20. Gladius

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La joven Crossrose sube hasta el quinto piso de un edificio clásico italiano en compañía del conserje, quien amablemente la acompaña para ayudarla con las maletas. Mientras subían le hablaba en un inglés con un marcado acento italiano, pero la joven para que no se forzara le responde en italiano. Durante los breves minutos que estuvieron en el ascensor, Sarah no dejaba de jugar con el sobre que le habían pasado en el recibidor del edificio. Cuando llegan a la puerta del departamento cincuenta y dos se paraliza, por lo que su acompañante le consulta si se encontraba bien. Ésta le dice que su ayuda había sido suficiente, pero que ella entraría el equipaje. El hombre antes de irse le da una última mirada y se pregunta que quizás los otros inquilinos del departamento podrían aparecer pronto. Cuando ya no había nadie que la viera abre el sobre y saca dos llaveros dorados con el emblema de su familia, pero guarda el que pertenecía al departamento de Berlín. Comienza a probar las llaves para saber cuál era la correcta, en el tercer intento la puerta de olivo se abre. Toca la madera y luego la manilla imaginando que sus padres podrían estar esperándola en el interior. Vuelve a respirar profundamente y se saca de la cabeza la idea de encontrarse con ellos. Pero la presión no se iba y sus ojos se humedecen. Se recuerda la promesa de hacerse más fuerte y se dice a sí misma que debía seguir adelante. Abre y entra las valijas para luego cerrar la entrada.

Deja las llaves sobre una mesa barroca que estaba en el recibidor, que tenía un hermoso jarrón de la dinastía Ming y unas cuantas cajas de porcelana. Ve el lugar, el cual estaba ordenado y limpio. Abre las ventanas para que entre aire. Sarah ve la calle y la burbujeante vida de ellas. Camina por la sala de estar, la cual le recuerda su hogar. Las tonalidades eran distintas, pero se veía algo del estilo que la hace recordar la mansión. Se detiene frente al escudo familiar que estaba sobre la chimenea que era decorativa y lee el lema. Luego toca una tecla del piano de cola y ve en detalle las obras de arte. Después de recorrer todo el lugar llega al dormitorio principal y se detiene. Piensa que quizás se encontraría con cosas de sus padres. Al entrar ve el hermoso cuarto decorado con elementos de su gusto, nota que todo lucía como si hubiese sido preparado para ella. De repente, un detalle le llama la atención al mirar la cama, sobre ella había una caja blanca envuelta con una hermosa cinta de seda y que tenía el nombre de una de las tiendas que había visitado en París, pero además había una funda de seda rectangular, no muy ancha y larga de un blanco más claro y con un hermoso bordado del blasón familiar. Se acerca y abre la caja, se encuentra con un hermoso vestido de tipo imperial y color blanco invierno. Al sacarlo una nota se cae, la recoge y se sienta en el banquillo para leerla. La abre y Sarah bota la prenda de la sorpresa al identificar la letra de su padre.

Si estás leyendo esta nota significa que nuestro mayor temor se hizo realidad, ya no estaremos a tu lado. Lamento que no te dijéramos la verdad sobre quién eras realmente y otras tantas cosas sobre el mundo real y nuestra familia, pero tengo la certeza de que lograrás descifrar las incógnitas. Como sabíamos que la transición sería difícil elegimos a alguien para que se convirtiera en tu mentor, será la persona que te enseñara todo sobre nuestro mundo y la realidad que los humanos ignoran. Ese cazador fue el aprendiz de uno de nuestros grandes amigos y que permitió que lo usáramos como distracción para que Gladius se mantuviera alejado de ti mientras crecías. Él era un gran cazador y que formó a una de las gladius más respetables de todos los tiempos y que será tu maestra, Eara Kontos. Sin embargo, debes tener en cuenta que Eara mostró inseguridad para aceptar nuestra petición, pero no debes temer, ella es la indicada para estar a tu lado y aceptó lo que le pedimos. Así que sabemos que quedas en buenas manos, por lo que debes convertirte en una cazadora con la fuerza suficiente para mantener el equilibrio de las amenazas de la oscuridad.

