11 DE MARZO DEL 2019
Me metí bajo los cobertores de mi cama, apenas con ganas de seguir despierta, a pesar de la hora que era.
Las dos y media de la tarde y mi cuerpo no había querido salir de la habitación, ni siquiera para el desayuno. Tuve que hacerme pasar por dormida para que Patty no se pusiera pesada con la comida y me dejara sola en la habitación.
El sonido de la manija me sobresaltó, así que me cubrí hasta la cara, pensando que podría ser Patty o mamá, sin embargo, las pisadas no coincidían con las de ninguna de ellas. Lentamente bajé el cobertor, encontrándome, primero que nada, con los hermosos rizos rubios platinos de Caritshma. Deslicé los cobertores por completo, sentándome de inmediato, solo para encontrarme con Marjorie cerrando la puerta con cuidado de no hacer demasiado ruido, aún sin darse cuenta de que estaba despierta realmente.
Las dos se sentaron sobre mi cama junto a mí. Caritshma se me abalanzó para saludarme con su característico carisma y entusiasmo de siempre, mientras que Mar, bueno, ella también me abrazó como si hubiesen pasado meses y no solo un par de días sin verme.
Las chicas me pusieron al tanto de lo que habían hecho. Caritshma me contó que fue a casa de Ethan y me habló de lo encantador que había sido con ella, hasta que volvió a ser un idiota amargado, arruinado el momento entre los dos.
No me sorprendía en lo absoluto el cambio de temperamento de Ethan, después de todo, era mejor amigo de Ithiel. Los dos se conocían desde niños, quizás gracias a la alianza de James con el padre de Ethan, aunque de eso no sabía mucho entonces, solo que Ithiel y él solían hacer casi la mayor parte de las cosas juntos, como con Drake Finshker, su otro mejor amigo.
—Hemos decidido —Caritshma sonrió en complicidad con Marjorie, esta última se hizo el cabello hacia atrás y jugueteó con él por unos segundos.— ...que pasaremos el día contigo, Oky Koki.
Negué con la cabeza. No quería que ninguna de las dos dejase los planes que seguramente tenían, solo porque yo no era una carga en ese momento.
—No, no van a quedarse aquí encerradas conmigo, aburriéndose. —Objeté, viéndolas de intervalo a ambas— Además, seguro que querrás pasar la tarde con ese tío del que nos hablaste la otra vez, Mar ¿Se llamaba Nick?
Marjorie se echó a reír y negó un par de veces.
—Nico, se llama Nico —Me recordó— pero no hay nada serio entre él y yo. No me pesa pasar la tarde encerrada contigo aquí.
—Y yo estoy enojada con Ethan, así que no tengo más que hacer que pasarla contigo, linda —Dijo Caritshma.
Suspiré profundo. Apreciaba el hecho de que me quisieran hacer compañía, pero no quería a nadie cerca de mí en ese momento. Estaba triste, agotada y solo deseaba ahogarme en el silencio de mi habitación.
—¿Volvieron a pelear? —Me volví lentamente hacia la dueña de esa voz. Caritshma se había ahorrado la pregunta, pero Marjorie nunca se quedaba con la duda.
—¿Te lo ha dicho él acaso?
Intentó desviar la mirada para no responder, quizás buscando otra pregunta o una respuesta que no me lastimara. Sin embargo, al final asintió.
—¿Cómo lo sabes? ¿Él te lo dijo?
No sabía exactamente hace cuánto se conocían, pero cuando Ithiel me presentó a Marjorie, lo hizo como su mejor amiga. Y ella y él compartían una amistad bastante buena. Hiciera lo que hiciera, ya fuese ella o él, ninguno se irritaba con el otro lo suficiente como para dejar de ser amigos. A veces las miradas que compartían me hacían creer que había una historia muy densa entre ellos, pero prefería no preguntar.
Marjorie me pidió que olvidara el tema, que no era su intención hacer que recordara eso. No obstante, ese era un problema, no podía olvidarlo así de fácil. No se olvida lo que te rompe el alma y el corazón de una noche a otra.
—¿Qué te dijo? —Cogí su mano a modo de súplica.— Por favor, Mar...
Suspiró resignada.
—Sabes que conozco a Ithiel desde su faceta de niño promiscuo —Dijo, y la imagen de Ithiel en aquellos tiempos me pasó por la mente, aunque no lo conociera en esa época. Sonreí al imaginarlo.— y es por eso que te pido esto: no pierdas la fé, no todavía, Cory. Puede que sea difícil entenderlo, pero no tienes idea de cuánto te necesita.
"te necesita"
Esas palabras se quedaron grabadas a pulso en mi mente. Él me necesitaba, más no me amaba. La diferencia era demasiado notoria para intentar ignorarla. Y además, mis esperanzas en él se estaban consumiendo como brasas al fuego.
—Es un idiota —Me atreví a decir, con el corazón doliendo.— Tú misma lo has dicho, "me necesita", no me ama ¿y si no me ama por qué no dejarme?
Marjorie se tensó de repente. Sus pupilas se dilataron y después de un momento, me miró con firmeza, como si estuviera a punto de soltar una bomba destructiva.
—No creo que esa sea la pregunta correcta, Cory. —Espetó, levantándose de la cama, sin apartar la mirada de mí—. Sino ¿Por qué si te hace daño, no te alejas tú?
Sabía que la intención de Marjorie no era lastimarme, pero esa pregunta logró abrir más mis heridas internas. Me pregunté lo mismo muchas veces ¿Por qué, si me hacía tanto daño, no me alejaba yo? ¿Por qué seguía esperando algo que Ithiel me juró no darme nunca?
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Editado: 06.10.2025