Jonathan
La noche anterior cuando me enteré sobre la idea alocada de mi primo. Captó toda mi atención porque aún seguía insistiendo en su plan para unirme con Sebastián, sé que aún conservaba sentimientos hacia el muchacho, sin embargo, ya no podía corresponderle aquel corazón como he dicho.
Por esa misma razón, estuve ideando junto con Santiago la manera de buscar a alguien que me hiciera un gran favor, es decir, mi plan para contraatacar a César constaba en que Sasha se encargará de conseguir a un conocido que estuviera interesado en tener una relación a larga distancia; ojalá que si existiera una persona que le gustará la lejanía del amor.
Otra preocupación que tenía era Jeannette. Ella, ha estado tranquila en estos días desde el comentario sobre que nos mudaríamos a vivir juntos en estas vacaciones, lo cual fue una mentira, y mi padre aclaró la situación con Los Curie para evitar malentendidos, sin embargo, tenía el ligero presentimiento que me va a sorprenderme con una visita.
Solté un gran suspiró.
No podía creer que a mi corta edad ya tuviera problemas personales como todo adulto pasando los treinta años; no era el tipo de persona que le gustará complicarse su existencia prefería evadir los conflictos o trataba de negociar con la persona y así poder llegar a un acuerdo.
—Jonathan, ¿Has terminado el presupuesto de marketing que te encargue la semana pasada? —cuestiono mi padre.
Salí de mis pensamientos bruscamente. Comencé a buscarlo en la computadora aquel archivo en Excel que contenía el presupuesto para pagar una campaña publicitaría del nuevo producto. Intuía sobre el producto artesanal que estaría disponible a la venta en el mercado sería un éxito, las ideas de mi padre siempre se convertían en utilidades para la empresa y para nosotros eso era beneficioso; nunca perdíamos en nuestras apuestas e ideas.
Una vez que encontré aquel archivo lo adjunte a un correo electrónico para enviárselo a mi padre y tuviera la oportunidad de revisarlo por su cuenta propia para tener una decisión correcta de la inversión que desembolsaría.
—Lo he enviado a su correo —replique seriamente.
Mi padre hizo un gesto, el cual conocía a la perfección esperaba una explicación para los números que fueron arrojados en aquel presupuesto para cualquier pregunta que llevará al éxito el producto.
—Hice una investigación con una agencia de publicidad para elaborador volantes, carteles y especialmente nos enfocaremos en redes sociales como Facebook para hacer propaganda —comenté, mientras me acomodaba los lentes—. Descarte los medios convencionales como televisión y radio, las personas hoy en día prefieren revisar su celular para enterarse de las tendencias actuales—. El presupuesto lo hice en moneda nacional porque la agencia que posiblemente se encargará es mexicana, nada del extranjero. Como usted pidió.
—¿Cuántas agencias investigo? —volvió a preguntar padre.
Cuando me encontraba laborando en la empresa familiar se dejaban atrás cualquier parentesco que tuviéramos porque la relación era patrón y trabajador como debía ser en cualquier organización; al menos podía escaparme un poco de mis problemas.
—Alrededor de cinco —contesté.
Mi padre asintió.
—Si, abro el documento de Excel encontraré los cinco presupuestos —menciono mi padre seriamente.
Tragó saliva.
No había considero consultar las otras cuatro agencias restantes puesto que, era conveniente donde enfoque mi investigación, sin embargo, a mi padre prefería analizar los riesgos y reputación que tuviera la agencia para hacer su publicidad.
—Eso pensé —argumentó mi padre—. Jonathan, ya hablemos sobre el tema de las investigaciones con servicios externos a nuestra empresa, debes de investigar a más fondo para poder tomar una decisión adecuada y conocer el entorno que rodea a la empresa sino tienes varias opciones de donde elegir resulta complicado elegir la opción que más nos convenga—. Te doy dos días más para que consultes esos datos.
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Editado: 23.05.2020