Crónicas de la Arena: El Kazekage, El Clan y El Misterio.

CAPITULO 3

ANTES DE EMPEZAR EL CAPITULO, POR FAVOR LEER ESTE CORTO GLOSARIO, ES PARA MEJORAR SU COMPRENSION DE LA HISTORIA.

Daimyō/Daimio/ Nagashi-sama: Es el Señor Feudal del País del Viento, la máxima autoridad tanto en lo político, económico y militar de tal país. Es un hombre de grandes proporciones con un cuerpo robusto y prominentes mejillas, tiene ojos orientales, unos bigotes finos que van hacia arriba y una pequeña y fina barba.

Kimono: Vestido o traje de dos o tres piezas, hecha de seda, usado mayormente para ocasiones especiales, pero de uso diario para la gente de sangre o clase noble.

Yukata: Vestimenta típica japonesa hecha de algodón. Se usa principalmente para las fiestas de verano o estaciones cálidas. Es mucho más ligero que el kimono porque no tiene la capa que cubre normalmente a este y porque no es de seda. Normalmente es de una pieza.

Kotatsu: Es un marco de mesa bajo hecho de madera y cubierto por un futón o una cobija pesada, sobre el cuál se apoya la superficie de la mesa. Debajo hay un brasero, calentón o estufa, que a veces es parte de la estructura de la mesa misma.

ES TODO, AHORA PUEDEN PROSEGUIR CON LA HISTORIA.

 

CAPITULO 3

Llegó a la sala de reuniones, la mayoría de los líderes ya estaban presentes, y esperaban en silencio, sentados alrededor de la gran mesa oval, la hora estipulada para dar inicio a la reunión. Se reunirían los quince líderes de los clanes más importantes y dominantes de la Aldea, habían pedido la presencia del Señor Feudal, porque tenían un conflicto que no podían resolver entre ellos.

Todos los lideres empezar a murmurar cuando la líder del Clan Taiyō entro en escenario, incluso la miraron de forma desafiante, cosa que no pasó desapercibida para los ojos de Gaara, esta reunión le daba mala espina. Si estos personajes se alteraban serían capaces de atacarse entre ellos, se replanteo la idea de no haberle pedido a Kankurō que lo acompañase como su escolta. El ambiente empezó a tornarse pesado, todos los líderes expresaban molestia en su semblante, exceptuando a la líder del Clan Taiyō; ella siendo consciente de la mirada que sus semejantes le dedicaban, tenía el rostro iluminado y tranquilo, reflejaba una vasta sonrisa en su rostro.

Entonces llego el ultimo integrante que faltaba, era el más importante de todos, si bien Gaara no le temía, le tenía un gran respeto, ya que gracias a su apoyo, él pudo asumir el cargo de Kazekage.

Estaba seguido por su sequito de sirvientes, quienes lo traían en una especie de camilla real, toda adornada con objetos pertenecientes a la nobleza.

― ¡El Señor Feudal se hace presente, levantaros e inclinaros ante su presencia! ―grito uno de sus sirviente, presentando a su amo.

Todos los presentes se levantaron de sus asientos e inclinaron su cabeza a modo de saludo en dirección al Señor Feudal.

―Ya, ya, basta de formalismos ―expreso el Señor Feudal, mientras de forma graciosa se intentaba levantar de su camilla real, se agarró la cadera con dolor y se reincorporo mientras sus sirvientes hacían fuerza levantándolo por completo y se retiraban dejándolo solo―. Dios mío, más les vale que me hayan hecho venir por algo importante, no saben el infierno que es viajar desde mi hogar hasta este lugar, ese viento sofocante que hay en el desierto, ni teniendo tres sirvientes abanicándome todo el día podía sentirme cómodo, y ni hablar del aburrimiento que pasamos yo y mis esposas, espero un gran banquete luego de que arreglemos esto.

Empezó a caminar de forma jadeante a la mesa oval, se sentó a lado de Gaara, pero noto con infortunio que no cabía en la silla.

―Muchachito ¿Serias tan amable de cambiar de asiento conmigo? ―se dirigió a Gaara mientras trataba de zafarse del asiento que lo apresaba―, es vacaciones y me he salido de mi dieta un poco, se amable conmigo, tu que eres flaquito y joven. Ayuda a esta pobre y hermosa bola noble a salir de aprietos ―termino diciendo mientras le extendía la mano hacía el, a señal de ayuda.

Gaara asintió y se levantó rápidamente, estiro con cuidado al Señor Feudal para librarlo de su asiento, este por su parte reboto como una pelota contra el Kazekage, dando la impresión de que estuvo a punto de tumbar al suelo al delgado líder.

Todos los líderes observaron de forma apenada la escena, excepto la líder del Clan Taiyō, la cual estalló en risa, mientras apuntaba de forma burlesca su mano hacia el Daimio.

―Jajaja menudo pedazo de gordo eres Nagashi-san ―se destornillo de la risa―, por poco y nos dejas sin Kazekage de nuevo, ¿con que estabas a dieta? ¿Cuantos puercos te comes en el desayuno? ¿Tres, cuatro o más?

Los demás líderes miraron asombrados a la Taiyō por semejantes palabras que le había dedicado al Señor Feudal. El mismo Gaara la miro asombrado, nadie jamás se había dirigido así ante el rey.

Lo levanto del suelo y lo ayudo a sentarse en su nuevo asiento.

―Me disculpo por el incidente causado, la anterior vez había podido acomodarse entre nosotros, y no teníamos previsto que usted se había extendido ―decía Gaara un tanto tenso por la escena. La risa de la líder Taiyō de fondo no ayudaba a nadie, volviendo todo más tenso.



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En el texto hay: comedia, drama, accion con poderes

Editado: 19.01.2020

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