Fin de cursos

El año llegó a su fin, y con el la finalización de cursos. Ya no habría viajes ni madrugadas ni estudios por tres meses. Si bien me gustaba estudiar, a todos nos gusta tener un receso para descansar y recuperar energías. En mi primer año de estudios no tuve ninguna materia baja, pasé sin problemas. Mi familia estaba muy contenta, porque el sacrificio que ellos hacían para poder pagar el viaje era enorme. 

Si bien no decían nada, yo veía como cada comienzo de mes sacaban cuentas y cuentas para poder llegar al dinero para el pago de mis viajes. Por eso yo quería que ellos recibieran la compensación por su sacrificio con buenas calificaciones. Y así fue, pude decir misión cumplida ese primer año de clases.

Fue toda una aventura: conocer una nueva ciudad, un nuevo centro de estudios, nuevos compañeros, profesores, cambiar la modalidad de estudios. Y es menester mencionar que lo hice con placer, me gustaba estudiar y tenía la meta de poder hacer algo que me gustara. 

Pero era hora de descansar y así fue. Pronto llegarían las fiestas navideñas y había que prepararse para eso. Ayudar a mi familia en lo que pudiera y descansar. Así fue, ese primer verano de vacaciones.