Ava
En cuanto mi padre y Michelle salieron también hice lo mismo. No estaría sola con mi auto estacionado en cualquier lugar así que acordé ir a pasar a buscar a Axel. El decoradoestaba estupendo pero el ambiente estaba un poco pesado, mi hermanastra tendría que medirse <<nada de alcohol>> dijo mi padre. Y para la juventud que solo piensa en alcohol eso no sonaba nada bien. Los chicos del teatro y algunos hacían chistes para divertirse. Fui a saludarlos, pero en realidad a quien buscaba era a Fred y en ese entonces apareció Gina con un vestido rojo brillante de gala. Traía en su mano una copa, mandó apagar la música para que todos la atendieran.
— Su atención por favor.
Cuando todos la miraban comenzó a hablar, yo no le hacía el menor caso hasta que dijo que Fred era su invitado especial y que ambos harían el casting para ser los protagonistas de la obra que resultara ganadora.
— Vaya, vaya. No me lo puedo creer, así es que por eso me preguntaba si venía o no.
La música volvió a sonar y Gina llevaba a Fred a todas partes. Parecía más bien su mascota. Al parecer los llamé con el pensamiento y vinieron hacia mi.
— Lo que faltaba.
— ¿Qué has dicho Ava? —preguntó.
— Felicitaciones.
— ¿Por qué por la fiesta o por lo mío con Fred?
Estaba algo sorprendida pero no dejé que se notara.
— Bueno por las dos cosas. Nuevamente felicitaciones.
Fred iba a darme explicaciones pero Gina se lo llevó. Me sentí un poco celosa por qué tenía que ser con ella.
Axel me estaba llamando pero estaba tan distraída en mis pensamientos que no lo escuchaba, así que tuvo que ir hasta donde yo estaba y me di cuenta cuando tocó mi brazo.
— Ava llevo rato llamándote.
— Lo siento Axel es que la fiesta no está muy buena y me estoy aburriendo.
—¡Qué casualidad! Venía traerte la solución.
— Siiii.
—Resulta ser que uno de mis amigos DJ está a cargo de la música en una discoteca cercana. ¿Quieres venir?
— No lo sé.
Pero cuando miré a Gina estaba bailando con Fred, parecían felices y no me quería quedar a ver el espectáculo.
— Vamos por favor. Pensaré que no te gustan las fiestas.
— ¡Qué esperamos!
— ¿Como que no vas? Espera dijiste que sí ibas.
— Exacto.
— Sí, lo sabía.
Salimos de mi casa y conduje hasta la disco.
— Llegamos.
Me quedé mirando el lugar desde fuera y Axel me interrumpió.
— Vamos entremos, la fiesta está dentro.
— Jaajaa.
Me tomó del brazo y entramos.
— Esto sí es una fiesta.
— No te saqué de la fiesta por gusto Ava.
Habían muchas personas bailando y divirtiéndose, Axel tomó mi mano para poder atravesar la multitud .
— Acompáñame, tengo que saludar a Nathan.
— ¿Nathan?
— Si mi amigo el DJ.
— Aaa.
Cuando íbamos llegando el DJ le hizo una seña a Axel saludándolo, luego subimos hacia donde el estaba.
— Hola Nathan
— Hola Axel.
Ambos se dieron las manos y chocaron hombros.
— Está bueno el ambiente —le dijo al chico.
— Sí. No sabía que traerías a tu novia.
—Es mi amiga —aclaró Axel—. Oh, estaba algo distraído, los presento. Ava él es Nathan, Nath ella es Ava.
— Mucho gusto Nathan.
— El gusto es mío. Pero llámame Nath.
— Bueno los dejo, voy a dar una vuelta —dijo dejándome allí.
— Y tú... eres amiga de Axel.
— Sí, bueno en realidad lo conocí por mi prima .
— ¿Cómo es eso? Pensé que se conocían de la prepa.
—Tienes razón, pero es que Axel me recordó por una foto que mi prima subió.
— Que bien —me dijo con una sonrisa.
