Crónicas de una Maho Shoujo

Historia 2: Desde las profundidades

Historia 2: Desde las profundidades

 Nuestra heroína se encontraba de compras en el distrito comercial, eran las cinco de la tarde y el movimiento peatonal estaba en su máxima expresión. A Esmeralda le gustaban los domingos, porque no tenía que ir a clases ni tampoco ayudar en casa, era el día perfecto para una joven de su edad.

 —Que linda se ve la ciudad cuando no hay amenazas —susurró para ella misma, Esmeralda no era muy popular a pesar de ser relativamente bonita, por ende pasaba la tarde sola realizando actividades como jugar videojuegos, escuchar música o leer un libro en el parque. Incluso sus grandes poderes de heroína le resultaban inútiles a la hora de vivir su vida cotidiana.

 No pasó nada interesante durante las siguientes dos horas, Esmeralda visitó algunas tiendas, se probó algunas prendas bonitas pero no las compró porque no traía dinero, también se quedó leyendo unas revistas de manga en un puesto antiguo, revisó la cartelera de cine pero ninguna película le convenció, además, no era muy agradable ir sola.

 —Supongo que me iré a casa, necesito llamar a mis amigos más a menudo para salir. —Con ese pensamiento en mente la chica se encaminó hacia su hogar, o al menos eso pensó, de la nada y contra toda lógica narrativa un maldito calamar gigante apareció en la ciudad. Los ojos de Esmeralda se abrieron en par, el coloso medía veinte metros de largo, sus pegajosos tentáculos apestaban y aparte el enorme ojo de su centro veía a todos lados.

 ¿Cómo podía sobrevivir un calamar en tierra firme tan fácilmente?

 ¡Dejen eso!

 ¡¿Cómo un calamar gigante apareció de la nada!?

 Esmeralda no dio crédito a lo que vio, primero lidió con una bruja de pescado y ahora una bestia gigante del océano. Definitivamente no le quedaron ganas de comer sushi durante la noche. Como sea, nuestra heroína creyó que el mundo se iba patas arriba, ya que ni siquiera hubo un anuncio de maldad típico de este tipo de historias.

 Sencillamente apareció, como una lluvia repentina a mitad del verano.

 —¡Transformación! —Tras una secuencia que ya describí en el capítulo pasado y que me da flojera volver a narrar Esmeralda activó su modo chica mágica, posteriormente voló hacia un rascacielos para observar mejor a su viscoso oponente. El calamar giró su ojo gigante hacia su posición, de inmediato lanzó uno de sus tentáculos a gran velocidad.

 —¡No me atraparás!, con el poder del amor y la justicia yo… —Mientras Esmeralda recitaba su canto de guerra fue atrapada por el tentáculo —. Oye, se supone que debes esperar a que termine mi discurso. —El tentáculo levantó a Esmeralda por los cielos y la apretó tan fuerte que sintió como su cuerpo era aplastado.

 Para colmo, los las escamas chocaron viscosamente con sus extremidades provocándole una sensación parecida a las cosquillas. Fue ahí donde Esmeralda recordó una regla de oro en este tipo de tramas: ¡Las chicas mágicas eran débiles contra los tentáculos! (Para más información, revisar obras de este tipo).

 —No… —gimió Esmeralda, de hecho fueron gemidos medio atrevidos que no se podían describir acá porque si no me borran la historia, en fin, todos los ciudadanos corrieron aterrados, el maldito calamar disparaba rayos láser de su ojo y sus dientes fueron lanzados como misiles a todos lados.

 ¿Cómo llegamos a este tipo de situación?, ese era el pensamiento que rondaba la cabeza de Esmeralda, trató de pensar en una idea para resolver este problema, pero todo lo que venía a su mente era olor a pescado.

 —N-No puedo rendirme, las personas de esta ciudad cuentan conmigo, ¡golpe de Gaia! —Unas ramas de madera salieron de las manos de Esmeralda, éstas destrozaron el tentáculo que la sujetaba, posteriormente voló más arriba, hasta quedar por encima de su antagonista —. No sé de donde viniste o quién te invocó, pero vas a largarte de una buena vez. —Esmeralda sonaba confiada y llena de energía, todo un contraste con su personalidad original.

 Ella siempre soñó con decir esas palabras en el aula, pero se quedaba callada y mantenía la mirada baja, ¿por qué se tenía tanta confianza transformada?, ¿acaso la existencia de Esmeralda de la Luz solo era válida como chica mágica?

 Nuestra heroína no quiso darle importancia a sus problemas personales, de inmediato varias ramas salieron del suelo y aprisionaron al calamar, no obstante, éste se liberó con un gran estruendo. La estrategia pasada no iba a funcionar, necesitaba algo nuevo, también, debía alejarse de esos tentáculos o seríamos testigos de una escena de fanservice barato llena de gemidos y ese tipo de cosas.



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En el texto hay: romance, chicas magicas, accion y drama

Editado: 11.04.2019

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