"Deben ser buenas personas" esa era una de las frases elegidas que siempre nos decía mi padre.Y ese fue, el ejemplo de vida que siempre nos dio y al cual, debíamos seguir.
Según sus palabras, para ser buenas personas siempre se debe ayudar a los demás. Papá fue una persona que desde niño, tuvo que irse a vivir con otra familia, porque eran dieciséis hermanos y no podían criarlos a todos juntos.
Siempre contaba la anécdota de que, no podían comprar pan todos los días porque no les alcanzaba el dinero. Entonces, se iban turnando entre los hermanos a quién les pertenecía comer pan. Seguramente, ese fue uno de los motivos que le enseñaron a valorar lo que se tiene y a ser buena persona.
Doy gracias a la vida, por haberme dado un padre buena persona y con los valores que él tenía y que nos pudo transmitir. Su vida fue un ejemplo a seguir, a pesar que a sus 54 años falleció a causa de cáncer, Pero, esos años que fue mi padre, fueron dignos ejemplos de vida y forma de ser a seguir.
¡Ojalá todos puedan tener un padre como el que tuve yo! si así fuera, no existirían las malas personas.
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