─¿Eso es lo que tienes que informar Krong?
─Eso es lo que pasó Comandante Vlad, conseguimos los restos de esa cápsula a la deriva, seguro se la tragó el mar, y la nave donde intentaron escapar, pudimos derribarla, no hay sobrevivientes.
─¿Pero no pudieron conseguir el dispositivo?
─Mire, si la chica logró salir de la nave, no pudo haber llegado a ninguna parte, en medio del mar en la noche, lo más seguro es que se haya ahogado o terminó devorada por alguna bestia marina, las corrientes en ese lugar son fuertes, y si en caso que haya podido llegar a algún lugar, lo más cercano era la isla Ha"Melekh que esta cerrada por los aleshianos. Y no me iba a arriesgar a tener un conflicto con esa gente.
─Los aleshianos son temperamentales, son una potencia militar a considerar, espero que estés en lo cierto, Ramiz vendrá a como invitado a Zenit para presenciar nuestros ejercicios militares.
─¡Ramiz viene! ─exclamó sorprendido el sargento─, y no se me informó.
─¡Te lo notifico ahora!, Korej lo invitó y ya llegó a Fronda, están en camino para acá, me adelanté en cuanto a la seguridad. Habrá una serie de reuniones y nuevos acuerdos que firmaremos con los koralianos, entre ellos la asistencia militar de amistad y cooperación conjunta.
─Tenía entendido que nos deslindaríamos de ellos.
─Hay cambios, y de otras cosas que después te enterarás, a su debido momento, solo tengo que añadir, que escogimos esta ciudad porque queremos que los aleshianos sepan de nuestra nueva alianza con los koralianos, es enviarle un mensaje indirecto a ellos.
─Pero si nunca hemos tenido problemas con ellos. ─aseveró Krong.
─Es cierto, pero son una potencia militar que está en conflicto con los koralianos, nuestros nuevos aliados, Ramiz nos informará sobre ello a su llegada.
─Vlad toma un portafolio y saca unos documentos para entregárselos a Krong─. Esos papeles contienen los expedientes de los posibles conspiradores, hay un cartel sindical mafioso en esta área que fueron los que nos informaron sobre el escape de Maya Groi, entrégales la recompensa a los que nos colaboraron, y captura a quienes le ayudaron. Acabaremos con ese clan sindical rival antes que lleguen Korej y Ramiz, ¡asegura esta ciudad! –Ordenó el comandante tzaring.
─¡Se hará como usted dice señor!
Krong toma los papeles, había una orden de detención firmada contra Jair Refa, y otros miembros del cartel de contrabandistas de la ciudad.
Pero no muy lejos de ese lugar, en unos galpones abandonados, estaba Jair con varios de sus miembros más leales evaluando la situación. Jair había tomado previsiones al caso logrando escapar a otros sectores escondidos en la ciudad, donde estaría seguro por un tiempo, y moviéndose de lugar en lugar para burlar la búsqueda por su cabeza.
─Mi amigo Kaled murió, he perdido amigos e inversiones a causa de varios traidores. ─gritó Jair Refa con su melódico acento zenobiano.
Un secuaz de Jair, arrastraba a otro hombre que estaba muy golpeado.
─¡Habla ya! ¿por cuantos créditos me vendiste?
─Señor Jair, le juro que yo no he dicho nada ─sollozaba el hombre.
─Tienes que haber sido tu, eras el único que no ha sido detenido, pasaste controles tzaring sin problemas.
En eso, uno de los colaboradores del jefe mafioso interviene:
─Señor, le encontré esto al momento de secuestrarlo.
─¡Aja!, mira esto, aviso de recompensa, y está la hora de salida de las naves donde iba mi amigo Kaled. ¿De donde lo sacaron? —gritó enfurecido y más sonando su acento siseado zenobiano.
─¡Lo tenía en su chaqueta jefe!
─¡Señor lo juro!, yo encontré ese papel, y le pensaba informar a usted.
─¿A ver donde lo encontraste? –chilló Jair con su acento cantado.
─En la calle señor, cerca del hangar.
─¿Y tardaste tanto en informar sobre eso? ─interrogó Jair.
─Usted estaba ocupado.
─Sabes bien que eso no es una excusa, siempre estoy disponible para estas informaciones.
En ese momento llega otro matón de Jair y saca un dispositivo de video. Al cual Jair se queda observando detenidamente y al cabo de un momento vuelve a decirle al presunto soplón.
─Mira este vídeo, muestra cuando hablas con un tzaring, te grabaron y como recibes ese papel.
La cámara de video filmó a una cuadra de distancia, cuando el presunto soplón se aleja y habla con un hombre vestido como ezrahim, pero por su caminar se veía el porte militar, evidencia que es un tzaring encubierto, el video se aprecia cuando el hombre le dice que había visto a Maya, la mujer que estaba en el papel de notificación, el tzaring le entrega el papel y se aleja.
─Creo que no tienes nadas más que agregar, vendiste a mis amigo y me hiciste perder dinero, ¿por qué los hiciste? ─increpó molesto Jair al soplón.
─Señor Jair por favor no me mate, yo tengo hijos. Lo hice por necesidad.
─¿Acaso no te pago bien?
─Si, pero estoy pasando por una necesidad señor Jair. No me mate por favor.
─¿Necesidad? Eres un vicioso sexual, te la pasas pagando prostitutas y tienes deudas, eso lo sé. No te mataré porque conozco a tus hijos, solo una pregunta más, ¿dijiste que yo ayudaba a esta gente? ─Jair se halaba su grueso bigote negro.
─¡No señor!
─Y entonces, ¿Por que quieren apresarme?
─No lo sé señor.
─Buenos, ─y sacando un arma de su chaqueta apunta al hombre─, te mataré por soplón.
─Señor, usted prometió no matarme por favor. ─sollozó el moribundo soplón.
─¿Ah?, lo dije, es cierto, dije que no te iba a matar. ─Voltea su mirada a otro de sus secuaces y le dice─: ¡mátalo!
─¡Pero señor, usted prometió...!
─Cierto, yo prometí que yo no te iba a matar, pero ellos no, y odian a los soplones.
El hombre es amordazado y arrastrado hacia afuera y entre murmullos, lo sacan hacia un patio y se escucha unas detonaciones de unas armas láseres, seguido de un silencio.