Llegamos a una casa un poco vieja a las afueras de la cuidad, por lo visto estaba abandonada. Entramos y todo estaba apagado, a penas si podía ver por donde caminaba.
-Fermerus- escuché decir a mi hermano y una de las velas se encendió.
La tomó entre sus manos y me la extendió, me guió por las escaleras hasta el segundo piso y entramos en lo que supongo será mi cuarto. Me siento en la cama colocando la vela en el marco de la ventana, alcé la vista para poder ver a los ojos de mi hermano, le hice un gesto con la mano para que se sentara a mi lado, el me mira con desconfianza. Pero luego lo hace. Juego con los dedos de mi mano mientras desvío la mirada a otro lado.
-Chris- digo al fin y él se acomoda mejor en la cama, como si estuviera más relajado.- necesito respuestas. Ahora.
-Entonces haz las preguntas- dice con tono divertido.
-¿Que soy?- digo y lo miro a los ojos, él duda.
-Mamá solía llamarnos Cruzados- dice con nostalgia.
-Yo no recuerdo eso, mamá siempre nos odio y le molestaba todo lo que hacía o decía y si me dirigía la palabra era por medio de papá.- le expliqué refrescando su memoria.
-No Cress- dice y se voltea a verme- no hablo de Heltra.
-Creo que estoy confundida- él respira con pesar como si no pudiese ver lo obvio.
-Nuestra madre, nuestra verdadera madre no es Heltra, ella es una impostora que se hace pasar por nuestra madre.
-¿Cómo es que no recuerdo eso?- pregunto incrédula, la verdad es que mejor para mi si esa mujer no es mi madre. Al cabo que ni la quería.
-Seguro todavía tienes los recuerdos bloqueados- él me mira fijamente a los ojos y parece que nota mi confusión.
-No entiendo nada.
-Lo siento, creo que me he explicado mal. Cressi tu y yo somos diferentes a todos los demas, nacimos con habilidades tanto Veltra cono Imponente- explica en un tono serio- nuestra verdadera se llamaba Julie, era alta, pelo blanco y ojos verdes, yo tampoco recuerdo mucho pero si algunas cosas. Ella nos amaba y nos protegía, no se quien fue nuestro padre, el murió a meses de tu nacimiento. Fuimos arrebatados de nuestra madre porque los Veltras nos consideran un peligro para su monarquía. En los últimos años los nacimientos de Veltras han escaseado, ellos tienen miedo de que nazcan más como nosotros, eso los llevaría a ser igualitarios con los Imponentes.
-Espera, deja procesar lo que me has dicho- levanté mis manos en señal de alto. Joder esto es mucha información, creo que ahora todo tiene más sentido, lo que paso en el bosque, el cambio de color del accesorio del Aztri. Pero algo aun no me encajaba.- ahora explica nuestras memorias.
-Bien, existe una mujer en el reino con poderes únicos que solo su descendencia directa posee. Ella puede jugar con tu mente, no puede leer tus recuerdos a menos que tu aceptes, pero puede encerrar algunos y hacerte ver cosas que no están, no se como explicarlo. Según me dijeron puede hacer que tu mente la perciba como un ser querido y logren establecer una conversación de la cual no te darás cuanta de que esa persona es una impostora. Solo claro si tocan algún tema íntimo.
-¿Tema íntimo?
-¿Aún duermes sin ropa?-me sonrojo ante la idea de que mi hermano sepa eso. Pero a él parece divertirle. Le doy un leve golpe en el hombro izquierdo.- eso me deja dicho que si lo haces. Y sobre nuestras habilidades, ella también las encerró, a medida que recuperemos la memoria recuperaremos las habilidades.
-¿Y como se supone que vamos a recordar?- digo algo confundida.
-Esa es la peor parte, solo un sentimiento puro puede desbloquearlo, los sentimientos puros más fáciles de conseguir son el odio o el dolor.-Medito un poco sus palabras, ahora todo lo que paso con Meize tiene sentido. En ese momento solo podía pensar en matar a esos malditos.
-¿Y que me dejas dicho de papá? El papá falso- él ríe divertido.
-¿Papá falso? ¿en serio?- ríe aún más - Bueno George es un tanto diferente. Él pensó que podía mantener tus poderes y los míos bajo control siempre y cuando estuviéramos en un ambiente hogareño, y lo logro por más de un siglo hasta que yo empecé a darle algunas dificultades técnicas- dice entre comillas con los dedos. Yo recuerdo lo que me paso con Meize, y antes de que pudiese contarle el habla.- por otro lado Heltra quería ver el más mínimo destello de nuestras habilidades para mandarnos a encerrar en el Inframundo.
-¿Qué es el Inframundo?
-Es donde estuve todos estos años- lo miro con atención, él parece realmente dolido- en ese lugar aprendí de mis habilidades y obtuve uno que otro recuerdo más sobre mamá.
-¿Más? O sea que ya te acordabas de ella.- afirmo.
-Más o menos.- dice encogiendo sus hombros.
No me atrevo a preguntar nada más y me dejo caer en la cama, subo mis pies a su regazo y él los acaricia distraído con la mirada fija en algún lado. Yo miro al techo para organizar mis ideas. Que duro ha de ser todo esto para él, pasar tanto tiempo alejado del único familiar que le queda. Y yo aquí, pensando que estaba muerto, o al menos eso fue lo que me dijo Heltra, dijo que había muerto de un ataque al corazón luego de haber tenido una discusión conmigo. Siempre me culpe por la muerte de mi hermano, y me arrepentí de no decirle lo mucho que le quería. Recuerdo que lloré durante todo un año, tal vez algo más.
Él levanta mis pies y sale debajo de mí. Se quita la camisa dejando ver así, no sólo sus abdominales bien marcados, sino también varias cicatrices en su pecho y hombros. Se tira a un lado de mi en la cama. Yo me giro para poder verlo de frente paso las llenas de mis dedos por sus cicatrices. Es horrible.