—Lindos audífonos —le dije—, son los terceros que veo...
—Jaja. No me digas que tú eres...
—Jaja. No lo puedo creer el chico de la librería.
—Quien lo diría.
—El mundo es muy pequeño —le dije.
—Sí.
— Y dime, como haces para mantener a todos sin dejar de bailar.
— No es una tarea fácil ¿Quieres que te enseñe?
— Eso sería estupendo.
— Bueno ven acércate .
Al inicio no sabía pero luego entré en confianza. Me familiaricé con los equipos y amar la música lo hizo más sencillo.
— ¡Vaya! Aprendes rápido.
— Eso es porque tengo un buen profesor.
— Oh, eres la primera persona que me dice eso.
— En serio.
— Sí, eres la primera persona que enseño a mezclar y dejo tocar mis equipos.
— No te creo.
—Puedes creerlo lo digo en serio.
— ¿Por qué?
— Axel es como mi hermano menor y si tu eres su amiga serías como mi hermanita.
— No se que decir.
— Solo Nath y cuando no haya mucha gente hermanito.
— Jajaja. Eres tan alto que no te pegaría lo de hermanito.
— Veo que se divierten —mi amigo se acercó.
— Axel ¿dónde estabas? —le pregunté.
— Ava cuando vayas a una fiesta con Axel solo lo verás cuando llegues y cuando te vayas, mientras no.
— Jajaja, ya veo —sonreí
— No digas eso Nath, si me marché fue porque la dejé en buenas manos.
— Si tal vez así fue como él y mi prima se conocieron, son muy parecidos.
— Ava ya es hora de irnos, aunque si te quieres quedar otro rato más por mi no hay problema.
Miré mi reloj y si eran más de las 12:00 am.
— Sí Axel tienes razón. Tenemos que irnos antes de que me meta en problemas.
— Bueno que esperamos.
Me despedí de Nathan, como ya era de madrugada tenía un poco de frío y él se dio cuenta.
— Espera Ava, toma mi cazadora.
— No es necesario Nath.
— Sí lo es, puedes resfriarte.
— Bueno está bien, gracias.
Dejé a Axel en su casa. Al llegar ya todos los invitados se habían ido. Abrí la puerta con sumo cuidado para no hacer ruido y la cerré despacio. Me quité los zapato y subí las escaleras, al llegar a mi habitación retiré el maquillaje me puse mi pijama y no tardé en dormirme.
⏭ ⏭ ⏭
El día, transcurrió igual que otros. Cuando llegó el medio día recibí un mensaje de Axel, quería que nos encontráramos en el patio de la escuela. Acudí al encuentro pero no lo vi por ninguna parte. Un chico con estilo de reguetonero caminaba en dirección hacia mí. No recordaba haberlo visto antes en la escuela. Solo cuando estuvo lo suficientemente cerca pude reconocerlo.
—¿Nath?
— Hola Ava.
—Que sorpresa. Y eso tú por aquí —le dije con una sonrisa.
—Ayer olvidaste tus auriculares.
— Oh, gracias está mañana los buscaba desesperadamente.
—Ten.
— Aaa también grabé la música que mezclaste.
— ¿De verdad?
— Sí compruebalo tú misma.
Me puse los auriculares.
—No se escucha mal pero creo que lo de DJ no es lo mío —le dije.
—Jaja. No seas tan dura contigo, tal vez con algo de práctica.
—Algunos vienen al mundo a crear y el resto a disfrutar de ello.
Axel se unió a nosotros.
—Hola.
— Hola Axel —dijimos.
—Sabes Ava me estoy poniendo celoso, hace tiempo invité a Nathan a la prepa y no había venido, sin embargo en menos de 24 horas vino hasta aquí por ti.
—Vamos no digas eso también vine a verte —se justificó.
—Jaja. Entonces el mensaje...
—Sí —me interrumpió Axel—, me dijo que quería reunirse con nosotros.
Audrey y sus amigas se pusieron al lado al lado de Axel.