Esta caja contiene el vestido que tendrás que usar el día en que tengas tú ceremonia de iniciación y digas el juramento que marcará tu vida. Espero que mantengas el que se ha repetido entre todos los Crossrose, aquel que fue creado por el fundador de nuestra familia. Además de este vestido, te estoy dejando una espada muy especial y que fue creada por el mismo Owain. Esta hermosa y noble arma te acompañará de ahora en adelante y te ayudará a cumplir tu misión.

¿Sabes? Espero que estés bien y te guste como decore los departamentos.

Te queremos, tus padres Marc y Jane.

Mientras la joven releía la carta sus lágrimas no dejaban de fluir. Se dice a sí misma que ellos sabían que iban a morir, ya no tenía dudas sobre ese asunto. Pero no podía comprender por qué ellos no fueron capaces de decir nada y evitar la situación. Un gran dolor recorre su pecho, uno tan semejante como aquel que experimentó tras enterarse y confirmar el accidente que apagó sus vidas. Leía reiteradas veces la carta buscando algo nuevo, pero no había nada más. Tras pasar varios minutos se logra calmar y comienza a pensar sobre las cosas que le escribió su padre. Él le confirmó sus sospechas con respecto a Eara, no era una simple persona que la llevaría a Roma, sino que su maestra. Lo que no entendía sobre este tema era el por qué ella le repitió constantemente que Gladius elegiría a alguien para entrenarla. Esperaba que cuando la viera en la organización le explicará concretamente por qué dijo eso.

Tras notar que el vestido estaba tirado en el suelo lo toma y lo deja dentro de la caja. De repente torna la vista sobre la funda de seda blanca. Deja la nota sobre el banquillo y toma el objeto que tenía un peso conocido. Su padre le había dicho que era una sable especial, se pregunta de qué tipo sería. Desata el nudo que mantenía la cubierta cerrada, mete su mano en el interior y saca la espada que había visto en sus sueños, aquella que vio confeccionar al extraño. Su sorpresa fue enorme, pero para confirmar que era la misma la desenvaina. No había dudas, era una de las espadas amantes. Acaricia la hoja y la empuñadura, lee la frase y toca suavemente la cuerda de color plateado y azul buscando alguna diferencia con la de su sueño. Se pregunta cómo era posible que hubiera soñado con esa espada sin haberla visto antes. La envaina y toma nuevamente la nota para leer la frase de quien la había hecho. El creador era Owain, el ancestro del que tanto había escuchado hablar. Se levanta y se dirige hasta donde estaba el equipaje y el sobre que le envió Jeffrey. Abre la maleta donde tenía su laptop nueva y la saca para luego buscar en el sobre el cristal que tenía la información sobre su familia. Vuelve a la habitación principal y al sentarse en el banquillo enciende la computadora para luego insertar la tarjeta de memoria; enseguida se abre una ventana con distintas carpetas con los nombres de los libros copiados, pincha el que decía "Diario de Owain" y al abrirse busca algo que le muestre alguna imagen de ese antepasado. Al no encontrar nada comienza a investigar en las otras carpetas. De repente, encuentra una que decía "Árbol genealógico de los Crossrose", la abre y allí agranda la imagen que llevaba el nombre de Owain Crossrose. Por primera vez Sarah supo la identidad del extraño con el que ha soñado desde que tiene recuerdos, el desconocido era su ancestro. Sarah no sabía qué pensar, aquel hombre que tantas veces le causó terror y que en los últimos días la había ayudado tanto era Owain Crossrose. Se pregunta si las cosas que le había mostrado y dicho podían ser verdad, para salir de la incógnita lee su diario. Tras lecturas rápidas encuentra que muchos de los eventos que había soñado habían sucedido realmente. Después de tanto hojear llega al suceso que buscaba, uno que había sucedido a finales del siglo dieciséis y en donde él cuenta que creó dos sables muy poderosos y que ambas eran amantes. La joven se pregunta dónde estaría la otra espada, por lo que comienza a buscar en los diarios de sus antepasados, pero lamentablemente no encuentra nada. El paradero de la otra era completamente desconocido, un nuevo secreto a develar aparece frente a ella. Sarah iba sintiendo como su camino se iba llenado de cajas que debía abrir para poder entender todo lo que la rodeaba.