Capítulo 8: Salida

- ¡Hee, no puedes atraparme! - dijo el niño a su mejor amigo.

- ¡no correrás por siempre Susu! - contesto el otro niño.

Unos pequeños de 8 años jugaban en el patio de la mansión del menor, Hee como la mayoria de las tardes fue a jugar a la casa de su mejor amigo, mientras sus madres aprovechaban de tomar alguna tasa de té.

Se conocen desde los 6 años y desde entonces se volvieron inseparables, nombrandose los mejores amigos del mundo mundial.

- Hee cuidado con caer - alzo la voz su madre, preocupada porque su pequeño tropezara con algo.

- son niños, déjalos jugar ahora - tomo un sorbo de su té caliente - cuando crezca extrañaras estos días, querida - agrego con una sonrisa.

La señora Jo, una mujer de buen patrimonio de piel algo acanelada, labios rosas y unos bellos ojos negros como la noche. Amable como siempre.

- lo sé, solo tengo miedo de que pueda lastimarse - se acomodo mejor en la silla, ambas estaban en el comedor al aire libre para ver a sus hijos jugando en el jardín.

Una mansión inmensa era donde se encontraban, y pocas áreas eran a las que se podía visitar si se trataba de invitados.

La dueña de casa giro su rostro, dando con la escena más tierna del momento, su hijo, su tierno Susu ayudando a levantar a Hee quien a pesar de ser menor por 2 meses era un poco más pequeño.

Su pequeño Hee era una copia exacta de ella, como decía su esposo; su nivea piel suave con unos ojos soñadores, pómulos algo definidos y sonrisa picaresca.

Eran casi una copia, si no fuera por que su bello niño era un doncel.

Y aun así lo quería con todo su corazón...

- se quieren mucho - la señora Jo interrumpió sus pensamientos.

- se cuidan uno a otro - agrego con una sonrisa - una amistad que durara mucho.

- la más larga - agrego de nuevo la señora, tomando otro sorbo de su taza.

Una bella tarde, donde una inocente amistad seguía floreciendo.

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- yo voto por ir a beber - alzó la mano el pelirrojo siendo bajada por su novio.

- yo, por un cambio de look - propuso Hyuna con un puchero en los labios.

- yo, ir a asaltar a una pastelería - el de pelos rosados hablo con un tierno mojin en su boca.

- ¡silencio! - grito Seokjin - si hablan todos al mismo tiempo no saben cual elegir.

- yo quiero ir al centro comercial por un nuevo cargador para mi laptop - ahora propuso Yoongi.

El castaño estaba tratando de acordar con ellos una pequeña celebración, se decisieron de las escorias de sus padres, un peso menos en su conciencia. Baekhyun había propuesto celebrar con algo y pronto se lanzo una guerra de propuestas entre todos, salvo por E'dawn y Chanyeol, quienes solo trataban de controlar a sus impulsivas parejas.

- lo haremos a la suerte - propuso sacando de su bolsillo trasero una moneda - Yoongi; cara y Hyuna; cruz, seran primero - lanzo la moneda al aire ante la mirada expectante de todos, cuando esta cayo de nuevo en las manos del castaño todos guardaron silencio - gano Hyuna - dijo al voltear la moneda, dejando a la pelirroja celebrando.

》sigamos, Jimin; cara y Baekhyun; cruz - sonriendo volvió a lanzar la moneda y al atraparla cambio su lado antes de revelarlo - gana Baekhyun - y la fresa celebro saltando en toda la sala.

- gane ¡GANE! - y al igual que resorte siguió saltando de un lado a otro siendo perseguido por su novio.

- ultima ronda, Baekhyun; cara y Hyuna; cruz - dijo y nuevamente lanzo, cayendo en su mano la volteo y la revelo, dejando que el de cabello rojo gritara cual niña nuevamente - Baekhyun gana.

- ¡BESEN MI TRASERO PERRAS! - señalo a todos los presentes - lo sabía, lo sabía - señalo a todos - de tiempo que iremos a beber, al fin, que ya me estaba aburriendo de estar siempre en casa, una salida no nos hará mal - dijo con una sonrisa triunfante y algo maliciosa.

- que te lo bese Chanyeol - dijo con obviedad y una sonrisa pervertida el peli azul.

- ¡OYE! - fingió estar ofendido.

- no te hagas - dijo en toco juguetón Y acercándose al oído ajeno susurró - que sabes que quieres - Yoongi se enrecto y paso a donde sus hermanos.

Dejando a un pelirrojo que antes celebraba con deseo de algo que más que una salida, necesitaba a Chanyeol ahora.

- vayan a cambiarse - ordeno Hyuna - yo les avisaré a los nenes que cuiden la casa, después de todo deben estar cansados de entrenar - y pronto desapareció por las escaleras.

- vamos Chanie - jalo a su novio del brazo poniéndose a caminar arrastrando al nombrado - tenemos cosas que hacer.

- ¡solo no nos vayas a traumar con tus gemidos! - grito E'dawn recibiendo del poste con patas un saludo del dedo corazón, para luego desaparecer.

- tenemos como 3 horas - hablo el castaño - así que vamos a cambiarnos, hemos estado ocultos como 4 días.

- sip - hablo Jimin ya sacando una chupeta roja de su envoltorio - seguro ya no están tan alertas y eso.

- aun así debemos tener cuidado - ahora miro al rubio - te deshiciste del auto ¿verdad?

- obvio, llame a unos amigos y el auto ya esta en un lugar de chatarra siendo destrozado, el seguro de la renta ya lo fui a pagar - hablo tranquilo, después de todo si ya no hay auto, ya no hay problema.

Los donceles sonreían cómplices, mirandose unos a otros.

Sus planes fueron mejor de lo que esperaron, su flor estaba en cada noticiero de la mayor parte del país, sembrando una semilla de temor en cada ciudadano y llamando la atención del bajo mundo.

Son criminales a sueldo hasta cierto punto, así que mientras más sepan su nombre serán más el dinero que llegue a sus bolsillos, algo realmente deseado para ellos pero no para que los mal entiendan.