Crónicas del Miedo

El Closet

La luz estaba encendida a tope donde sin duda no había más oscuridad para la jovencita. La ojos azules sabía que esta sería la última parálisis que la azotara y sentía un terror profundo de ver lo que esta vez le deparaba. Abrió los ojos y se topo con la luminiscensia del foco de la habitación. Sin esperar más, sin crepitar más, ahí estaban ellos... los oscuros entes que la habían estado atormentando por varias noches, estaban frente a ella, viéndola.

A la jovencita no le dio tiempo de racionar cuando ya el descascarado, la sombra de la mujer y su igual, estaban tomándola en brazos y guiándola a las puertas del closet en su habitación, como quien carga a alguien en estado vegetal. 

Su igual, la joven del espejo, abrió las puertas de par en par y aterrorizada, la jovencita no vio más que una inmensa oscuridad absorbente en su interior. Un torbellino que iba profundizando y espirales hacia el más allá. La jovencita abrió los ojos lo más que pudo y los tres entes rieron jocosos ante el susto mudo de sus ojos.

A pasos lentos caminaron hacia el interior del closet recitando al unísono: Despierta ahora, despierta ya, despierta hacia tu realidad, Caroline. Nadie te comprende, todos creen que estas loca, reacciona, abre tus ojos. 

Caroline, Caroline, Caroline... 

Despierta ahora, abre tus ojos...

La oscuridad se cierne sobre ti...

Caroline, Caroline, Caroline...

La jovencita despertó, siendo rodeada de acolchadas paredes, de un frío arrasador. Las ojeras adornaban las cuencas de sus ojos, el labio inferior reseco le temblaba ante los escalofríos que sentía. Giró la cabeza rápidamente a la izquierda y luego a la derecha, no vio a nadie, estaba en el piso, estaba encogida como un ovillo. 

Y nuevamente oyó las voces.

¿Crees que ahora sí pueda hablar?

No lo creo, nada más mírala, está enferma.

Quizá pueda decirnos algo..

No nos va a decir nada, ninguna persona en ese estado de salud puede confesar algo así, igualmente ya tenemos los estudios.

Caroline estaba encogida mirando en todas direcciones pero no había nada, no había nadie. Las voces la volvían loca, la atormentaban, la enfurecían. Gritó: Ellos me lo dijeron, ellos me dijeron que lo hiciera, me susurran, se apoderan, me ahorcan, me escupen, se ríen de mi, me obligan a ver hacia la luz, me obligaron a cruzar... me obligaron a caer.

Caroline comenzó a gritar, a gritar fuerte, a gritar alto. 

Más allá de las paredes los médicos la veían, la oían y seguían cada registro de la joven, que sin más que negar la cabeza, dieron por concluido el horrible final de una mente tortuosa. El caso de una joven de 14 años encerrada en una cárcel hecha a conciencia , donde ella misma era su carcelera y donde imaginaba entes que la obligaban a asesinar y a despertar una y otra vez de pesadillas donde estuvo sumergida realmente durante 2 años. 

 

Caso #2763 / Expediente Cogno-conductual de Caroline Steve / 14 años de edad.

Caroline asesinó a sus padres y a su hermano Mark ahorcándolo en la bañera. Reflejando sus miedos en sus parálisis de sueño y la culpabilidad de sus actos en los mismos. 

Estado de mente: Demencia Infantil.

Años de probatoria mental: 2 años.

Cura: Sin cura.

Estado del paciente: Culpable / Perdido. 

Causa de los actos: Incomprensibles.

Metodología procedimental: Eutanasia. 

 

Caroline Steve fue sentenciada a muerte sin juicio dado los exámenes de patología psicológica realizados durante dos años donde se observó un comportamiento autodestructivo formado en base a la culpa causada por la realización de tres homicidios de familicídio. La joven procreó a conciencia estratos vívidos donde durante sus "parálisis" se autolesionaba y procreaba pedazos de lo que para ella fueron sus padres. 

Nunca se supo que causó la demencia en Caroline.

Nunca se consiguieron los cuerpos de sus padres.

Nunca se supo porqué asesinó a su familia. 

 

Basado a trozos de hechos reales y de la vida misma.

Los Oscuros.

Buenas noches.




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