— Ava él es el chico de la foto —preguntó Audrey
— ¿Foto? —pregunté sin entender.
—Sí, la fiesta de anoche en la disco —dijo Thais.
Saqué mi teléfono y la vi en Instagram de Axel se la enseñé a Nath.
— Vaya... no salimos tan mal —me dijo con una sonrisa.
Yo solo lo miré.
— Oh por cierto este fotógrafo debe de tener un nombre —dije.
— Sí yo también lo creo.
Ambos miramos a Axel.
— Jaja, lo siento Ava. Y tú Audrey no tenías que encontrar a Brent —le dijo.
—La tierra se lo tragó, no lo veo desde ayer en la fiesta. Bueno, los dejo, después pediré tu número guapo.
—Yo también quiero fotos —dijo Patricia, otra de las amigas de Audrey, le guiñó a Nathan y se fueron.
—Jaja —reímos todos.
Me acerqué a Axel y le puse la mano encima del hombro y le di suaves golpecitos, para que entendiera el mensaje, tampoco quería hacerle daño.
— Axel, Axel, te salvaste que salí guapa en la foto, porque sino te las verías conmigo.
— UF estuvo cera. Ava míralo de lado positivo ambos tenemos más like que la foto que publicó Gina en Las Bahamas.
Todos nos empezamos a reír.
—Mi hermanastra y yo nunca estaremos al mismo nivel.
—¿Hermanastra? —preguntó Axel funciendo el ceño.
Recordé que no le había contado.
—Pues sí, es ella.
—Oh ya veo —fue su respuesta—, nunca me lo hubiera imaginado.
—Eres el único en la escuela que lo sabe.
—Axel me había hablado de Gina ¿Entonces salieron de la fiesta de ella para la disco? —preguntó Nathan.
—Exacto. La fiesta era en mi propia casa, bueno de mi padre.
—Suena de película —me dijo.
—Sí. Oh, antes de que lo olvide iré a buscar tu cazadora.
Me retiré de allí, fui hasta los casilleros y la tomé.
—Saliste temprano de la fiesta —dijo Fred recostándose a los casilleros.
—No fue lo suficientemente divertida como para permanecer allí.
—Yo te iba a hacer compañía —dijo y tomó un mechón de cabello.
Una sola mirada hizo que lo soltara de inmediato.
—En serio. Te veías muy ocupado. Gina y tú...
—Nunca estaríamos en una misma oración —me interrumpió—, anoche solo no quise romperle los sueños, era su cumpleaños.
—Guao muy comprensivo de tu parte. Igual puedes hacer lo que quieras con tu vida.
Me iba a marchar pero me impidió dar un paso.
—Acaso no es lo obvio, quien me gustas eres tú —me dijo en un susurro.
Nuestras miradas se encontraron.
—¿Por qué no lo intentamos? —acarició mi mejilla.
—Ava —escuché la voz de Axel.
—No creo que funcione Fred. Ahora si me disculpas.
Miró hacia atrás y vioba Axel acompañado. Luego observó la cazadora de cuero en mis manos y asintió.
—Claro, ya entiendo.
Se alejó un poco.
—Ya Nathan se tiene que ir —me dijo Axel.
—Oh, perdón por la demora —les dije.
—Sentimos interrumpir —dijo Nath con una sonrisa.
—Solo me salvaron de una conversación incómoda.
—Ava, veo que alguien está celoso —me dijo Axel.
Miré discimuladamente hacia un grupo de chicos, allí también se encontraba Fred. Miraba de vez en cuando hacia nosotros, con expresión neutral.
— No lo creo Axel, lo vi ayer con Gina aunque afirme que entre ellos no hay nada. Como sea, esto te pertenece —le dije a Nath—. Gracias otra vez.
— No hay de que. Bueno ahora sí que me voy. Nos vemos.
—Adiós Nath.
—Yo te acompaño —dijo Axel—, Ava le daré tu número a Nath.
—Por supuesto. Intercambiemos números, cuando alguien necesite un buen DJ, sabré a quien llamar.
—Pues gracias por la promoción.