Criaturas: Dos Dimensiones

VI

Amarok

Miré bajar Isla con sus maletas, estaba emocionado pasar tiempo con mi hija, pero me preocupa que es lo que le sucede realmente. Nos despedimos del consejo, ayudé a mi hija subir las maletas al auto. Ambos nos subimos al auto, encendí el auto, y comencé a manejar. En todo camino hubo un largo silencio. 

Isla-Este es su pueblo?-Me preguntó, miré a Isla no podía saber si estaba sorprendida en ver el pueblo. Sonreí.-Este pueblo parece de otra dimensión! 

Amarok-Quiero que mi gente se sienta como su hogar,-Dije.

Isla-Pensé que solo era un pueblo abandonado con gente sufriendo hambre o algo así.-Se rió

Amarok-Todos piensan eso, pero en realidad es otro cuento.-Dije, llegamos hacía la entrada de mi mansión, los guardias abrieron el portón. Cuando llegamos apagué mi auto. Ambos nos bajamos del auto, ayudé a Isla bajar sus maletas. 

Isla

Estaba tan impresionada con el pueblo, tomé una maleta y Amarok tomó la otra maleta, cuando entramos a su mansión. Era enorme, limpió, todo organizado, había fotografías colgadas en los paredes. Esta mansión parecía un castillo! Finalmente llegué al sala de estar, me siento un poco incomoda por aver dejado a Karoline todo cargo, enserio me siento mal! Tomé asiento, observaba cada rincón, es muy rustico pero también tiene un toque moderna. Llegó Amarok con un vaso de leche y galletas.

Amarok-Las cocineras te prepararon esto.-Los colocó en la mesa. Aun tengo desconfianza en Amarok, él fue que casi me quita la vida. Tomé una galleta, cuando di la primera mordida..WoW! Estás galletas estaban deliciosas! Luego miré unas mujeres entrar hacía la sala.-Te presento el personal de limpieza, cocina y bar..El personal de cocina son, Lucia, Amanda, Bianca. El personal de limpieza es Lorena y Will y el personal es Will también...Y ella es mi hija, Isla Arya Rymer.-Todos hicieron una reverencia hacía a mi, les sonreí a todos, aun que ellos no lo noten que les estoy sonriendo.-Will, le puede ayudar con sus maletas?

Will-Por supuesto Alpha-Tomó mis maletas.

Lorena-Te demostraré tu habitación señorita-Sigue a ambos hacía el segundo piso. Lorena sacó una llave y abrió la puerta. Entré hacía mi habitación, miré que tenía unos adornos increíbles! En las paredes había copitos de nieve pintados, un lobo blanco aullando hacía la luna llena. Sentía que estaba en el bosque, la cama estaba hermosa, esta hecha de madera y tiene hermoso adornos en ella. Me acerqué hacía la ventana, podía ver el pueblo, algunos de los niños me miraron.-Este será su habitación, espero y le guste.

Isla-Gracias,-Dije, ambos se retiraron con una reverencia. Abrí mis maletas y empecé guardar mi ropa en los cajones y otros en el ropero. Volteé hacía el espejo y me miré en el espejo, podía notar que aun tenía la mascara puesta.-No sé si pueda seguir ocultando esto...

Después de desempacar, bajé hacía la cocina. Las cocineras estaban limpiando la cocina.

Lucia-Señorita! Disculpe, no la habíamos visto!-Las tres hicieron una reverencia de disculpa.

Isla-Descuida, no es necesario que me hagan reverencias.-Dije, las tres sonrieron, todas volvieron a su deber. Me acerqué el refrigerador y lo abrí, había mucha comida! Solo escuchaba mi estomago,

Amanda-Tienes hambre?-Me preguntó, asentí.-Te haré una comida especial para ti!

Isla-Gracias,-Me retiré de la cocina, subí de nuevo al segundo piso, mientras pasaba por el pasillo, miré una puerta antigua, tenía seguro. 

"Hola mi pequeña Nieve..."

Escuché una voz dentro de mi cabeza, toqué la puerta, lo observé por un momento. Olía algo dentro de esa habitación. Como si hubiera alguien dentro de esa habitación. Empecé escuchar las gotas de la lluvia caer, al escuchar las gotas de la lluvia me hacía relajarme, me retiré de ahí y entré a mi habitación. Me acerqué hacía la ventana, miraba como el suelo estaba mojado, los arboles, las flores felices de que lloviera, el cielo gris, escuchar la gente del pueblo, miré a las personas del pueblo, estaban alegres, los niños jugaban bajo la lluvia sin importar mojarse. Algunos se convirtieron en su forma lobuna, la mayoría eran cachorros, ellos brincaban en los charcos, desearía volver ser niña, así jamas sufriría, no supiera cual es el verdadero dolor, no estar angustiados cuando crezcas, estar en una burbuja lleno de imaginaciones y cuentos de hadas..Abrí la ventana, me senté en la ventana para disfrutar la lluvia. Algunos de los niños me miraron, sonrieron y me decían hola con su mano. Otros solo me observaban seriamente. Levanté mi mano derecho y les dije hola. Los niños se rieron, se acercaron hacía la mansión. Estaba sorprendida de que los niños lograron acercarse ya que está repleto de guardias. Una pequeña niña usó su magia para elevar una cesta. Salí rápidamente hacía al balcón de mi habitación. Tomé la cesta, luego miré a los niños.

-Bienvenida a casa Señorita Rymer!-Dijo con una alegría la niña. Con esa alegría de la pequeña sentía como si estuvieras en un lugar lleno de paz y alegría. Los niños regresaron hacía al pueblo, entré de nuevo hacía mi habitación, miré lo que tenía la cesta.

Bienvenida a Casa, Señorita Rymer!

Con Amor, El Pueblo

Que amables son! Miré los regalos, me encantaron. Creo que ya estoy en casa...




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