Capítulo 18.
Capítulo 18
El tiempo ha pasado volando, cosa que agradezco, En unos minutos es la final de atletismo, la semana que viene son los exámenes y para cerrar el cumpleaños de Sara. Nos hemos vuelto grandes amigas, ella me cuenta cada cosa graciosa de Sebastián, hemos salido varias veces con las chicas aunque también es un poco extraña a veces ella puede percibir olores mejor que cualquiera, tiene muchísima fuerza.
El Otro día en el centro comercial de una rabia derrumbó un tráiler de comida, nunca había visto algo así, ella dice que sufre de ataques de adrenalina, también puede ver cosas que nadie más notara, pero sobre todo es una gran chica.
Otra cosa que me tiene en suspenso es que Jhon ha desaparecido, no es raro que se pierda por temporadas largas pero siento que algo extraño está pasando, mi conexión con grandote es cada vez más fuerte y eso me encanta.
Y lo que me tiene en este estrés es que si quedo entre las tres primera de la carrera puedo conseguir una beca para una universidad en el extranjero y no sé cómo decírselo a Sebastián, Ross lo sabe ya que me ayudó cuando envié la solicitud, ella quiere estudiar artes por lo que también piensa estudiar fuera del país, yo quiero estudiar Literatura y la beca del atletismo me abrirá muchas puertas, creo que nos irá bien juntas.
Con Paola la cosa está más dura, ella quiere quedarse aquí por lo que no se lo hemos dicho, no sé cómo lo tomará. Por lo que desde que encontró a Max se lleva mucho mejor con su padre y su madre está muy feliz por eso.
Mañana será de chicas por lo que vamos al parque de diversiones es una tradición que tenemos antes de los exámenes si podemos montar nos en la atracción más terrorífica podremos pasar todos los exámenes.
---Vamos Elena, nos llaman a posición--- Me dice Ross, le sonrió y salgo con ella a la pista.
Como vivimos en un pequeño municipio corremos con la suerte que solo competimos entre nosotras somos diez chicas en total, las gradas están llenas tanto de amigos, compañeros, familiares y los más temidos reclutadores.
El director sube a un pequeño podio improvisado a decir una palabras, lo orgulloso que está de todos las labores empleadas en el plantel entre otras cosas, aprovecho para mirar el público, Jeison pudo asistir y me saluda desde las gradas, por lo que hago lo mismo de forma disimulada, Cuando localizo a Sebastian mi corazón se quiere salir, está junto con los chicos y varios de los Crecientes, entre todos sujetan un gran cartel que dice ¡VAMOS LUNA! Los colores me suban al rostro y una sonrisa se planta en mi cara, Sebastian me lanza besos y silva como loco. Jeison se da cuenta y sonríe, tiene esa mira de hablaremos después en buen plan.
Primero suena el Himno de nuestro País, como siembre esa persona que dice Letra de Vicente Salias y Música de Juan Jose Landaeta para luego dar paso a las notas de Himno Nacional, todos levantamos nuestros rostros mientras suben la bandera, Luego el mismo proceso para el Himno del municipio y para finalizar el de la escuela, Ya para este momento todas tenemos los nervios a millón. Las chicas me dan ánimos y yo a ellas, Cuando la entrenadora coge la pistola estamos en posición y con el sonido del disparo comienza la carrera.
Corro como si mi vida dependiera de ello, porque se en mi corazón es así. Amo a Sebastian como jamás pensé se podría amar a una persona, pero no puedo quedarme aquí, no puedo permitir que el mostro de Jhon acabe con mi vida, sé que debería pedir ayuda, pero en el setenta por ciento de estos cosas nadie le cree a la víctima, Solo bastaría una pequeña prueba para ver que soy virgen, pero aunque quizás su maltrato físico no haya llegado tan lejos todavía, que hay del psicológico, me da terror si quiera quedarme a solas con mi novio, cada palabra que me acuerda a él me congela, me paraliza, no puedo permitir que el acabe conmigo, no puedo vivir con miedo.
La carrera acaba y yo quedo de segunda, por lo que las lágrimas salen sin control, lo conseguí, tendré la Beca, Rosmery llega a mi lado y me abraza, saltamos como locas y reímos, Paola no entiende pero nos sigue el juego y cuando me doy cuenta somos una bola de gente abrazada, los chicos han bajado de las gradas y celebran con nosotras.
Hoy mi vida cambia, porque digo no más.