Corazón en Reparación

Capitulo 2

Capítulo 2

Gillian

Estoy por abrí la puerta de mi departamento cuando mi teléfono empezó a sonar, eso es raro ya que nadie me marca tan tarde por la noche ya van a ser las 11:00 p.m. me preocupé cuando en la pantalla vi que era Beth, ya que nunca me marca tan tarde, porque ella se duerme pronto para ir a su trabajo temprano por la mañana.

—Hola Beth, ¿Todo bien? — Digo al contestar. Solo espero que no sea algo malo
—¡Hola amiga!, ¿Qué crees que paso?— La preocupación se me pasó en cuanto escuché su voz alegre, así que giro la llave y entro al departamento.
—No lo sé, ¿Te sacaste la lotería?— dio dejando mis cosas en el perchero de la pared.
—No, pero probablemente tu si, y gracias a mi claro. —
— ¿Cómo? No te estoy entendiendo bien. ¿Qué quieres decir? — Tal vez no tenga un problema, pero está diciendo muchas cosas sin sentido, aunque no se escucha ebria. —Podrías decirme que está pasando. — le digo mientras voy al refrigerador por las sobras de comida del día de ayer.
—Oh claro chica, lo que pasa es que tú súper amiga, que soy yo, te ha conseguido una entrevista para un muy buen empleo. — chillo del otro lado de la línea.
— ¿Qué? Yo ya tengo un empleo Beth, te lo recuerdo. — ahora el hecho de que esté ebria es más una posibilidad o incluso drogada.
—Sí, ya lo sé, pero este empleo es maravilloso, deja te explico. — Cuando dice eso es mejor no interrumpirla, así que dejó que hable tranquilamente —Veras hoy en el trabajo tuve un rato de descanso y está hojeando un periódico y de repente ¡Veo un anuncio! —
Realmente se escucha muy emocionada y eso hace que me pregunte que fue lo que vio que la dejo tan emocionada.
—Bien, todo eso está bien, ahora cálmate y dime qué fue eso que vistes en el anuncio, realmente estoy cansada y necesito dormir. — No sé si noto el bostezo en mi voz pero creo que no.
—El anuncio era para buscar una cosiera para nada más que Maxim Carter. — Hizo una pausa como esperando a que reaccionara ante el nombre de este tipo. — ¿Qué?, no vas a decir nada. — me dice como si esperara que explotara de felicidad.
—Realmente no sé qué decir, tengo un empleo con Tim, y no soy una gran cocinera. — digo comiendo un poco de arroz frio.
—Bromeas, cocinas de maravilla y aparte Maxim Carter, es un hombre muy importante en el mundo de la construcción aquí en Boston, es millonario, por lo que el sueldo sería inmensamente mejor que con Tim, no tengo nada en contra de él, pero si consigues este trabajo podrás salir del hoyo económico en el que estás.
—Si es un hombre con mucho dinero, ¿Por qué buscaría cocinera con anuncios en el periódico? ¿No suena como a una estafa? — Tengo que hacer que se le salga la idea de este trabajo maravilla con argumentos razonables. —Además el hecho de que a ti te guste como cocino, no quiere decir que sea la empleada indicada para ese tipo, ni siquiera cocino en el Coffee Delights, así que mejor olvídalo. — digo tajantemente.
Una pausa del otro lado del teléfono me dijo que algo anda mal, Beth es muy impulsiva, así que espero a que diga algo, pero ciento que algo está mal antes de que me diga que pasa.
—Bueno, no sé por qué el anuncio del periódico, pero…— Otra pausa, ¿Qué habrá hecho? —Es que las entrevistas son mañana y para poder ir tienes que hablar primero y agendar tu entrevista.
Sonreí, ya que a esta hora no creo que acepten más citas, ya que es muy tarde.
—Lo ves, ese trabajo no era para mí, ya no podré hacer una cita. — le digo pensando en que yo gane.
—Te equivocas, yo llamé por ti y te hice una cita. — por un segundo tardo en entender que me dijo, hasta que lo comprendí.
— ¿Qué?, dios Beth te quiero mucho, pero haces cosas que realmente no me ayudan, mañana tengo que ir a trabajar y no puedo faltar, tu misma lo dijiste tengo grandes problemas de dinero y no puedo darme el lujo de no ir por algo donde no hay posibilidad de que obtenga el trabajo.
—Son 300. — dice muy seria.
— ¿Qué? De que hablas.
—Según mis cálculos son 300 dólares por día, es mucho más de lo que ganas con Tim y sin esforzarte tanto ya que solo trabajarías para una persona. — No la podía ver, pero sabía que estaba haciendo un puchero —La entrevista es la las 8:00 de la mañana, entras a trabajar a las 9:00, será rápido solo faltarías una hora como mucho, que dices, ¿si vas a ir?
—No sé, Tim es muy bueno y no me gusta pedir más de lo que ya le pido, además no me has dicho dónde es la dichosa entrevista.
—Es en North End. —
—¿Qué? Eso está como a una hora de aquí, tendría que pedirle medio día a Tim— esto se está volviendo muy problemático —. Sabes no lo voy a hacer, es más ni lo voy a considerar, mejor ya me voy a dormir.
—No te preocupes ya lo tengo todo solucionado, paso por ti a las 7:00 de la mañana, nos vamos rumbo a mi trabajo, me dejas y después te llevas mi auto rumbo a tu futuro empleo, tu solo encárgate de hablar con Tim.
Lo hacía sonar tan fácil, pero yo sé que las cosas no son nada así de simples, aunque en una cosa tiene razón, mi sueldo con Tim no es tan bueno para mantener todos mis gastos y eso que son limitados a lo básico.

Diablos no pierdo nada, no creo que Tim se enoje, nunca he faltado a el trabajo, ni siquiera estando enferma.

—Está bien, pero será la última vez que haces algo como esto, Beth. De no decirme nada y que tú cabecita desquiciada haga todo, ¿Estamos de acuerdo?
—¡SI! — Estaba mucho más emocionada que yo —. Te prometo que es la mejor decisión de tu vida, cuando tengas el trabajo no quiero que me agradezcas. Bueno ahora te dejo dormir, porque mañana hay que despertarnos muy temprano.
—Esta bien, hasta mañana. — digo antes de colgar.
Quería a Beth mucho, pero en ocasiones como está, no la haces cambiar de idea, pero ¿y si logro conseguir ese empleo?, dios ni siquiera se cocinar una variedad de platillos que un hombre rico este acostumbrado a comer.




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