Crónicas post-apocalípticas

La Metamorfosis (segunda parte)

Todo Korea comparte un gusto por las comidas abundantes y el descubrimiento de la variedad de alimentos que la guerra nos trajo. Una guerra que pasó, y que no sabemos quien inició, o quien ganó. El antiguo régimen del Juche, y las ideas del Songun, fueron abandonadas y sustituidas. No hay militares desde hace años, todos somos soldados civiles que nos protegemos y gobernamos solos. Cambiamos la autosuficiencia dirigida por el partido y el “amado” líder, por una nueva vida sin líderes únicos. Esta nueva era esta llena de abundantes alimentos, yo era una bebita durante las hambrunas en 1998. Varios millones murieron de hambre, y nuevamente unas décadas adelante, siendo a los ojos del mundo, una nación con poder nuclear… eramos un pueblo hambriento y esclavizado con lemas de libertad y trabajo por todos lados, engañándonos con una falsa abundancia. Hoy, me veo como una antigua miembro de la Liga de la Juventud Kimilsungista-Kimjongilista que ha hallado la paz, y que estoy envejeciendo un un pueblo donde la comida es abundante, la libertad es nuestro regalo de cada día… y los mutantes viven entre nosotros, casi como una nueva casta que ha venido a sustituir a los extintos Leales.

 

Min-ki… esa absurdamente humana lobo mutante… De tamaño ligeramente superior al de un humano promedio, y de aterradora belleza. La veo comer con mis nietos, la veo jugar con mi bisnieta. La veo, la observo y vigilo cada día, con desconfianza creciente.

 

Hace unos años de que se dejó de comer lobos mutantes, no ha nacido otro lobo en territorios ocupados por humanos en ese tiempo. Y Min-Ki parece notar esta ausencia. No posee el don del habla, pero sus expresiones, aunque simples, son muy humanas, demasiado diría yo por cierto…

 

En los territorios de los antiguos campos de trabajo, donde millones murieron en completa esclavitud, aún queda una granja donde producen carne de lobo. Este reciente taboo, de comer carne de lobos, es ahora una moda oculta, un mercado subterráneo con grandes ganancias, donde se comercia incluso con, dicen los rumores, esclavos de otros países. Nosotros, quienes eramos esclavos de un régimen totalitario, con un Líder que se creía un dios. Ahora somos los esclavistas… y eso nos avergüenza profundamente a todos, aunque se sabe, no se hace de manera abierta, pero se sabe, se oye, se dice, se comprueba. Y esos que son hallados con esclavos son prontamente suprimidos y exiliados. Se dice que entre los sobrevivientes de otros países la esclavitud es normal, pero no me consta.

 

Mañana saldrá una delegación de nuestra pequeña isla, hay un pequeño terreno en la orilla que no se está utilizando, y deseamos construir, pero es “territorio” de otro clan familiar. No somos groseros, pero deseamos expandirnos y crecer un poco. Tengo a la vista el antiguo estadio deportivo de Rungrado, ahora una granja de cárnicos y refugio seguro en caso de un posible ataque. No hay enemigos naturales o humanos en ningún lado, pero nuestra mentalidad es militarista, aunque no nos guste, y pensamos, o al menos tratamos de pensar en todo. El clan vecino está dispuesto a darnos la orilla que no ocupan para construir casas, pero desean aliarse con nosotros y usar el estadio. Nos estarán recibiendo en el puente Chongryu.

 

-.- -.- -.-

 

El intercambio se realizó con grandes ganancias para todos, no sólo podremos crcer más allá de la isla, sino que contaremos con fuerza de trabajo más que suficiente para eso. ¿El punto malo?, siempre hay uno.

 

Min-ki (como previamente lo sospechaba)

 

La loba resulto ser motivo de una acalorada discusión, los visitantes primero la admiraban y hacían comentarios sobre lo hermosa que luce, y lo humana que podía ser a la vista. La comparaban con personajes de dibujos animados, Mangas y Manhwas de cuando el mundo existía antes de las explosiones y las guerras que creemos que pasaron en el mundo entero. Pero después, al calor del vino de las frutas. Uno de los visitantes trató de acariciar, muy humanamente a la loba. La reacción nos asustó, por un momento pensamos que lo agredería, aún tiene unas garras (delanteras y traseras) muy afiladas y peligrosas, y el hocico aún es lobuno… Pero su reacción resultó ser demasiado humana. Comenzó a gemir con verdadero erotismo, con voz demasiado femenina para ignorarla.

 

Resultado, tanto mis nietos como muchos de los visitantes defendieron a la “dama en peligro”, y cuando uno de ellos golpeó al “agresor”, hubo un breve pleito con los amigos de este, y aunque el pleito tuvo su parte de golpes y uno que otro herido con la nariz sangrando, no llegó a mayores. La loba simplemente se escondió en casa y no se acercó a los visitantes en todo el tiempo que estuvieron aquí. Aunque los visitantes se disculparon, hubo quien, más adelante, dijo haberse sentido tentado a tocar a la loba, por considerarla hermosa. Uno de ellos hizo señas con murmullos ebrios al referirse a ella y sus glándulas mamarias en desarrollo… Un detalle reciente que la hace lucir como una mujer adolescente humana. No tiene las tetillas que los lobos tienen, sólo tiene 2, en el mismo lugar que cualquier otra chica humana. Y esto ya es demasiado.

 

Hubo una reunión de emergencia, esta criatura, esta mutación, es claramente humana, y nos hace pensar si, las primeras mutaciones serían humanos transformados por la radiación de las explosiones en el cielo, y que es la humanidad retornando a su normalidad… es evolución, no importa por donde se vea, es evolución, y no podemos ignorar más la presencia de una semi-humana. Una Mujer bestia, como se les llamaba en la literatura de ficción y fantasía que los creó. Una que es atractiva a los ojos de los hombres y eso me resulta, extraño… Y ciertamente asqueroso, por cierto. Kim Jeong, nuestro visitante e invitado, nos horrorizo a todos al llamarla “Min-Ki Agasshi” y tratar de cortejarla en medio de su borrachera.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.