrarse más en su interior pero también una confusión de hacer lo que pensaba, ¿acaso era enserio lo que decía? Solo sonrió y decidió seguir fingiendo pero ¿Realmente lo fingía?
— Pero.. Dan, yo no puedo corresponderte.
Dijo con un pesar al pensar en un conflicto político cultural y social que se haría si iniciaría con una relación así sobre todo su madre, que aunque sea por las historias, odiaba a los humanos.
— ¿Que? ¿Por qué dices eso?.. - dijo aturdido y triste por esa respuestas
Luego sintió como agachó su cabeza pero Dan la levanto del mentón con suavidad, después la mano de él apretando la de Alis las llevó a su pecho
— Princesa, yo enserio estoy enamorado de ti, solo siente como late este corazón por tí.
— Es por mi madre y por lo complicado que va ser si nos volvemos pareja.
— No hay nada que no podría enfrentar por tí
Dan estaba dispuesto a convencerla, manipulando emocionalmente, pero a la vez se le revolvía su estómago.
— ¿Lo dices en serio? Pero aún así no es fácil
— Si, no importa si eres un hada o princesa yo te quiero a tí ¿Solo di si me quieres?
Dan le envolvió en sus brazos con ternura y suavidad mirándola fijamente, realmente estaba actuando muy bien que en serio estaba emocionado y tenía esa emoción pero no quería aceptarlo no en este momento.
— Si te quiero, pero tú eres un humano, mi madre, mi Reyno... La Reyna no lo permitirá..
Nació una angustia en su corazón de Alis al pensar que era un amor complicado
— El amor lo puede todo..
Recorrió un mechón de cabello y luego levantó su mentón y por un segundo dudó en besarla pero decidió hacerlo, un tierno beso en sus labios pequeños y rosados, un beso que lo sintió diferente a otros entre un sabor único dulce, pensó que lo iba desagradar pero lo estaba disfrutando, inconscientemente la atrajo más hacía él, iba seguir besándola porque lo sentía adictivo pero Alis lo detuvo empujandolo un poco.
— ¿Qué fue eso? ¿Por qué hiciste eso?
Alis se tapo la boca con su mano, traía la mejilla roja.
— es mi manera de demostrarte mi amor. ¿No te gustó?
— No, no es eso, solo que fue raro y nadie hace eso..
Sus labios de Dan se curvaron en una sonrisa leve, y tomó su manos y causando una sensación eléctrica.
— te amo Alis y quiero estar contigo.
— yo también pero.. mi madre..
— shh.. no digas eso..
Dan la acercó más le dió un suave beso y en un susurro de palabras agregó
— Yo tengo una idea de como podría hacer que a acepte tu madre..
— ¿Cómo? No habrá nada que la cambie de opinión.
— Si la hay, recuerdas que el corazón diamante te puede conceder deseos.. tu misma lo dijiste.