Crónicas de una Maho Shoujo

Historia 3: Magical Fénix

Historia 3: Magical Fénix

 Las historias de este tipo normalmente debían seguir ciertos patrones para estar dentro de esta clasificación y el día de hoy no era la excepción.

 Nuestra heroína yacía arrinconada por dos enemigos muy fuertes, el primero era un domador de bestias que fracasó como cuidador de animales y ahora los usaba como armas, aparentaba tener cuarenta años de edad, vestía un sombrero puntiagudo negro y una capa que cubría el resto de su cuerpo. Frente a él había un león negro repleto de dientes feroces, aún así, dicha bestia a duras penas obedecía a su domador.

 El otro enemigo era menos intimidante, pero tampoco debía ser tomado a la ligera, tenía dos orejas de ratón colgando sobre su cabeza y un hocico parecido a un oso pardo, no obstante caminaba en dos patas y mostraba signos de inteligencia.

 —No creí que el hombre bestia y el domador salvaje se unieran en mi contra, supongo que los subestimé. —Magical Luz retrocedió un poco más para recuperar distancia, su mirada no se despegó del león, ya que éste era el oponente más poderoso.

 —Hoy será el día de tu caída, Magical Luz, ¡la ciudad será nuestra! —exclamó el domador, al hacerlo agitó su látigo fuertemente hacia el suelo, con el estruendo la bestia se lanzó contra Esmeralda con toda la intención de morderla en el cuello.

 —¡Escudo de Gaia! —Del piso salieron unas ramas que se amontonaron frente a la chica mágica, al hacerlo el león terminó mordiendo madera en vez de carne, además, le dio a Esmeralda tiempo suficiente para dar un salto sobrehumano de dos metros y apuntar al domador —. ¡Rayo de la esperanza! —gritó la chica, de sus manos salió un rayo de energía morado, por desgracia el hombre bestia saltó en protección a su compañero y con sus propios brazos amortiguó el impacto.

 —Pierdes tu tiempo, las criaturas mágicas tenemos resistencia a la hechicería, es algo básico que debiste aprender durante tu entrenamiento —fanfarroneó el humanoide.

Nuestra heroína estaba realmente arrinconada, el León retomó su atención hacia ella y el mismo escudo no la volvería a salvar. Magical Luz intentó escapar, pero si lo hacía los villanos podrían atacar a gente inocente, ¡menuda decisión!, aún así, no era la primera vez que corría peligro.

 “¿Qué debo hacer?” pensó detenidamente…

 ¡Y en ese momento pasó algo increíble!, de la nada, una chica con una mini falda roja y blusa del mismo color con llamas bordadas saltó desde un poste de luz para quedar justo enfrente de Esmeralda, los dos antagonistas abrieron sus ojos en par y posaron sus miradas en aquella misteriosa mujer.

 —¿Quién eres tú? —cuestionó el domador.

 —Veo que no me conocen, yo soy la campeona de la justicia, ¡Magical Fénix!, con mis llamas voy a purificar este mundo de insectos como ustedes. —Toda historia de chicas mágicas necesitaba a una aliada inesperada que salva el día en el último segundo y Magical Fénix definitivamente cumplía ese rol, era una chica de cabello rojo y un cuerpo ligeramente menos dotado que el de Esmeralda. Aún así, sus ojos violetas ardientes de pasión le daban un encanto especial muy diferente al de Magical Luz.

 —¿Otra rara con traje ridículo? —susurró el hombre bestia.

 —Así parece. —Incluso Esmeralda estuvo de acuerdo, el atuendo de Magical Fénix era demasiado llamativo, tanto que su paleta de colores podría causar dolor de cabeza al mirarlo por mucho tiempo.

 —¡Oye!, no se supone que debemos estar del mismo lado. —Se quejó la heroína candente.

 —Sí, lo siento, es que no me esperé tu llegada.

 —Es que nadie se espera la llegada de los héroes. ¡Eso es lo divertido! —Tras decir ese argumento tan poco inteligente la chica se colocó a lado de Esmeralda, entonces encaró al hombre bestia —. Yo poseo más ataques físicos, me encargaré del humanoide, tú del domador.

 —De acuerdo —complementó Esmeralda.

 La balanza volvió a estar pareja, Magical Luz desató nuevamente una rama directo hacia las patas del león, éste dio un salto para evadir dicho movimiento, por fortuna, Esmeralda previó esa maniobra,  las ramas se transformaron en serpientes amarillas que brincaron también para atrapar al león en el aire, provocando así una dolorosa caída directo al suelo.



#18874 en Fantasía
#3988 en Magia
#26742 en Otros
#3971 en Humor

En el texto hay: romance, chicas magicas, accion y drama

Editado: 11.04.2019

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.