Capítulo 2 “La misteriosa carta”

Capítulo 2

“La misteriosa carta”

Las horas pasan y pasan, hasta que se cumplen cerca de las nueve de la noche. A esa hora, Alexis sale del gimnasio aparentemente más aliviado. Extrañamente, en todo el tiempo que estuvo en el gimnasio, no tuvo más imágenes raras en su mente. Aun así, la preocupación, por tales imágenes no había desaparecido, hasta que, sin darse cuenta, llega a su casa. Al llegar, se encuentra con lo que parecen ser sus amigos, compuestos por cuatro chicos y tres chicas. Las mujeres caminan delante de los hombres, mientras que los hombres caminan en grupo de a dos. Los que están atrás de las mujeres, son los más pequeños, mientras que los que están detrás de ellos, son los más altos. Todos ellos, al ver llegar a Alexis, se acercan a él. El primero en dirigirle la palabra, es un joven de los de estatura alta, de aspecto delgado, de tez morena, cabello castaño negro y ojos café claro.

— Te estábamos buscando. ¿Quieres salir a jugar? –Alexis los ve a cada uno fijamente, hasta que fija sus ojos en una chica, la más delgada de las tres, de largo cabello castaño claro y ojos verdes, al verla, cierra sus ojos, mira al suelo y luego, en forma muy tranquila, contesta.

— Por hoy no Jim, estoy cansado. –Jim, de solo 10 años, junto al resto de los chicos, se quedan en silencio, a excepción de una persona a la que Alexis había mirado antes. Esa actitud de él hace que ella no se quede callada y lo increpa, preguntándole.

— ¿Acaso aún sigues molesto conmigo por el pelotazo que te di? –Alexis la ve, se acerca a ella y le dice.

— Sigues con ese rostro de pocos amigos, no va contigo Katherine. –Alexis sigue con su camino, pero ella, también de 10 años, al ver que este le da la espalda, lo toma del hombro y bruscamente le da vuelta hacia ella, dicho movimiento hace que algo se le caiga a Alexis, pero él no se da cuenta de ello, solo ve a Katherine, que le dice.

— ¡Te estoy hablando Alexis, no te atrevas a darme la espalda! –Alexis, que no se percata de lo que se le ha caído, se queda mirándole de una forma muy tranquila, luego saca la mano de Katherine de su hombro y le dice, serenamente.

— No te pongas así. Si no cambias ese rostro, te quedarás así por siempre. –En eso, otro joven, el más delgado de todos, de cabello corto, color castaño claro y ojos castaños, pasa tropezando con Jim, que estaba hincado en el suelo.

— Oye, ¡ah perdona Jim!  Ustedes dos, ¿Por qué no arreglan sus asuntos, ahora? –De inmediato le sigue otro que está al lado de él. Quien es de contextura algo obesa, de cabello y ojos castaño oscuro. Siendo el menor de todos los hombres, de tan solo 8 años. Este evade a Jim, que recién se estaba poniendo de pie.

— Adrián tiene razón, es hora de que arreglen sus asuntos ahora, parecen adultos peleando de esa forma. –Adrián mira al más chico y dice.

— Barler está de acuerdo conmigo. ¿Y tú, Alberto? –Alberto, de 9 años, es uno de los más altos de estatura. Este es más alto que Barler; quien es delgado, de cabello corto de color negro y ojos café oscuro. Alberto dice.

— A mí me da lo mismo, total, yo no tengo nada que ver en este asunto. –En eso, una de las chicas les dice a todos, con una voz muy sutil.

— Déjenlos que discutan, si parecen novios como lo hacen. –Katherine ante tal comentario se sonroja, lo mismo pasa con Alexis. La primera se acerca a su amiga y recrimina, diciendo.

— ¡Patricia, no digas tonterías! A mí no me gusta, Alexis es un antipático. –Patricia, que tiene 10 años, es una chica de contextura delgada, tez morena, de pelo largo castaño claro y ojos café claro. Solo atina a reír ante la actitud de Katherine, que mira rápidamente a Alexis, quien también está algo ruborizado. La más delgada de todas, al ver a ambos, dice.

— Parece que Patricia tiene razón. Ustedes se gustan, por eso pasan discutiendo, haciendo de algo pequeño una gran discusión. –Katherine se vuelve para mirar a esa chica y muy ruborizada, le pregunta.

— ¿Tú también Francisca? –Francisca, de 10 años, tiene el cabello largo de color negro y ojos del mismo color.  Se ríe de buena gana, ante el comportamiento de su amiga. Y, entre risas, le dice.

— Vale, vale, haz que no me escuchaste. –En eso Jim, aprovechando que todos sus amigos están concentrados en Katherine como en Francisca, aprovecha de preguntarle algo a Alexis.

— ¿Y esta carta, parece ser tuya? –Alexis se acerca un poco más a Jim y le pregunta.

— ¿A ver? –Jim le muestra la carta y Alexis se da cuenta de que es la suya, de inmediato busca en su terno, dándose cuenta de que la carta no está donde la dejó. En eso, Jim le dice.

— Cuando Katherine te movió con brusquedad, la carta se cayó al suelo, pero solo yo me di cuenta. –Jim le da la carta y luego Alexis, aprovechando que sus demás amigos están en una acalorada charla, se guarda la carta. Jim, en tanto, le pregunta.

— ¿Y quién te la mandó? –Alexis lo piensa un momento y luego contesta.

— No tengo idea, solo vi mi nombre y la guardé, pero más allá no me he fijado. ¿No la leíste? ¿verdad? –Jim le contesta.

— ¿Cómo crees? Claro que no la leí, pero ¿Sabes? Mi hermana mayor recibió una carta idéntica a esta. –En eso, son interrumpidos por Francisca. Alexis ágilmente se cierra el terno, para que la carta no esté a la vista. En eso, ella les dice a los dos.