Capítulo 16.
Me visto, luego baje a la cocina hice unos sándwich y salí al bosque quizás no coma esto pero no se que más llevarle.
Salgo y me adentro al bosque.
----¡¡¡Grandote!!! ¡¡Grandote!! ¡¡¡Bonito ven!!!-- ni que fuera gato Elena.
Recuerdo que la madre de Sebastián dijo que si tienes una conexión con un lobo él puede sentirse y comunicarse, eso último no lo entendí pero yo si creo tener una conexión con grandote algo de él me llama.
Ok no estas loca Elena solo eres muy crédula así que intenta llamarlo.
Cierro mis ojos con fuerza pensando en el, intento sentirlo y se que sera raro pero, empiezo a sentir una alegría o felicidad en mi pecho y se que sonara más raro todavía pero no son mías.
¿Serán del lobo?.
Abro los ojos pero nada el no esta y me siento desilusionada de verdad quería verlo, ahora que estoy mejor me encantaría volver a correr con el.
Camino de nuevo a casa, pero un fuerte aullido me detiene, volteo y ahí está mi grandote, corro y lo abrazo, él pasa su hocico por mi cabello y yo lo acarició.
---Te extrañe grandote --sonrió --no puedo creerlo que funcionará, entonces tenemos una conexión.
El lame mi mejilla haciéndome cosquillas.
--– Basta bonito –- niego con la cabeza mientras vuelvo a acariciarlo se que le gusta.
--– Mira no se que comes pero te traje sándwich,¿te gusta?-- no es que espere que me conteste pero se lo acerco en mi mano él lo olfatea y luego se lo come.
--– Entonces si te gusta –- sonrió-– bien y ahora cómo es eso de la comunicación.
Me pregunto más a sí misma que al lobo.
--– Sabes la madre de alguien muy especial para mi que después te contaré, relato una historia y en ella decía que los lobos eran humano antes por lo cual las manadas podían entenderse y hablar entre sí cuando se multiplicaron.
El lobo me mira atentamente mientras le hablo como si entendiera cada palabra que le digo, sin embargo no pasa más nada.
--– Bueno no todo tiene que ser cierto-- digo y acarició su lomo, el se inclina invitandome a montarlo como la vez anterior.
--– Seguro –- el lobo asiente o eso creo que hizo con su enorme hocico.
Subo a su lomo y me sostengo con fuerza pero sin hacerle daño a su pelaje.
El lobo empieza caminando y a medida que avanza acelera el ritmo hasta estar trotando, no paró de reír, esto es mejor que ir en moto el viento en tu cara, la sensación que vuelas en el bosque, además del calor que emana lo natural siempre es mejor.
Llegamos a un hermoso prado, donde hay flores rosadas, violetas y otros colores verdaderamente hermosos.
Él se inclina y yo vuelvo a bajar, aspiró el olor a naturaleza que es muy agradable por las distintas flores.
Ustedes dirán a bosque también pero sepan que no, el bosque huele a humedad, moho, al menos para mi es así cómo huele que no es lo mismo.
Miró al lobo y este decidió acostarse pero no pierde detalle de nada de lo que hago.
Me acerco a su lado y me acuesto en su costado el cual es muy suave y peludo.
Me acurruco en él mientras paso mi mano por su pelaje.
--–Esto en fantástico....sabes me encantaría ser como tu, poder ir donde quiero... ser libre y correr.... sin ataduras ni maltrato... Cuando me gradúe pienso ir lejos, quiero escapar no voy a permitir que dañen como quiere J...
Un sonido me interrumpe, intento ubicarlo pero no lo consigo, grandote se pone en sus cuatro patas y puedo sentir que está muy molesto lo cual me asusta.
>>1 ¿porque está molesto?
>> 2 ¿que será el ruido?
>>Y 3 pero no menos importante de verdad siento sus emociones
Al principio pensé que era mi mente jugando conmigo ahora sé que no es así.
El lobo se coloca delante de mí de manera defensiva y gruñe.
Lo que sea que esté ahí no es nada bueno, miro mi lobo y este me transmite seguridad pero igual me encuentro alerta esto parece una maldita película y ¿ahora qué?
Veo aparecer de las orillas del claro tres inmensos lobos, el de la derecha de un color beige, el de la izquierda de color gris con marrón pero uno muy oscuro y el del medio es el más aterrador de color negro casi del mismo tamaño que mi grandote.
Mi lobo y los recién llegados se miran, como si hablaran entre ellos ya que el mío pega gruñidos cada tanto.
Me quedó viendo la escena desde mi posición, cuando el negro da un paso mi lobo gruñe más fuerte pero lo que me sorprendió vino después.
El lobo negro y sus compañeros fijaron su mirada en mí y yo me congele, no recuerdo donde pero una vez leí que cuando estas con animales salvajes no debes mostrar miedo y quedarte quieta.